El comentado gesto de Irene Urdangarin con la infanta Cristina en su última escapada
Irene Urdangarin y la infanta Cristina vuelven a presumir de la complicidad que existe entre ellas por Madrid
Este sábado, 31 de agosto, la infanta Cristina ha protagonizado una de las estampas más esperadas junto a su hermano, Felipe VI. Aquel día, ambos acudieron a la boda de Victoria López-Quesada y Enrique Moreno de la Cova.
Tal y como hemos podido ver, el actual rey de España y su hermana llegaron juntos en el mismo coche y mostrando una actitud de lo más cómplice. Gestos con los que ambos han dejado al descubierto que su relación ha mejorado de forma considerable.
Sin embargo, tan solo unos días antes de que se celebrara este importante evento, la infanta Cristina organizó un plan de chicas en Madrid junto a su hija, Irene Urdangarin.
Según ha trascendido, aquel día, madre e hija hicieron gala de su buena relación durante su salida por la capital, jornada en la que ambas prepararon este día tan señalado. No obstante, lo que más ha llamado la atención de las fotografías que se han publicado ha sido la gran complicidad que existe entre ellas.
Todos los detalles sobre el último plan de la infanta Cristina e Irene Urdangarin por Madrid
No hay ninguna duda de que la infanta Cristina está muy centrada en sus hijos. Sin embargo, aunque sus apariciones conjuntas son escasas, cuando se les ve, la sintonía entre ellos es innegable.
Y esto es algo que ha vuelto a quedar patente gracias a las imágenes que han trascendido del último plan de la exduquesa de Palma e Irene Urdangarin por Madrid.
Según ha trascendido hace unas horas, durante aquel día, la infanta Cristina y su hija pequeña acudieron al taller del conocido diseñador Lorenzo Caprile.
Desde hace años, la exduquesa de Palma confía en el modisto y juez de Maestros de la costura para las ocasiones más importantes. Por ese motivo, sabiendo que durante la boda de Victoria López-Quesada iba a ser el centro de atención, no dudó a la hora de ponerse en sus manos.
Y aunque se desconoce si Irene Urdangarin también eligió uno de sus diseños, la joven decidió acompañar a su madre al taller de Caprile. Este gesto, sumado a la cercanía que mostraron, dejó claro que entre ellas existe una relación de profunda complicidad.
Para la ocasión, madre e hija se decantaron por unos looks cómodos, donde las prendas clásicas tuvieron un gran protagonismo. La infanta Cristina optó por una blusa estampada, unos pantalones blancos y unas zapatillas. Por su parte, la joven se decantó por un vestido negro con volantes.
Este plan por Madrid y su posterior asistencia a la boda han marcado el final del verano para la exduquesa de Palma e Irene Urdangarin. Dentro de unos días, la pequeña de los Urdangarin viajará hasta Londres para comenzar con sus estudios superiores.
Mientras tanto, se espera que la infanta Cristina regrese a Ginebra. Allí, retomará su vida y sus responsabilidades laborales, después de un verano lleno de emociones y momentos compartidos con su hija.
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