La constructora Urbas se asoma al abismo: Qué problemas esconde su millonaria deuda

La constructora Urbas ha activado el mecanismo de la ley concursal con el objetivo de renegociar una deuda de 136 millones de euros. Esta situación la coloca al borde de la insolvencia. La empresa, bajo el control de Juan Antonio Acedo y con sede en Madrid, permanece con su cotización suspendida en Bolsa. 

La decisión preventiva la ha tomado la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Lo hizo al conocerse que la auditora Worldwide Audit se negó a validar las cuentas anuales de 2024. 

El propio presidente de Urbas comunicó a la CNMV que el consejo de administración decidió por unanimidad acogerse al artículo 585 del Real Decreto Legislativo 1/2020. Según el comunicado, la empresa ya ha iniciado conversaciones con sus principales acreedores. Su expectativa es alcanzar un acuerdo que le permita continuar operando con normalidad.

Esta ley concursal permite a las empresas en riesgo de insolvencia renegociar sus compromisos financieros, otorgando un plazo inicial de tres meses para llegar a un pacto con los acreedores.

Juan Antonio Acedo controla el 27% del capital de la empresa

Al frente de la compañía sigue Acedo, que asumió la presidencia en enero de 2019 al sustituir a Juan Antonio Ibáñez. El actual presidente controla aproximadamente el 27% del capital a través de Quamtium Venture S.L.

Acedo, que acumula numerosos problemas de índole fiscal y judicial, es muy conocido por sus deudas con Hacienda. En 2022, su deuda rebasó los 7,5 millones de euros. 

La CNMV suspendió la cotización de Urbas el pasado 30 de abril. Lo hizo al detectarse que los estados financieros presentados carecían del informe obligatorio del auditor. Afectando al valor que ya era el más bajo del mercado español, con un precio de 0,002 euros por acción.

Durante el primer semestre de 2024 Urbas acumuló pérdidas de 136 millones frente a los 16 de beneficio del mismo periodo del año anterior. Esta caída se atribuye a un conflicto con su principal acreedor, el fondo de inversión RounShield. 

Al no cobrarse un préstamo vencido en diciembre, este fondo ejecutó garantías y tomó el control de varias filiales del grupo como parte del acuerdo. Estas filiales, principalmente inmobiliarias, incluyen nombres como Urbas Financial Invest, Activos Financieros Urbas y Proyectos de las Brisas Vera, entre otras.

A su vez, la facturación de Urbas cayó un 30% interanual, situándose en 170 millones de euros hasta junio. 

Urbas, más de 40 años de recorrido y acercamiento a Arabia Saudí

Urbas es una constructora española con más de 40 años de trayectoria en la construcción, la promoción inmobiliaria y, más recientemente, en energías renovables. En los últimos años, la compañía ha vivido una profunda transformación.

Una de las apuestas más destacadas ha sido su entrada en mercados internacionales, con especial énfasis en Oriente Medio. En enero de 2024, la compañía fue adjudicataria de un importante contrato en el proyecto Al-Fursan 2, en Riad (Arabia Saudí), que contempla la construcción y promoción de 589 viviendas. 

Este proyecto forma parte del ambicioso programa saudí 'Visión 2030'. Esta iniciativa busca impulsar el desarrollo urbano y social del país mediante la construcción de 75.000 viviendas nuevas. Asimismo, Urbas ha firmado una alianza estratégica con la constructora saudí ARKAL, vinculada a la familia real del país. Su objetivo es participar en grandes proyectos de infraestructura y urbanismo en la región.

Reestructuración interna tras la estampida de talento 

Con el objetivo de fortalecer su estructura y prepararse para el futuro, Urbas ha acometido un proceso de reestructuración interna. Esta reorganización ha estado orientada a optimizar sus áreas clave de negocio: construcción, promoción inmobiliaria y energías renovables. Gracias a ello, la empresa ha logrado reducir su deuda, mejorar su rentabilidad y sentar las bases para un crecimiento sostenible.

De cara a los próximos años, el plan estratégico de Urbas planteaba metas ambiciosas: alcanzar una facturación de 1.500 millones de euros y un EBITDA de 250 millones para 2028. Para lograrlo, la compañía preveía diversificar su actividad hacia sectores emergentes como la energía, la salud y los servicios a la tercera edad.

Pese a los avances logrados, Urbas se enfrenta a importantes dificultades. Además, en 2023 la empresa experimentó una fuga significativa de talento en su cúpula directiva, con la salida de varios altos cargos. Esta situación planteó desafíos importantes en términos de liderazgo, continuidad estratégica y cohesión organizativa, elementos clave para ejecutar con éxito su ambicioso plan de crecimiento.