Zourab Tchokotua, el 'intermediario' del Emérito que está en las cintas de Bárbara Rey
El príncipe georgiano fue quien propició que Juan Carlos I conociera a la decoradora Marta Gayá, el otro amor de su vida
El escándalo de las fotografías publicadas en ‘Privé’ sobre la ‘relación’ de Juan Carlos I y Bárbara Rey han dado la vuelta al mundo. Este pasado sábado, el director de Elcierredigital.com, Juan Luis Galiacho, desveló en exclusiva la autoría de las famosas instantáneas del Emérito y la vedette.
Detrás de estas fotografías tomadas en 1994 se encuentra Salvador García, hermano de la totanera.
Unas fotografías que forman parte de un arsenal de material inédito que obraría en poder de la actriz. Desde instantáneas a audios en los que no solo aparecerían reflejadas las voces de la actriz y Juan Carlos I. También la del príncipe georgiano Zourab Tchokotua.
Zourab Tchokotoua, fallecido el 19 de julio de 2019, era uno de los grandes confidentes de Juan Carlos I. El príncipe georgiano guardó muchos de sus secretos. Como la relación con la totanera.
Una relación que estuvo marcada por el chantaje, las amenazas y las grabaciones de asuntos de Estado. Un escándalo social y monárquico que ha regresado a la actualidad española.
Un arsenal de grabaciones
Barbara Rey y Juan Carlos I mantuvieron una relación intermitente que se convirtió en un secreto a voces. También en un asunto de Estado. En 1994 retomaron el contacto pese a la recomendación de los Servicios Secretos al entonces rey de España de que diera por finalizada aquella relación.
La totanera y Juan Carlos I no solo compartían encuentros amorosos. También información sobre cuestiones de la talla del golpe militar del 23-F.
Incluso el padre de Felipe VI hablaba sin tapujos sobre sus relaciones íntimas con doña Sofía. Todo quedaba grabado.
Tal y como contamos en Elcierredigital.com, Bárbara Rey tenía la costumbre de grabar los encuentros y conversaciones con todas sus parejas.
El punto de inflexión llegó en 1997. Un año antes, el entonces CESID se reunió con la totanera y le ofrecieron 25 millones al mes para que no desvelara su relación con Juan Carlos I.
Bárbara Rey presentó varias denuncias por el robo de material audiovisual en su casa. Confesó que "estaba asustada" y “tenía miedo de que la mataran”. Concedió una entrevista a la revista Lecturas en la que afirmaba que “estaba recibiendo amenazas de muerte”.
Según sostienen fuentes solventes a Elcierredigital.com, “aquel año Bárbara Rey se confesaba con muchos de los periodistas de investigación”.
Pero, ¿qué esconden aquellas grabaciones entre el rey Emérito y la totanera?
Según estas mismas fuentes, "estas grabaciones desvelan conversaciones acerca de negocios sobre edificios, como el Casino de Palma de Mallorca". "Cabe recordar que en 1997 la familia real, y en especial Juan Carlos I, tenían una alta presencia en el archipiélago".
"En estos audios también hay conversaciones acerca de las comisiones que se obtenían en la industria petrolera". Asuntos de Estado que quedaron grabados. “Desde temas concernientes a la ‘Casa de El Pardo’ hasta la figura de Adolfo Suárez”.
Todo quedó grabado en unos audios comprometidos que Barbara Rey utilizaba y que el CESID no habría logrado incautar en su totalidad.
En estas grabaciones también aparece la figura del príncipe georgiano Zourab Tchokotua. Uno de los confidentes de Juan Carlos I. Quien también propició que el entonces rey de España y la decoradora Marta Gayá se conocieran.
Pero, ¿cuál es la historia de Zourab Tchokotua?
Zourab Tchokotua, el guardián de los secretos de Juan Carlos I
El vínculo que mantenía el príncipe georgiano y Juan Carlos I se remonta a la etapa en la que compartieron pupitre en el internado de los Marianistas de Friburgo (Suiza). El príncipe fue uno de los grandes apoyos de 'Juanito' cuando el conde de Barcelona decidió internarle.
La amistad entre el rey y el "príncipe" georgiano se mantuvo. Por ello, Tchokotoua recaló en Mallorca en los años 70 precedido por su fama de amigo del rey. Fue pieza fundamental en conseguir que la comunidad de Islas Baleares cediera el palacio de Miravent a la Familia Real para pasar allí sus vacaciones.
Allí no tuvo demasiada suerte en los negocios. Y decidió irse a Marruecos, donde también forjó una estrecha amistad con el rey Mohamed VI, otro de los íntimos del Emérito. Por eso vivió retirado durante los últimos años en Rabat, donde, con 82 años, le sorprendió la muerte.
La figura de Tchokotoua también ha estado salpicada por los 'líos' judiciales.
Uno de ellos fue el escándalo de 'Los Almendros' en 1978, que acabó con una declaración de insolvencia por parte del príncipe. Esto le hizo adoptar un discreto segundo plano en la Transición Española.
Finalmente, se libró de la cárcel. Se declaró insolvente para no pagar a los afectados. Otro escándalo tuvo que ver con la concesión de créditos ilegales en Tailandia.
El artífice del primer encuentro entre Juan Carlos I y Marta Gayá
'Zu', como era conocido el príncipe, contrajo matrimonio con Marieta Salas, a quien conoció en Mallorca.
Marieta se mueve en los exclusivos círculos de la alta sociedad mallorquina. También es íntima de la decoradora mallorquina Marta Gayá. De hecho, fue 'Zu' quien propició que Juan Carlos I y la decoradora se conocieran.
La entonces joven mallorquina se acababa de divorciar después de cuatro años de matrimonio cuando empezó a frecuentar la boite del Club de Mar. Allí trabajó durante un año como relaciones públicas a las órdenes de Pepe Oliver.
En 1990 el príncipe georgiano protagonizó un anecdótico momento que tuvo lugar en el archipiélago. Se celebraba una cena en el Club de Mar en honor a Karim Aga Khan y Alberto de Mónaco con motivo del Rally del Mediterráneo para maxiyates, presidida por los reyes.
Tchokotua, su mujer Marieta, el escritor José Luis de Vilallonga y Marta Gayá llegaron a los postres. En vez de mostrarse contrariado con la presencia de Marta Gayà, don Juan Carlos se levantó de su mesa para saludar efusivamente al grupo. Aquel caluroso saludo desató toda clase de comentarios y el enfado de doña Sofía.
Tras años alejado del foco mediático, el escándalo de 'Privé' ha devuelto al foco la figura del príncipe Zourab Tchokotoua. Íntimo de Juan Carlos I.
También uno de sus confidentes, que aparece en las grabaciones entre el Emérito y Bárbara Rey. Un escándalo del que muchos afirman que "tan solo se conoce el 5%".
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