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Botellas de CDS Dióxido de Cloro en un estante de refrigerador.
INVESTIGACIÓN

Lo que se esconde tras el uso de dióxido de cloro para tratar el cáncer: 'Puede matar'

Expertos señalan: "Adeptos de la pseudociencia aconsejan usar dióxido de cloro para graves enfermedades pero es mentira"

La cura de enfermedades parece ser uno de los objetivos de la pseudociencia. En elcierredigital.com venimos documentando esta situación, que cada vez preocupa más a los expertos en sectas.

Ahora, han saltado las alertas por el uso de dióxido de cloro (CDS) para “ayudar a curar el cáncer”. Publicitar esta práctica como remedio lleva varios años presente en la sociedad. De hecho, en enero de 2023 la médica negacionistaNadiya Popel fue imputada por un delito contra la salud pública.

La denuncia la interpuso el Colegio de Médicos de las Islas Baleares. Y es que la médica suministró dióxido de cloro —entre otras sustancias— a pacientes con cáncer, alegando que podría mejorar la situación. 

No obstante, la afirmación está muy alejada de la realidad, ya que según los expertos “no cura el cáncer”. Es más, carece de fundamentación científica y puede llegar a ser letal. El dióxido de cloro ya vivió un importante auge durante la pandemia, aunque nunca llegó a ser efectivo.

En elcierredigital.com hemos podido acceder a varias conversaciones de grupos de telegram. En ellas, familiares de personas con cáncer preguntan por posibles remedios para que el enfermo no empeore.

Las respuestas van en la línea de que le proporcione CDS al enfermo. En un mensaje se puede leer: “Cuando hay metástasis tienes que arriesgar a que haya crisis curativa y empezar con una dosis más alta”.  

En elcierredigital.com hemos contactado con el teólogo y experto en sectas Luis Santamaría para conocer los riesgos de esta pseudociencia. Santamaría explica que “el dióxido de cloro es una sustancia que se ha hecho muy popular en ciertos ambientes, pero puede matarte. Estos grupos destacan por negar la evidencia científica y por sus teorías de la conspiración en torno a los temas sanitarios”.

El dióxido de cloro, un peligroso remedio

El dióxido de cloro es un tipo de lejía cuyos usos principales son como desinfectante industrial y potabilizador de agua. “En los grupos de Telegram mencionados anteriormente se publican muchísimos mensajes, tanto de petición como de ofrecimiento de supuesta "ayuda" para cuestiones de salud”, explica Santamaría.

Dos botellas de vidrio marrón con etiquetas que dicen
Dióxido de cloro CDS | Estudio Tarazona

El experto narra que en estos chats “enfermos que buscan curación o sus familiares se entrecruzan con mensajes irresponsables de insensatos. Estas personas dan pautas sobre cómo ingerir una sustancia muy peligrosa. Desde un simple catarro hasta un cáncer, se asegura que el dióxido de cloro es la sustancia milagrosa capaz de devolver la salud a cualquier persona”.

“Tienen un discurso irracional, delirante y mesiánico. Sus partidarios afirman que la ciencia conoce de sobra las bondades del dióxido de cloro. Sin embargo, la malvada industria farmacéutica y los intereses de las élites que nos gobiernan y oprimen quieren el negocio de unos medicamentos caros. Todo un gran engaño que son capaces de inculcar fanáticamente en sus legiones de seguidores a través de las redes sociales”, añade Santamaría.

Los tres pilares de esta pseudociencia

Resulta fundamental establecer quiénes han sido los responsables de divulgar este supuesto ‘método’ de curación. Para personalizar y conocer las claves resulta necesario ahondar en tres figuras principales. Luis Santamaría lo explica. 

- El norteamericano Jim Humble. Fundador y proclamado "obispo" de la conocida como Iglesia Génesis II. Se trata de una “secta” que fundó buscando cobertura legal a su difusión del dióxido de cloro, al que denominaba "Solución Mineral Milagrosa" (MMS).

- El alemán Andreas Kalcker. Autor de los más difundidos "protocolos" para la ingesta del dióxido de cloro según las enfermedades. Sus adeptos lo llaman "doctor", a pesar de que “no tiene formación científica ni sanitaria alguna”. Según él, el CDS puede curar la artritis, el cáncer, el VIH-sida, la hepatitis, la diabetes y otras muchas enfermedades, entre las que incluye también el autismo.

Un hombre con bata de laboratorio sostiene un frasco en una cocina moderna con botellas y un matraz en el fondo.
Andreas Kalcher fabricado CDS | YouTube

Aunque Kalcker actualmente reside en Suiza, previamente estuvo viviendo unos años en España. Eso le ha hecho tener un gran número de seguidores en nuestro país y una notabilísima proyección en América Latina. Esto lo equipara prácticamente con Humble a cuya “secta” también perteneció como jerarca.

-El paradigma de “gurú curandero” en España, Josep Pàmies. Gran defensor de los chupitos de dióxido de cloro para la curación de casi cualquier cosa. Desde su asociación Dulce Revolución lleva años engañando a la sociedad.

Sobre todo, se aprovecha de la vulnerabilidad y desesperación de los enfermos y de sus familias. “En el colmo del despropósito”, en el año 2020 intentaron convencer al Papa Francisco, a través de su nuncio en Madrid, de que aceptara la bondad de la sustancia y la defendiera para luchar contra el coronavirus.

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