El poder de la familia Gómez-Acebo de Borbón: Los hijos de la infanta Pilar, hermana del rey Juan Carlos I

Este pasado sábado Fernando Gómez-Acebo, hijo menor de la infanta Pilar de Borbón y del aristócrata Luis Gómez-Acebo, fallecía a los 49 años de edad víctima de una insuficiencia respiratoria crónica que se agravó tras padecer tanto el COVID como la Gripe A. 

La capilla ardiente por el sobrino del rey Juan Carlos I se instaló en el tanatorio madrileño de Tres Cantos y hasta allí se desplazaron sus hermanos Juan Filiberto, Beltrán y Bruno Gómez-Acebo, éste junto a su mujer Barbara Cano, como también lo ha hecho su expareja Mónica Martin Luque, quien estaba visiblemente afectada. También lo han hecho su prima la infanta Elena o amigos como José María Aznar Jr o Rafael Medina, que ha llegado junto a su mujer Laura Vecino. 

El fallecimiento de Fernando ha sido un duro golpe para los Gómez-Acebo quienes en 2020 despedían a su madre la infanta Pilar que fallecía víctima de una larga enfermedad. Precisamente, el hijo menor del aristócrata de Pilar de Borbópn y Luis Gómez-Acebo era uno de los primos más queridos por el rey Felipe VI y, también, una de las figuras más polémicas de la saga que era y es conocida como 'los otros Borbones'. 

Esta es la vida y poder de los cuatro hijos con vida de la infanta Pilar, la hermana del rey Émerito Juan Carlos I.

Simoneta Gómez-Acebo

Simoneta Luisa Gómez-Acebo de Borbón, asumió el matriarcado familiar tras las muerte de su madre, la infanta Pilar en 2020. Es la primogénita de los cinco hermanos. Simo, como es conocida familiarmente, nació el día de San Simón, el 28 de octubre de 1968.

Sus padres, convencidos por entonces de que sería un niño, no habían previsto un nombre para ella. Y fue su abuela paterna, Margarita Modet y de Almagro, quien sugirió italianizar el nombre del santo del día. Y a su hijo el duque de Badajoz y vizconde de la Torre, un gran amante del arte italiano, le pareció estupendo que llevara el nombre de la esposa de Lorenzo El Magnífico y también modelo de Botticelli, la bella Simoneta Vespucci.

Simoneta Gómez-Acebo.

Simoneta, según sus grandes amigos, “es una mujer decidida, muy cordial y con gran estilo personal”. Sus enemigos, que son algunos, dicen de ella todo lo contrario. En lo que sí coinciden todos es en que le encanta viajar, principalmente a los países exóticos. Es una buena lectora de novelas “porque ponen alas a mi imaginación”, como también de biografías de mujeres.

Siempre se ha llevado muy bien con sus tíos, los Reyes Eméritos. A don Juan Carlos siempre lo ha llama con relativa frecuencia por el móvil. También adora a sus primas, las infantas Elena y Cristina de Borbón. Y si alguien comete el craso error de decirle que pertenece a la Familia Real, rápidamente precisa: “No, no. Yo soy solo parte de la familia del Rey”.

Simo lleva más de dos décadas trabajando en la prestigiosa firma francesa Cartier, donde comenzó de la mano de su padre, Luis Gómez-Acebo, un empresario muy influyente que era miembro del Consejo de Administración de la reconocida firma francesa de lujo. También su madre llegó a ser consejera de una filial de esta firma francesa: Richemont Iberia SL, que figura en el organigrama de Cartier International BV, domiciliada en los Países Bajos. Así todo quedaba en casa.

Pero antes de aterrizar en la firma Cartier, Simoneta estuvo en Estados Unidos, donde comenzó a estudiar Oceanografía, una carrera que abandonó para volver con los suyos y dedicarse a la equitación. Años después se trasladó a Londres a estudiar arte en el famoso centro de subastas Sotheby´s.

Sin embargo, Simo no fue nunca una buena estudiante, lo que obligó a sus padres a buscarle “una salida airosa”. Fue entonces cuando empezó a trabajar en la mencionada firma francesa Cartier. Lo hizo primero como vendedora y, después, como relaciones públicas. Durante sus primeros diez años estuvo trabajando en la tienda de la joyería Cartier, situada en la calle de Serrano, en Madrid. Y en mayo de 2000 ya accedió al cargo de directora.

Aparte de su faceta laboral, ha manifestado en muchas ocasiones su apoyo a la Asociación de Lucha Contra el Sida Apoyo Positivo, en la que colabora de manera tan discreta como activa. Hace unos años protagonizó un anuncio de una conocida marca de pañales cuyos beneficios fueron destinados a otra organización benéfica, Nuevo Futuro, donde su fallecida madre era pieza fundamental.

Pero al margen de sus labores benéficas y no lucrativas, la primogénita de los Duques de Badajoz figura como consejera de una sociedad familiar que se dedica a invertir en bolsa, Labiernag 2000 Sicav, S.A. Se trata de una de las conocidas sociedades de inversión mobiliaria de capital variable que hoy en día utilizan todas las grandes fortunas de España para incrementar sus beneficios.

Pero sus negocios y apoyos no terminan aquí. Los Gómez-Acebo dominan la Sociedad Inmobiliaria de Capital Variable Labiernag 2000. Una sociedad que estaba presidida por su madre la infanta Pilar de Borbón. En ella también figura su hermano Bruno (tercero de la saga) y fue constituida el 15 de noviembre de 2000, con un patrimonio inicial cercano a los 5 millones de euros. De su gestión se encargó en sus inicios, como de otras muchas Sicav, la firma de banca privada Banif utilizada para estos menesteres por el Banco Santander, entidad que preside y controla Ana Patricia Botín, una gran allegada a los Gómez-Acebo.

Simoneta Gómez-Acebo y José Miguel Fernández Sastrón.

Al margen de sus negocios, la vida personal de Simoneta Gómez-Acebo ha sido seguida intensamente por los medios de comunicación. Actualmente es madre de tres hijos: Luis Juan (1991), Pablo (1995) y María de las Mercedes (2000), ésta última lleva el nombre de su bisabuela, la madre del Rey Juan Carlos.

Todos ellos son fruto de su matrimonio con el compositor y productor musical José Miguel Fernández Sastrón, hijo de Jorge Fernández y nieto del conocido empresario de los años sesenta Pepín Fernández, que fuera dueño de los míticos almacenes Galerías Preciados, el primer gran establecimiento moderno de la historia de España. Simoneta y Fernández Sastrón se divorciaron en 2014. 

Juan Filiberto Nicolás

El varón mayor de la saga es Juan Filiberto Nicolás, quien se dedica a los boyantes negocios inmobiliarios de la familia y, en particular, a los artísticos y discográficos. Juan Filiberto llegó a crear su propio estudio de música. Una peculiar salida profesional al margen de sus múltiples negocios inmobiliarios-jurídicos.

Conocido familiarmente como Juan, nació el 6 de diciembre de 1969 y dicen de él, quienes le conocen, que es el más independiente de los cinco hermanos Gómez-Acebo de Borbón. Lleva el título de Vizconde de la Torre, que heredó al fallecer su padre Luis Gómez Acebo al ser el mayor de varones de la saga.

Una de las conquistas sentimentales más sonadas de Juan Filiberto Gómez-Acebo ocurrió en el año de 1997 cuando se le relacionó con la princesa Kalina, hija de los Reyes Simeón y Margarita de Bulgaria, otra rama importante de la realeza europea. Se daba la circunstancia de que Juan Gómez-Acebo y la princesa Kalina estaban emparentados, ya que el padre de Juan Filiberto y la madre de Kalina eran primos.

Juan Filiberto Gómez-Acebo.

El romance finalmente no prosperó. Kalina se casó el 26 de octubre de 2002 con el aventurero y explorador Kitín Muñoz, íntimo amigo del Rey Felipe VI. Como todo queda en casa, fue otro aventurero y deportista vinculado con los Borbones, Álvaro de Marichalar, quien presentó a la pareja. Tras contraer nupcias con Kalina, Kitín Muñoz recibió los títulos de príncipe de Bulgaria, príncipe de Sajonia Coburgo y duque de Sajonia.

La siguiente unión de Juan Filiberto estuvo rodeada de polémica. Aunque se trataba de una sólida relación sentimental. Era la letrada Gabriela de la Rosa Misol, hija de otro “ilustre” venido a menos, pero que en su día fue un muy influyente personaje dentro del poder económico y político español, el empresario catalán Javier de la Rosa, que hiciera su fortuna en la década de los años ochenta a la sombra del grupo Kuwaití KIO y que en su día señalara al Rey Juan Carlos de Borbón como perceptor de supuestos ingresos de este conocido grupo árabe.

La abogada Gabriela de la Rosa, que según sus amigos es “una chica muy espabilada”, nunca escondió su relación con el sobrino varón mayor del Rey Juan Carlos, quien tampoco relegó de ella. Juntos acudieron a la boda de Estado de Felipe VI con Letizia Ortiz. Y del brazo entraron en la catedral de la Almudena haciendo público un noviazgo que causó estupor en los cenáculos empresariales y políticos.

Se da la circunstancia de que Gabriela de la Rosa, nacida el 1 de febrero de 1975, es la persona que se ocupó como letrada de la defensa de su padre, embutido en multitud de pleitos judiciales y quién ha visitado con asiduidad las cárceles españolas. Algunos de los pleitos de Javier de la Rosa han involucrado de manera indirecta al Rey Juan Carlos I y de manera directa a su común amigo y valedor, el ya fallecido Manuel Prado y Colón de Carvajal. Fue gracias a la intervención de este último como Javier de la Rosa y el Rey Juan Carlos I mantuvieron a principios de los años 80 unas muy buenas relaciones comerciales, refrendadas con negocios interrelacionados que permitían a la familia De la Rosa acudir informalmente y con asiduidad al Palacio de la Zarzuela. Esta relación generó tensiones entre doña Pilar y el Rey Juan Carlos.

Sin embargo, todo pasó. Años después, Juan Filiberto se casó en secreto en enero de 2014 en el consulado español en Miami con la que fue esposa durante cinco años, Winston Holmes Carney. Se trataba de una chica estadounidense con la que fue padre de su hijo Nicolás. Único hijo fruto de esta relación, que se rompió el mes de mayo de 2019.

Pero Juan Gómez Acebo tiene una gran mancha en su expediente personal. Fue condenado en 1997 por la Justicia francesa a seis meses de prisión por un homicidio imprudente. Gracias a sus buenos contactos logró que la pena se le conmutara por trabajos sociales en el servicio de urgencias de un hospital de Madrid durante el mismo tiempo que establecía la condena. Esta sentencia vino propiciada por un aparatoso accidente de tráfico ocurrido en 1993 en una de las carreteras del país vecino, en el que éste se vio involucrado y donde falleció una joven portuguesa de 19 años.

Bruno Alejandro Gómez-Acebo

Nacido el 15 de junio de 1971. Bruno sí se dedica por completo a los negocios inmobiliarios y financieros de la familia. Figura como  administrador de la firma Gómez Acebo Consultores Inmobiliarios SL, sociedad constituida en el 2001, con tan sólo 3.606 euros de capital.

Y al igual que su hermana Simoneta también figura como consejero en la sociedad de inversión mobiliaria de capital variable Labiernag 2000, que mantiene la familia Gómez-Acebo y Borbón como principal estilete inversor.

Bruno Gómez-Acebo.

Además, se constituyó como socio de la firma deportiva Fumarel, que uniformó al equipo olímpico español en los Juegos Olímpicos de Sydney en el año 2000. No hay que olvidar que los Borbones han estado siempre muy vinculados con el Comité Olímpico Español y, en concreto, la fallecida infanta Pilar de Borbón.

Bruno fue además el primero de los cuatro hijos varones de la Duquesa de Badajoz en contraer nupcias. Fue en el Real Monasterio de la Encarnación de Madrid, el 5 octubre de 2002, cuando contrajo matrimonio con Bárbara Cano y de la Plaza, hija de Antonio Cano Villajos y María del Carmen de la Plaza Donoso. Bárbara, que nació en 1972, mantuvo con Bruno un largo noviazgo de cinco años. Para la infanta Pilar esta boda fue algo muy especial. Y doña Pilar eligió para el enlace un vestido largo en raso azul eléctrico con escote recto, combinado con un abrigo azul ribeteado con una cenefa de pedrería. Zapatos forrados de azul y bolso de plumas a juego.

Bruno Gómez-Acebo y Barbara Cano.

Entre los invitados, se encontraban la Familia Real española al completo; el príncipe Kubrat de Bulgaria y su mujer, Carla Royo Villanova; el Infante Don Carlos de Borbón-Dos Sicilias y su esposa, la princesa Ana de Francia, Duques de Calabria; la princesa Beatriz de Orleáns, con su hija Adelaida y su yerno Pierre-Louis Dailly; la baronesa Thyssen-Bornemisza, Carmen Cervera; así como influyentes empresarios como el que fuera presidente de Repsol, Alfonso Cortina, y su mujer Miriam Lapique.

El entonces príncipe Felipe fue testigo del novio, que lució un llamativo chaleco con flores naranjas a juego. La pareja tuvo su primer hijo el 5 de noviembre de 2004, de nombre Alejandro Juan, convirtiéndose en el cuarto nieto de la Infanta Pilar. Un año después, el 23 de noviembre de 2005 llegaba el segundo hijo de Bruno y Bárbara, al que llamaron Guillermo. 

Beltrán Gómez-Acebo

Es el cuarto hijo de la infanta Pilar. Beltran Luis Alfonso nació en Madrid el 20 de mayo de 1973. Aunque es conocido familiarmente como Beltrán. Ha desarrollado su trabajo en un sector empresarial menos vital que sus hermanos.

Y eso que Beltran, desde su nacimiento, ha tenido siempre una cierta inclinación a la grandeza real, ya que en su bautizo actuaron como padrinos la Condesa de Castañeda, tía del Duque de Badajoz, y el príncipe Ataúlfo de Orleáns-Borbón, un bisnieto de Isabel II. Esta costumbre de tener siempre en todos sus actos como testigo a algún miembro de la realeza lo llevo también a su jura de bandera. Fue en 1998 en el acuartelamiento Primo de Rivera, de Melilla, en presencia de su abuela materna, María de las Mercedes de Borbón y Orleans, la condesa de Barcelona.

A Beltrán Gómez-Acebo se le relacionó con la modelo Inés Sastre, muy amiga de los miembros más jóvenes de la Familia Real española, con los que se veía a menudo en las vacaciones estivales de Mallorca. Beltrán e Inés coincidieron en París, donde estudiaban y trabajaban, respectivamente, y entablaron una buena amistad.

Desde siempre Beltrán ha tenido una preferencia especial por las modelos. Y, al final, acabó casándose en primeras nupcias con una de las más conocidas, la gallega Laura Ponte. La pareja también se conoció en París, en el verano de 1997, en una fiesta en la casa de la princesa Tatiana de Liechtenstein, cuarta y única hija del príncipe Hans Adam II de Liechtenstein.

Beltrán Gómez-Acebo y Laura Ponte.

La modelo Laura Ponte es también buena amiga del Rey Felipe VI, pero nunca se le llegó a relacionar con él. La modelo nació en Vigo, aunque se crió en Oviedo. Es hija de los periodistas José Manuel Ponte Mittelbrunn y Marcela Martínez Zapico. Laura inició su carrera de modelo en 1993, desfilando en la pasarela Cibeles, donde ganó el concurso “Look of the year”. Su personal mirada y camaleónica imagen no tardaron en situarla entre las modelos mejor pagadas del mundo.

La boda de Laura Ponte y Beltrán Gómez-Acebo se produjo el 18 de septiembre de 2004 en la Real Colegiata del Real, en el Palacio de la Granja, de Segovia. La novia lució un vestido diseñado por su amigo Miguel Palacio. El rostro lo cubría un velo de encaje de chantilly antiguo, que se lo había prestado su cuñada Isabel Peñalosa, esposa de su hermano Jacobo.

El lugar del enlace fue escogido especialmente por la familia Gómez Acebo, ya que en el Palacio de La Granja fue donde nació don Juan de Borbón, el abuelo paterno del novio, y en el Panteón de la Colegiata reposan los restos de Felipe V e Isabel de Farnesio. También especial fue una de las piezas musicales elegidas para el oficio religioso, el Ave María, compuesto especialmente por José Miguel Fernández Sastrón, el esposo de Simoneta, y que interpretó el coro Magnificat.

Finlamente, decidieron separarse en 2009 y el divorcio se firmó en 2011. Pero sus conquistas siguieron, hasta que Beltrán encontró a Andrea Pascual, con quien se casó y tuvo a su tercer hijo, Juan. Un bebé prematuro que, afortunadamente, consiguió salir adelante sin problema. Los otros dos hijos de Beltran Gómez-Acebo con Laura Ponte son Luis Felipe y Laura. 

Fernando Gómez-Acebo, el más problemático

El último integrante de la saga familiar, era Fernando Gómez-Acebo de Borbón que vino al mundo el 30 de septiembre de 1974y y que ha fallecido este 1 de marzo de 2024, a los 49 años de edad. Era el más alocado de todos, el más simpático a la par que inseguro y más problemático.

Creció junto a sus hermanos en el chalet familiar de 'Los Jerónimos', ubicado en la urbanización de La Florida, a las afueras de Madrid, y bautizado así en recuerdo de la catedral de Lisboa donde se casaron sus padres. Una casa de los Gómez Acebo que era conocida popularmente por el nombre de La fonda del Peine, en referencia a la cantidad de gente que entraba y salía, de distinto pelaje y pedigrí.

Las amistades de Coco, como era conocido cariñosamente, nunca fueron del agrado de la propia infanta Pilar. Muchas de estas amistades provenían de la noche de Palma de Mallorca, donde en su infacia casi se crió y donde era un asiduo. En la capital palmesana era un personaje muy conocido. Incluso, por los propios inspectores de policía, que le guardaban y protegían en sus noches fatídicas en algunos lugares cercanos a la célebre plaza Gomila. 

Por aquellos años noventa, en plena juventud, era uno de los que siempre acompañaba a su primo, el entonces príncipe Felipe de Borbón, durante su célebre noviazgo con Isabel Sartorius, un aspecto éste que no gustaba en absoluto a la reina doña Sofía, su tía. Sus problemas de salud, dicen quienes le conocían, que quizá "provenían a causa en su día de sus excesos”.

Estos le llevaron ya hace años a estar ingresado en la clínica Ruber Internacional, de Madrid, por una supuesta dolencia pulmonar. Tanto es así que estuvo a punto de no poder asistir al enlace de su hermano Beltrán con Laura Ponte. Quizá, tildado como el sobrino más conflcitivo del rey Juan Carlos, sólo participó junto a la Familia Real en actos oficiales muy puntuales. Solo lo hizo en bodas, funerales o aniversarios de especial repercusión, como en las bodas de plata de la proclamación del Rey de España.

Mónica Martin Luque y Fernando Gómez-Acebo.

La relación de sus supuestos líos amorosos es muy larga y extensa. Entre ellos, figura María Chávarri, hermana de Marta Chavarri. Sin embargo, finalmente, tras varios romances, Fernando se casó, después de tres años de noviazgo, con Mónica Martín Luque, la única novia oficial, en teoría, que se le ha conocido. 

El hijo menor de los duques de Badajoz contrajo matrimonio a la edad de 30 años, y con asistencia de la Familia Real, un sábado 27 de noviembre de 2004, en el Real Monasterio de la Encarnación. En esta iglesia, con una preciosa fachada del siglo XVII, se había casado ya su hermano Bruno con Bárbara Cano. Lo curioso es que esta boda se celebraba con tan sólo dos meses de diferencia de la otra. En este corto periodo de tiempo, los dos hijos menores de la infanta Pilar de Borbón, Beltrán y Bruno, contrajeron matrimonio. 

Pero el matrimonio acabó en 2011, de forma tormentosa, con una exclusiva de Mónica Martín a la revista ¡Hola!. Un hecho que no gustó nada en Zarzuela. Mónica inició una relación con un desconocido empresario. Y desde entonces, comenzó una vida ligada a anuncios constantes de boda, seguidos de sus desmentidos, y teniendo como paño de lágrimas a su amiga Ivonne Reyes.

Fernando Gómez-Acebo junto a Nadia Halamandari.

Por su lado, Fernando se unió sentimentalmente con Paula Molina. Sin embargo, no se casó finalmente. Y sí lo hizo, por sorpresa, con la periodista griega Nadia Halamandari,con la que ha tenido su único hijo, llamado Nicolás. Pero el matrimonio tan solo duró un año, ya que también se separaron de forma rápida y súbita. 

Este 1 de marzo, Fernando Gómez-Acebo, el hijo menor de la infanta Pilar de Borbón y del aristócrata Luis Gómez-Acebo, ha fallecido de manera repentina a los 49 años de edad víctima de una insufiencia respiratoria que ya venía arrastrando desde hace años y por la que esperaba un trasplante de pulmón. Todos los esfuerzos han sido en vano tras sufrir un crítico desenlace en las últimos días. El sobrino más polémico y querido de Juan Carlos I no ha podido con última batalla en vida.