La decisión del Gobierno de España de rebajar el IVA del aceite de oliva hasta el 0% podría suponer un ligero bote salvavidas para el sector aceitero, tensionado principalmente por la sequía y el histórico encarecimiento de precios.

Esta medida contribuirá previsiblemente a atenuar la caída del consumo de aceite de oliva para alivio del rey del mercado, la compañía española Deoleo (antiguo Grupo SOS) que posee marcas como la histórica Carbonell, Hojiblanca, Koipe o la italiana Bertolli.

El fondo de inversión británico CVC (célebre entre otros asuntos por su vinculación con LaLiga) quiere levantar la compañía dirigida desde 2019 por Ignacio Silva, que accedió al cargo cuando Deoleo se asomó incluso a la quiebra.

CVC buscará a medio plazo cerrar una venta que rondaría los 400 millones de euros y a la que finalmente se resistió el gigante alimentario emiratí Iffco, que en 2021 puso en marcha una planta de envasado de aceite de oliva en el municipio granadino de Escúzar.

A la venta no ayuda que Deoleo haya retornado a las pérdidas, que fueron de 34 millones de euros en 2023 y contrastaban con otros resultados positivos, como los más de 60 millones de beneficios obtenidos en el ejercicio 2021.

En ese 2021 acababa de librar el cuello por poco a cuenta de unas pérdidas de más de 200 millones de euros que afloraron en 2019 y que situaron los números rojos de la compañía en 575 millones de euros.

"Durante el segundo semestre de 2018 Deoleo ha efectuado un test de deterioro del valor de sus activos, fondo de comercio e intangibles esencialmente, una vez que se ha constatado la peor evolución de las operaciones en los mercados de aceite de oliva esenciales para la compañía, como Italia y Estados Unidos", dijeron en relación al agujero.

En 2020 Deoleo impulsaba un polémico 'efecto acordeón' que dejó las acciones a cero euros y situó a los minoritarios al borde del KO. "La operación acordeón es la única salida. No hay margen para hacer nada distinto, los minoritarios tendrán derechos de suscripción preferente y podrán invertir en una compañía con un mejor futuro", afirmó Silva.

"Es una situación que es insostenible y que merma nuestra posición competitiva en el mercado, ya que no nos permite desarrollar estrategias de compra adecuadas ni invertir en el crecimiento de las marcas", añadía tras señalar que Deoleo estaba atascada con gastos anuales de más de 25 millones de euros solo en intereses.

Aquellos años turbulentos afectaron a la reputación de la compañía, que fue multada con 150.000 por la Comisión Nacional del Mercado de Valores por cometer una "infracción muy grave tipificada en el artículo 282.2 de la Ley del Mercado de Valores" al haber ofrecido en 2018 y 2019 información financiera "con datos inexactos o no veraces".

Ignacio Silva, CEO de Deoleo. 

Sin embargo, Deoleo ha logrado domar la deuda y ahora busca refinanciar los 58 millones que debe para inyectar tranquilidad en sus accionistas de referencia, que el pasado año, según Silva, se mostraban "tranquilos y satisfechos ante la evolución de la compañía y confían en que el trabajo realizado revierta en resultados una vez el mercado vuelva a la normalidad".

Un 2023 en pérdidas

Deoleo señaló que 2023 fue "un ejercicio marcado por la mayor subida del precio de la materia prima desde que se tienen registros en el sector, y por unas previsiones muy poco favorables, tanto en cantidad como en calidad, para la próxima cosecha".

"Debido al contexto inflacionista y los elevados precios, los volúmenes han caído paulatinamente, pero la compañía ha conseguido elevar ligeramente las ventas gracias a la defensa del margen bruto unitario, logrando un EBITDA de 30M€ a cierre de ejercicio", señalaron.

El pasado año se caracterizó por una elevada inflación a nivel internacional, afectando a los países en los que el grupo tiene presencia, que impactó de forma relevante al sector alimentario y especialmente, al oleícola.

En el caso del mercado español, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la alimentación fue el grupo en el que los precios más aumentaron, con una tasa anual del 11,7%. Y el aceite de oliva fue el alimento elaborado con un incremento mayor situándose en el 44,4%.

Este incremento se explica por el descenso de la producción por segundo año consecutivo por primera vez en la historia. En la Unión Europea, la caída en la campaña 2022/2023 fue del 40%, principalmente por el impacto de la baja producción española (-55%), marcada por la falta de lluvias y episodios de calor extremo.

"Esta situación derivó en el citado incremento del precio de la materia prima, que alcanzó niveles récord con el consiguiente impacto en el consumo", dicen en Deoleo.

Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en lo que va de campaña 2023/2024 la subida de los precios medios es del 69,1% con respecto a la anterior temporada.

A pesar del retador contexto, "gracias a la fortaleza de las marcas del grupo como a la eficacia de la gestión comercial y el control de gastos, la compañía ha podido mantener el margen bruto unitario", aseguraron.

"Hemos cerrado un año excepcionalmente retador y de gran volatilidad, encadenando dos años consecutivos de cosechas muy limitadas, tanto en términos de calidad como de cantidad, y precios en niveles históricos", afirmó Silva.

Pese a ello, continuó, "hemos seguido apostando por la defensa de nuestro margen bruto unitario, lo que nos ha permitido mantener los ingresos y ha evidenciado, una vez más, la eficacia de nuestra estrategia, basada en nuestros pilares clave: calidad, sostenibilidad e innovación, que trasladamos al consumidor a través de nuestras marcas líderes".

"A pesar de que prevemos que el ejercicio actual continuará siendo retador, confiamos en que la situación actual se normalizará y veremos un sector reforzado a medio plazo. Nuestras marcas y los fundamentales de la compañía están preparados para afrontar con éxito la vuelta a las condiciones normales del mercado", remató.

A pesar de este contexto, Deoleo anuncia que continuará con la hoja de ruta marcada, a través de la comercialización de sus marcas líderes en el mercado y la firme apuesta por los tres pilares de la estrategia (calidad, innovación y sostenibilidad).

El pasado mes, en su Junta General de Accionistas, Silva explicó que "la fortaleza de las icónicas marcas de Deoleo, la eficacia en la gestión comercial y el control de los gastos han sido clave en la defensa y mantenimiento de nuestro margen bruto unitario durante el año 2023".