Así es Jorge Ignacio Palma, el asesino de Marta Calvo: 'Un depredador criminal'

El 23 de septiembre se ha conocido que el asesino Jorge Ignacio Palma ha sido condenado a prisión permanente revisable por el Tribunal Supremo. Este tribunal ha considerado a Palma “asesino en serie” y ha rectificado las sentencias de la Audiencia Provincial y el TSJ de Valencia.

El asesino ha recibido esta condena por el asesinato de Marta Calvo en 2019. Además, ha confirmado una condena de 137 años de prisión por los asesinatos de Arliene Ramos y Lady Marcela Vargas. Así como por el intento de matar a otras seis mujeres durante encuentros sexuales. 

Todos los hechos ocurridos con estas mujeres cuentan con un componente común, que son las drogas. Desde bien joven Jorge Ignacio Palma era consumidor de cocaína y un asiduo de la prostitución. 

Palma contó que Marta Calvo falleció tras mantener relaciones sexuales con cocaína, concretamente seis gramos entre los dos. Sin embargo, dijo que cuando él se despertó Calvo ya estaba muerta. 

La primera víctima Arliene Ramos murió mientras realizaba una fiesta blanca. La mujer era prostituta y trabajaba en un local de Valencia. Terminó falleciendo días después tras entrar en coma por una sobredosis. 

La otra víctima fue Lady Marcela, una prostituta colombiana. Palma también había solicitado una fiesta blanca. En estas fiestas blancas abusaba de las mujeres y les introducía  bolas de cocaína en el ano y la vagina. Lady Marcela falleció debido a una insuficiencia respiratoria.

Los peritos criminológicos que declararon en el juicio señalaron que Jorge Ignacio Palma es “un asesino serial, un depredador letal feminicida". Afortunadamente, algunas de sus víctimas se escaparon del fatal desenlace que tuvieron Marta, Arliene y Lady. Se descartó que padezca una enfermedad mental. 

El perfil de Jorge Ignacio Palma

Elcierredigital.com ha contactado con el psicólogo Jorge López Vallejo. El psicólogo analiza el perfil y la personalidad antisocial del asesino de Marta, Arliene y Lady. “Es un auténtico depredador criminal”, señala.

“Tiene rasgos de personalidad narcisistas, pero sobre todo maquiavélicos y psicópatas. A esto hay que sumarle el consumo de drogas y alcohol.  Tiene una necesidad de dañar y hacer daño a las mujeres, no obstante no es una persona enferma”, indica Vallejo.

"Este tipo de personas tienen habilidad para conectar con los demás y desconectar con sus propias emociones. Esto lo hacen de manera deliberada y estrategia para llegar al objetivo que buscan”, añade Vallejo.

El psicólogo explica que “en este caso los rasgos narcisistas, maquiavélicos y psicópatas han construido una mente extremadamente perversa y criminal. El polo más extremo y radical de estos rasgos se encuentra en el consumo de drogas y alcohol, como es el caso”. 

“No satisface criterios para un diagnóstico psiquiátrico, ya que es capaz de convivir con los demás sin síntomas aparentes. Sus formas de comportamiento las desarrolló cuando estaba con las mujeres y sentía la necesidad maquiavélica criminal”, señala Vallejo.

“Estamos ante una persona egoísta con un sentido egocéntrico del derecho. Posiblemente, también disfrutaba con la muerte, y no solo con el sexo. Los rasgos psicópatas aparecen en el hecho de usar a las mujeres como objetos para su placer personal”, observa el psicólogo.

Palma acabó con la vida de tres mujeres, pero casi una decena más sufrieron situaciones parecidas, aunque con diferente desenlace. “Esto demuestra rasgos psicópatas absolutos, así como maquiavélicos en grandes dosis”, añade Vallejo. 

Otro dato a tener en cuenta es que el asesino introducía rocas de cocaína en las partes íntimas de sus víctimas. “Esto muestra que sentía un placer absoluto viendo sufrir a las mujeres. Sus víctimas eran prostitutas porque era más fácil el acceso y la comisión de delitos”, concluye Vallejo.