La empresaria gallega mantiene un perfil discreto frente a los medios mientras que la mujer del líder socialista suele acaparar la atención mediática
La batalla de las 'primeras damas' nacionales: De la 'indie' Begoña Gómez a la discreta Eva Cárdenas
El pasado domingo 23 de julio, 37.466.432 de españoles estaban llamados a las urnas en las elecciones generales más reñidas de la historia en términos de gobernabilidad. Un nuevo domingo electoral que estuvo marcado por la resistencia del PSOE y una victoria del Partido Popular marcada por la tensión entre su líder, Alberto Núñez Feijóo, y la presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso.
Tanto Pedro Sánchez como Núñez Feijóo han sido los absolutos protagonistas de la pasada jornada electoral y no solo ellos, sino las posibles aspirantes a 'primeras damas'. Todas las miradas están puestas en ellas. Dos perfiles de mujeres completamente diferentes que pueden convertirse en nuevas inquilinas del Palacio de la Moncloa. Pero, ¿quienes son realmente Eva Cárdenas y Begoña Gómez?.
La discreción de Eva Cárdenas
A finales de agosto de 2022, la empresaria gallega Eva Cárdenas anunció que dejaba su trabajo en la firma de cerámica de Sargadelos para mudarse a la capital española. Desde que su pareja, Alberto Nuñez Feijóo fuera nombrado como nuevo presidente del Partido Popular mucho se había especulado sobre los motivos por lo que su pareja con la que tiene un hijo no se hubiera trasladado a la capital junto a él.
"A Eva no le gusta la política en el sentido profesional como a Alberto, pero sí es una persona que le interesa la actualidad y que le dice a su pareja con que está de acuerdo y con que no", aseguran a Elcierredigital.com personas que conocen el carácter de Eva Cárdenas.
— Alberto Núñez Feijóo (@NunezFeijoo) July 22, 2023
La mudanza a Madrid junto al hijo en común con el político conservador respondía a al interés "de apoyar a su pareja en su nuevo proyecto". Tal y como apuntaban diversas encuestas internas y personas de confianza de Nuñez Feijóo, el gallego tenía muchas posibilidades de convertirse en el nuevo presidente del Gobierno tras las elecciones celebradas el 23 de julio.
Un hecho que, de producirse, cambiará sustancialmente la vida de Eva Cárdenas que tendrá que instalarse en La Moncloa. "No es algo que le guste ni que lo busque pero es consecuencia del éxito de su pareja en esta nueva etapa de su vida y como tal lo asumirá, pero no ejercerá de Primera Dama como tal. Cumplirá con lo que contribuya pero no intententará en la medida de los posible seguir con el máximo anonimato dentro de que la cabe en la pareja de un presidente del Gobierno", afirman a este periódico personas del entorno profesional de la pareja.
Alberto Núñez Feijóo junto a su pareja Eva Cárdenas.
"La mujer de un presidente en función de dónde trabaje puede generar suspicacias. Esto puede gustar o no, pero sabemos que es así y ella es una mujer práctica e intelegente", afirman sobre los próximos proyectos las fuentes consultadas. Eva Cárdenas, dicen, "influye en Nuñez Feijóo en el sentido de que es la persona con la que comparte su vida" y que "admira mucho su intelegencia y su capacidad de análisis". Pero, ¿cómo conoció a esta empresaria el candidato presidencial de PP?.
El líder de los populares conoció a su actual pareja en 2009 en un vuelo entre Madrid y Galicia. Ella viajaba acompañada de una amiga y a la empresaria y al entonces presidente de la Xunta de Galicia sólo les separaba una pasillo. Al tomar tierra, Eva Cárdenas le dijo "de saber que eras tan simpático te habríamos votado".
En ese momento el político conservador mantenía una relación con la periodista Carmen Gámir, conocida como 'Chinny', que en esos momento trabajaba en el departamento de prensa de una de las consellerías de la Xunta. Ella aparece junto a Feijóo en la controvertida foto del político junto al narco Marcial Dorado. Luego sería Secretaria de Estado en el Gobierno de Mariano Rajoy.
Un año después, Feijòo viajaba con Gámir a una visita oficial al Vaticano. Para muchos era una consolidación pública de su relación. Sin embargo, unas semanas después durante un acto con la juventudes del PP gallego dijo que quería acabar pronto el evento porque había quedado a tomar una coapa con María Mera una actriz muy famosa en ese momento por su trabajo en la TVG. Era una broma a costa de la intérprete con la que hacía público a su manera su ruptura con la periodista.
Según cuenta Fran Balado en su libro El viaje de Feijóo (La Esfera de los Libros), el político y la empresaria se reencontraron gracias a una cena organizada por el entonces alcalde de A Coruña Carlos Negreira. La mujer de éste, Inma, es íntima amiga de Eva Cárdenas y la invitó a la cena con el político. Una cena en el que chocaron en algunos puntos de vista pero que hizo que pronto emprendieran una relación que se hizo pública en 2013.
Cuatro años después, en febrero de 2017, tuvieron a su hijo Alberto, de seis años de edad. Debido a la edad de Eva en el momento de quedarse embarazada, 51 años, fue considerado un embarazo de riesgo lo que hizo que estuviera muy contralda por los médicos de la clínica privada en la que dio a luz. Una decisión que fue criticada por la oposición al no tratarse de un centro público. Para Feijóo era su primer y, hasta ahora, último hijo. Para Eva era el segundo descendiente que tenía. De una relación anterior tiene una hija llamada Gabriela de 25 años.
Éxito empresarial
Eva Cárdenas nació en 1965 y estudió Económicas y Diseño Industrial en la Universidad de Santiago de Compostela. Desde el final de su etapa estudiantil Cárdenas comenzó una larga trayectoria en la empresa privada fichando por importantes compañías empezando por la marca de alimentación Kraft y luego L'Oreal. En 1999 fichó por Inditex donde cuatro después llegaría a ponerse al frente de Zara Home. Esta división de la textil gallega vivirían un espectacular crecimiento durante el tiempo que estuvo al frente, llegando a abrir 600 establecimientos en todo el mundo.
Eva Cárdenas junto a Pablo Isla.
En la empresa de Amancio Ortega, Cárdenas llegó a contar con el apoyo del entonces considerado sucesor del empresario leonós, Pablo Isla. Isla y Cárdenas mantienen una gran amistad a día de hoy. Además, eran vecinos en la urbanización Icaria en Oleiros, cerca de La Coruña, una de las más lujosas de Galicia. Al contrario que lo se sabe de Nuñez Feijóo, Eva Cárdenas sí acumula varias propiedades inmobiliarias. Séis en Galicia. El piso de 256 metros cuadrados en el que vivía la pareja en Galicia era propiedad de Eva.
'La princesa de las Saunas'
La discreción de la empresaria y esposa del líder de los populares dista mucho del devenir público de Begoña Gómez. Fue en noviembre de 2015 cuando la esposa del dirigente socialista recibió su bautismo mediático marcado por gansada y la propaganda política. La biografía de Begoña Gómez, más allá de la oficialidad desde que llegara a Moncloa, es difícil de rastrear. Al inicio de la convulsa legislatura Sánchez, algún medio apuntó la posibilidad de que el PSOE hubiera contratado a una agencia de borrado digital para eliminar todo rastro biográfico de Gómez.
Así se ha colado Begoña Fernández, mujer de Pedro Sánchez, en el vídeo de Errejón pic.twitter.com/QWK6fgshV0 #ELPAISDebate @LoloViejo
— EL PAÍS (@el_pais) November 30, 2015
Lo que sí se sabe con certeza es que nació en Bilbao en 1975 y se crió en el pueblo leonés de Valderas. En Madrid cursó los estudios de Marketing en la escuela ESIC y un máster en Dirección de Empresas en la Universidad Complutense. Begoña es experta en Marketing y en captación de fondos para ONG's. Ha sido asesora de entidades como Oxfam Intermón, Aministía Internacional o Anesvad. Además, ha ejercido también otras labores profesionales en empresas como Deutsche Bank, Old El Paso u Ono. Actualmente es socia y directora de Task Force y codirige la Captación de Fondos para el Tercer Sector en la Universidad Complutense de Madrid.
Tras la llegada a Moncloa de Sánchez, fue contratada por el Instituto de Empresa. Las dudas sobre el posible enchufismo de este puesto no se hicieron esperar máxime cuando se trataba de un puesto de “nueva creación”. Desde Moncloa, restaron importancia a la polémica alegando que Begoña no era ni personaje público ni ocupaba ningún puesto en el organigrama.
El punto de su biografía que más molestó a Begoña fue cuando Vozpópuli publicó que su padre, Sabiniano Gómez Serrano, había sido propietario de varias saunas gays en Madrid durante años, aunque vendió el negocio. Esta información se hizo pública gracias a un proceso de corrupción contra un político del PP de Mallorca, Javier Rodrigo de Santos ex concejal de Urbanismo, que acusado de utilizar la tarjeta Visa de la Empresa Municipal de Obras y Proyectos para gastarse 50.804 euros en diferentes saunas para público homosexual entre 2006 y 2007. La aparición de este dato hizo que algunos de los enemigos de Sánchez dentro del PSOE comenzaran a referirse a Begoña con recochineo como ‘la Princesa de las Saunas’.
Pedro Sánchez junto a Begoña Gómez en la gala de los Premios Goya de 2018.
En varias de las entrevistas que ha concedido Begoña ha narrado su historia de amor con el todavía presidente del Gobierno. "Fui con unas amigas a una fiesta y allí coincidimos con un grupo de amigos que me presentaron a Pedro. Bueno, fue un flechazo, la verdad", explicaba Begoña. Pedro también dio su versión sobre el asunto en una entrevista concedida a Bertín Osborne: "Me enamoré con 31 perdidamente de mi mujer. Fue en la casa de un amigo mío en una fiesta de cumpleaños. Tuve que empeñarme mucho unas cuantas veces. Me lo puso difícil". Los casó por la civil la política socialista Trinidad Jiménez en 2006 y han tenido dos hijas: Ainhoa, nacida un año antes de contraer matrimonio, y Carlota, nacida en 2007.
Al inicio de su relación vivieron el madrileño barrio de La Latina, pero tras el nacimiento de sus hijas se trasladaron a Pozuelo de Alarcón, discreta población, aunque la de mayor renta per cápita de toda España, al norte de la capital, cerca del colegio público de las niñas y del gimnasio al que acudía Begoña.
En una entrevista con Susanna Grisso, la mujer del presidente retrató cómo era su marido en la intimidad y las aficiones del matrimonio como lo es la música indie. "Nos gusta mucho ir a conciertos: La Habitación Roja... Björk también le gusta mucho", aseguraba. También definía al presidente como un hombre detallista: "Es muy romántico. Me ha escrito cartas de amor. Lo tengo todo guardado en un baúl pequeño de madera”.
El síndrome de Jackie Kennedy
Begoña siempre se ha mostrado como el mejor apoyo de Pedro Sánchez. Sin hacer ningún esfuerzo por ser discreta. Nadie daba un duro por el actual presidente del Gobierno salvo ella. Fue su mejor apoyo cuando desde el partido lo descabalgaron del poder socialista en octubre de 2016 en un aciago fin de semana con visos de Cónclave en Ferraz.
Begoña siempre tuvo claro que el futuro de su marido y el de ella, claro pasaba por llegar a Moncloa. Ha sido junto a Ana Botella la mujer de presidente menos discreta de la democracia. En el rastrillo Nuevo Futuro, en la Fashion Week de Madrid o donde se tercie, Begoña ha ocupado un papel principal ante los medios de comunicación congregado en estos actos. “Aunque no tienen ningún papel oficial, es consciente de que vivimos en la sociedad de la imagen y sabe vestirse y cuidarse. Sabe que es un apoyo fundamental para Pedro Sánchez. Luego, claro, tiene que hacer el juego progre de ‘¡ay! no me saquéis tanta foto que no soy nadie!’ pero claro te lo dice posando como si fuera Paula Echevarría”, comenta un veterano fotógrafo a Elcierredigital.com.
Begoña Gómez junto a Pedro Sánchez y la diseñadora Teresa Helbig.
“Salvo Ana Botella o Amparo Illana en los inicios de la democracia en España es raro que un candidato vaya con su señora de la mano a todos los sitios. Esto pilla por sorpresa y está bien, pero puede volverse en su contra, porque no me imagino a Begoña manejando con mano izquierda a la prensa rosa. Teniendo escoltas es todo más fácil. Pero la fama no desaparece cuando tú quieres”, razona una analista política.
Los que la conocen saben que está convencida de su permanencia en Moncloa y que echará toda la carne en el asador para ello. “Le da igual que en Zarzuela no guste esta obsesión suya por tomarse prerrogativas que en ocasiones chocan con las de la Reina Letizia, si tiene que bailar en El Hormiguero lo hará, y lo mismo le da competir en glamour con Melania Trump que encabezar la manifestación feminista del 8-M sin ser nadie oficialmente. Forma un clan con su marido y su objetivo es claro: el poder”, comenta la citada analista política.
Begoña Gómez es de todas las posibles nuevas ocupantes de la Moncloa la única con experiencia. Aquejada del síndrome de Jackie Kennedy parece buscar en el estilo y la moda la forma de construir su relato de ser la mujer que ayudó a Sánchez a llegar al Gobierno y saber vestir un cargo que en España no existe, pero sí en su cabeza.
Frenéticamente colgada de una sonrisa de anuncio y a golpes de melena rubia bien cuidada sabe que es un gancho electoral y se pasó, durante la pasada campaña electoral, siendo más meme que ser humano. Así lo demostró en el pasado cierre de campaña cuando acudió con chaleco rojo y una chapa en la que se podía leer 'Perra Sanxe' y que muchos usuarios de las redes sociales aseguraron que 'Begoña se había pasado el juego' .
