La socialité Isabel Preysler cumple 75 años con déficit y ocaso publicitario

La socialité Isabel Preysler ha vuelto al foco y en mitad de un posible 'ocaso publicitario'. Este martes, Isabel Preysler ha cumplido 75 años. Una cifra que todavía sigue negándose en los medios de comunicación. La socialité llegó al mundo el 18 de febrero de 1950. No en 1951, como ella misma sigue manteniendo.

En 2022, Elcierredigital.com ya publicó, en exclusiva,  el documento que revela el verdadero año del nacimiento de Isabel Preysler. Pero, ¿por qué continúa el misterio en torno a la verdadera edad de la reina de corazones?

La verdadera edad de Isabel Preysler

Desde que  Isabel Preysler  llegara a España y contrajera matrimonio con el cantante Julio Iglesias en enero de 1971, ha celebrado el día de su cumpleaños en compañía de sus parejas. Desde el cantante hasta Carlos Falcó y Miguel Boyer  o su último romance, el escritor  Mario Vargas Llosa.

Tras finalizar su historia con Vargas Llosa, Isabel Preysler no habría vuelto a tener el corazón ocupado. Aunque, tal y como ha trascendido, la ‘reina de corazones’ podría pasar su cumpleaños en compañía de su hija Tamara Falcó, su yerno Iñigo Onieva o algunas de sus amistades más íntimas.

El cumpleaños de la socialité siempre ha sido objeto de misterio. Al igual que su verdadera edad. El pasado año 2022 Elcierredigital.compublicaba en exclusiva el documento que acreditaba la verdadera edad de la socialité. Algo que sigue suscitando cierto misterio cada vez que llega el 18 de febrero.

Desde hace meses, las apariciones de la ‘reina de corazones’ son contadas. Entre las últimas figura su asistencia a un desfile de moda y al 50º aniversario de Pedro del Hierro, marca con la que hoy trabaja su hija Tamara.

Esta 'desaparición mediática' podría deberse, tal y como informamos en Elcierredigital.com a  que su imagen habría perdido valor en el sector de la publicidad.

El declive publicitario de Isabel Preysler

Desde que aterrizara en España, la socialité Isabel Preysler comenzó a fraguar un sello personal. También multimillonario gracias a colaboraciones con firmas prestigiosas como Porcelanosa. Pero lo que hace décadas era una imagen prestigiosa y muy atractiva para firmas exclusivas, hoy no tendría el mismo valor. 

Según fuentes consultadas por Elcierredigital.com, "en la actualidad se desconoce de donde provienen los ingresos que recibe la socialité". Cabe recordar que Isabel Preysler es uno de los personajes más influyentes de la jet set nacional. 

Es por ello que, tal y como ha podido saber Elcierredigital.com,"su hijo Enrique Iglesias estaría ayudando a su madre a mantener su ritmo de vida". Pero, ¿qué hay tras el ocaso publicitario de Isabel Preysler?

El pasado mes de abril la prensa nacional se hacían eco de que la socialité y su hija Ana Boyer abandonaban la gestión de la empresa 'My Cream'.  Una firma que constaba de una crema de día, un serúm y un contorno de ojos. Y cuyo lanzamiento revolucionó el mercado de la cosmética.

Según ha trascendido, una empresa originaria de Catalayud (Murcia) se habría hecho cargo de la gestión de la marca que creó la socialité. Una firma con la que Isabel Preysler incursionó en el sector de la cosmética. 

Según pudo constatar Elcierredigital.com, "ya no gozaba del mismo éxito con el que arrancó en el momento de su lanzamiento". Estas mismas fuentes confirman que "la marca ya no suscita el mismo interés y se ha convertido en un fracaso".

Pero este no ha sido el último revés empresarial que ha sufrido la socialité. El estreno del documental 'Isabel Preysler: Mi navidad' no contó con el éxito esperado.

Este 'batacazo' televisivo bien recordó al que ya sufrió Isabel Preysler en la década de los dosmil cuando estrenó el programa 'Hoy en Casa'. Ambos programas se grabaron en la conocida 'Villa Meona', la icónica mansión madrileña donde la socialité pasó sus años dorados junto al exministro de Economía Miguel Boyer. 

En esta residencia es donde hoy se refugia Isabel Preysler y en la que no falta la presencia de la firma Porcelanosa. Una de las más históricas en la trayectoria empresarial de la socialité con la que comenzó a trabajar a mediados de la década de los ochenta. Y en la que su hija Tamara ha cogido el relevo de su progenitora. Al igual que su hija Ana quien tambien haa recogido el legado de su madre en marcas como  Rabat o Ferrero Rocher. 

Firmas históricas del andadura empresarial de la socialité, que hoy cumple 75 años y cuya imagen habría perdido valor en el sector publicitario.