La reina Letizia cumple 52 años: 'Su relación con los Borbones nunca ha sido buena'

La reina Letizia cumple hoy 52 años. Según ha trascendido, la soberana tendría previsto celebrar su nuevo aniversario en Zarzuela. En compañía del rey Felipe VI. Pero no de sus hijas.

La Princesa Leonor continúa su formación militar en la Escuela Naval de Marín (Pontevedra). Por su parte, la infanta Sofía se encuentra estudiando bachillerato en del centro UUWC Atlantic College (Gales).

Se desconoce si los padres de la monarca, Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz se acercarán a la residencia real. Ambos se encuentran muy pendientes de su nieta Carla Vigo, quien ha vuelto al piso tutelado debido a diversos problemas de salud.

Tampoco se conoce si su hermana Telma se dejará caer por el Palacio de la Zarzuela. O la reina Sofía, que también reside allí junto a su hermana, la princesa  Irene de Grecia.

La monarca ha vivido un año de lo más frenético. Ha pasado una década desde que ascendiera al trono y también se ha consagrado como una auténtica ‘reina de las redes sociales’.

Sobre su figura han resonado con fuerza los ‘dardos’ lanzados por su excuñado, el economista Jaime del Burgo. Además, las tensiones familiares no han dejado de suscitar interés entre la opinión pública. Cabe recordar que la soberana no asistió a la boda de Victoria López-Quesada y de Borbón-Dos Sicilias, una de las ahijadas de Felipe VI.

Pero, ¿cómo está realmente la relación entre la reina Letizia y los Borbones?

Una compleja relación familiar

En 2003, una joven Letizia Ortiz Rocasolano dejaba atrás su vida como una 'ciudadana de a pie'. Abandonó una carrera prometedora como presentadora de los informativos en TVE y el anonimato que gozaba hasta aquel año. 

La entonces periodista había iniciado una relación con el príncipe Felipe de Borbón. Tenía 31 años y una nueva vida por delante como miembro de la Familia Real española. Una situación de lo más compleja para la soberana y la cual dio pie a una difícil relación con algunos integrantes de su familia política. 

"Creo que la mala relación que mantiene con algunos miembros de los Borbones no es ningún secreto. La relación con la familia de su marido ni es buena ni nunca ha sido buena", sostiene la escritora y politóloga Ana Polo en una conversación con elcierredigital.com.

Pero, a lo largo de los años, tanto la reina Letizia como el resto de la familia real han reflejado una buena relación frente a la opinión pública. "Han intentado mantener las formas. Más allá de un encuentro puntual, no es ningún secreto que no hay apenas relación entre Letizia y la familia de Felipe", revela Polo. 

En última instancia, la soberana ha coincidido con la familia real en el marco del funeral de Juan Gómez-Acebo o Alejandro Fernández de Araoz. Allí no solo se ha vuelto a reunir con los Gómez-Acebo, también con los reyes Eméritos o sus cuñadas, las infantas  Elena y Cristina. 

"Creo que es una relación que está completamente rota. Lleva rota desde hace muchísimo tiempo. Pero que han aprendido a sobrellevarse. Tampoco creo que sea una situación tan anómala como la que quieren vender, es algo que le pasa a un montón de familias. Pero en este caso nunca ha habido feeling", revela la politóloga.

Pero si retrocedemos a los inicios de la soberana en la familia Borbón, cabe recordar que la entonces princesa de Asturias sí encontró diversos apoyos. Uno de ellos fue el ex duque de Lugo, Jaime de Marichalar. Un vínculo de lo más sorprendente y que ha perdurado a lo largo de los años. 

Otro fue al lado de su cuñada, la  infanta Cristina. La relación entre ambas era excelente. De hecho, junto a Iñaki Urdangarin facilitaban a la pareja los lugares donde poder encontrarse en Barcelona.

"Es verdad que con Cristina sí hubo una buena amistad. Sobre todo cuando la reina era novia del príncipe Felipe", apostilla Ana Polo.

Pero lo que comenzó siendo una relación excelente acabó en una ruptura sin precedentes después del estallido del Caso Noós. "Letizia fue una de las primeras en imponer un auténtico 'cordón sanitario' a una serie de personas para intentar proteger la Monarquía. Esto tuvo un coste personal a nivel de familia", sostiene.

"Ahora, insisto, la relación es completamente inexistente aunque sí hay cierto vínculo con sus sobrinos, pero muy puntual", concreta Ana Polo.

La tensión con doña Sofía

Otro de los miembros con los que la reina Letizia mantiene una fría relación es con la reina Sofía. Como contábamos en elcierredigital.com, "la relación entre la monarca y la reina Emérita es inexistente".

Y este pasado año se hizo patente en Mallorca. Doña Sofía optó por abandonar Marivent antes de que llegara la reina Letizia. Ni siquiera apareció en el tradicional posado. 

Y este año tan solo han aparecido juntas en una cena en el Portixol, concretamente en la recepción a la sociedad balear. Ambas intercambiaron palabras, pero lo cierto es que el vínculo es ilusorio. 

"Se ven puntualmente. Tampoco es ningún secreto que la relación esté completamente rota. Nunca ha sido fluida. Ni fácil en los últimos años", sostiene la escritora.

"Yo creo que es lo que les pasa a muchas mujeres con sus suegras. Sobre todo una suegra tan implicada con el hijo como es la reina Sofia. Han acabado haciendo vidas por separado y cuando se juntan intentan ser educadas la una con la otra", revela Ana Polo.

La 'reina' de las redes

Ambas reinas sí coincidieron en Mallorca. Pero no en París donde apoyaron al equipo español en los Juegos Olímpicos. Fue en el marco de las Olimpiadas donde  la reina Letizia se ha consagrado como una auténtica 'reina' de las redes. 

Fue el pasado mes de junio cuando la Familia Real española dio el salto a las redes sociales. Doña Letizia se ha convertido en una figura de lo más popular en Instagram.

"Soy de las que aplaudo que la Casa Real abriera un perfil en Instagram. Pero la Casa Real sigue siendo muy hermética y tiene una política de comunicación muy cerrada", sostiene la politóloga.

Es por ello que según apunta la politóloga "se debería de explotar más la imagen de Letizia". "Creo que la tienen en un excesivo segundo plano. En mi opinión, para que no eclipsara a Felipe".

"No han sabido encontrarle una buena agenda. Tampoco un buen tema", revela la escritora. "Letizia es una persona espabilada. Que tiene mucho carácter y muchas cosas positivas. Creo que tiene la oportunidad de poder tener más protagonismo y una agenda mucho más ambiciosa", revela la politóloga. 

Un icono de estilo

Además de una formación exquisita y una capacidad de comunicación admirable, uno de los aspectos más aclamados por la prensa internacional es su evolución estilística. La estilista Emilia de Havilland ha revelado para elcierredigital.com que "la evolución estilística de la soberana refleja su crecimiento personal. También su rol en la Monarquía".

"Al principio su estilo era más discreto y formal. Con el tiempo ha ido ganando confianza en su imagen. Lo que le ha permitido arriesgar más", comenta.

En 2003 comenzó a dejar atrás la el habitual tándem de traje chaqueta al que nos tenía acostumbrados. Faltaban varios años para que comenzara a arriesgar en mayor medida. 

Por aquel entonces habría sido toda una sorpresa ver a la entonces princesa de Asturias con una falda lápiz de piel. Un corte de pelo bob o un maquillaje de ojos ahumado. 

"El estilo de la reina Letizia es elegante, sofisticado y moderno. Siempre combina tendencias de moda con una imagen sobria y adecuada a su posición", sostiene la estilista Mireia Martin a Elcierredigital.com. 

Desde que ascendiera al trono, la reina se ha convertido en todo un icono de estilo. "La reina sabe como mantener el equilibrio contando con prendas que son tendencia con otras que son más sobrias y minimalistas", asegura.

Un icono que apuesta por la moda nacional y, también, local. En su fondo de armario no faltan firmas como  Carolina Herrera, Moisés Nieto, Boüret  o Teresa Helbig. También Zara o Mango. Grandes de la moda internacional no faltan. Desde Victoria Beckham a Dior. 

"La reina podría ampliar su colección con marcas que apuestan por materiales reciclados o prendas ecológicas como Stella McCartney o Ecoalf. También Ganni o Gabriela Hearst", confiesa Martin. 

Para la estilista Mireia Martin el hecho de que la monarca apueste por la moda nacional "es un refuerzo a la identidad cultural del país".

"Hace que al elegir marcas nacionales indirectamente apoya al sector económico ayudando a gener empleo y contribuye con el crecimiento de pequeñas y medianas empresas", sostiene la estilista.

Una año de cambios

2024 ha sido un año muy especial para la soberana. Ha celebrado dos décadas de matrimonio con el rey Felipe. También ha cumplido diez años como Reina de España. 

Parece que la reina ha encontrado su lugar en la familia real española. "Ha cambiado su equipo. Por primera vez ha entrado una mujer. Una mujer con un perfil muy ejecutivo. Me gustaría ver a una reina mucho más ejecutiva, más implicada en causas sociales. No solo de visitas puntuales", argumenta la estilista Martin.

"Creo que, hasta ahora, ha estado relegada a un papel excesivamente secundario. Enclaustrada en un papel excesivamente tradicional y, hasta cierto punto, anacrónico. Creo que Letizia es una persona que podría dar bastante más de sí. De cara al futuro espero que refuercen esa agenda a nivel nacional e internacional", recalca la politóloga Ana Polo. 

Han pasado 21 años desde que se hiciera oficial la identidad de la que sería la futura reina de España. "Le costó muchísimo encajar. Encontrar su lugar como princesa. Durante los últimos años estamos viendo a una Letizia más segura, relajada y natural".

"Esto es una gran baza porque de toda la familia real española la única figura que sabe comunicar realmente es ella", sostiene la escritora.

Y es que la prometedora periodista que se convirtió en princesa, hoy es una de las reinas más aclamadas de toda Europa a sus 52 años.