
Quién es 'La chica de la aguja': La vida de la mujer que mataba bebés, éxito en cines
El film ‘La chica de la aguja’ narra la historia de Dagmar Overbye, que asesinó a cerca de 25 bebés entre 1913 y 1920
La inspiración en crímenes reales para la realización de series y películas es algo que está a la orden del día. De hecho, en los últimos meses el true crime ha sido objeto de debate social sobre su amoralidad.
En este caso, ha pasado un siglo desde que sucedieron los hechos que se narran. Y es que este 21 de marzo se ha estrenado la película 'La chica de la aguja' de Magnus von Horn.

Esta película danesa es interpretada por Victoria Carmen Sonne, Trine Dyrholm, Besir Zeciri y Joachim Fjelstrup. El film está ambientado en la Primera Guerra Mundial y la National Board of Review la catalogó como una de las cinco mejores películas internacionales del 2024.
De hecho, llegó a estar nominada al Óscar como Mejor Película Internacional. Esta tétrica película esconde una historia real criminal que sembró el pánico en Copenhague en la década de 1910. Se trata de la historia de Dagmar Johanne Amalie Overbye, una asesina en serie de bebés.
La aterradora historia de Dagmar Overbye
Dagmar Johanne Amalie Overbye nació el 23 de abril de 1883 en Vedslet Parish (Dinamarca). Creció en el seno de una familia de campesinos y el maltrato al que la sometía su padre hizo que se fugase con 12 años.
En sus primeros años no mostró instinto asesino, de hecho, se casó en 1912 y tuvo una hija. La pequeña murió en extrañas circunstancias y con la Primera Guerra Mundial en curso Dagmar se fue a Copenhague.
Allí, en 1915 comenzó a hacerse pasar por una niñera y ofrecía ayuda a madres solteras o en situación complicada. Les ofrecía encontrar una familia adoptiva a los bebés de esos padres a cambio de una gran cantidad de dinero.

No obstante, tras este supuesto negocio escondía una terrible realidad. Y es que en lugar de entregar a los niños los asesinaba cuando los recibía.
Para acabar con la vida de los pequeños no siempre usaba el mismo modus operandi. En unas ocasiones los estrangulaba y en otra los ahogaba. A algunos los llegó a incinerar en el horno de su casa. Para evitar ser descubierta enterraba los cadáveres de los niños en el sótano.
La clave de su impunidad fue que nadie reclamaba a esos bebés, ya que sus madres se desprendían de ellos entregándolos de manera voluntaria. Dagmar se aprovechó de un momento social en el que muchas madres jóvenes se veían obligadas a dar a sus hijos en adopción.
Así se detuvo a esta asesina en serie
A comienzos de la década de 1920 Karoline Aaegesen dio en adopción a su hija. Sin embargo, se arrepintió y fue a pedirle a Dagmar que se la devolviese. La negativa llevó a esta madre a denunciar a Dagmar ante las autoridades. Estas registraron su vivienda y encontraron huesos calcinados, ropa de bebé y un olor muy fuerte.

Tras su detención, fue condenada a muerte por el asesinato de nueve bebés, aunque se estima que mató al menos a 25 niños entre 1915 y 1921. De hecho, la propia Dagmar confesó 16 asesinatos y se la bautizó como “La hacedora de Ángeles”.
En 1923 su pena quedó conmutada por cadena perpetua. Así las cosas, el destino de Dagmar ya estaba definido, ya que terminó falleciendo en prisión en 1929. Ahora, la historia de Dagmar Overbye ha sido llevada al cine para relatar unos de los hechos más crueles ocurridos en Europa.
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