20 de mayo de 2024
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FIN DE SEMANA

La hija del Emérito planea “venir más a España” pero seguir en Ginebra debido a los trámites de su divorcio con Urdangarin y la herencia de su padre

La infanta Cristina no dejará su residencia fiscal en Suiza y solo vendrá a España los 183 días que permite la Ley

El Cierre Digital en Infanta Cristina de Borbón.
Infanta Cristina de Borbón.
Pese a los rumores que indican que la infanta Cristina piensa volver a España, el director de elcierredigital.com, Juan Luis Galiacho, sostiene que “tiene idea de venir más a España, pero seguirá teniendo su residencia fiscal en Suiza”. Debido a esto, solo podrá venir un máximo de 183 días, según la legislación española. La residencia fiscal de la infanta permanecerá en Suiza, país en el que vive, debido a las gestiones que provocan su divorcio con Iñaki Urdangarin y la herencia de su padre.

Según informaba recientemente la revista Semana, la infanta Cristina estaría planteándose volver a España. Una decisión tomada, tal y como indican desde el citado medio, por la incipiente emancipación de su hija pequeña, Irene Urdangarin, que con los 18 años recién cumplidos y ya graduada en Bachillerato, pretende estudiar gestión hotelera en la EHL Hospitality Business School de Lausana. Debido a esto, y para evitar el traslado que tendría que hacer desde Ginebra —ciudad donde reside­— hasta Lausana, pretende mudarse a esta última ciudad.

No obstante, a pesar de la información difundida por esta revista, Cristina de Borbón no tendría pensado establecer de nuevo su residencia fiscal en España. Según confirmaba el director de elcierredigital.com, Juan Luis Galiacho, el pasado jueves en el programa Cuatro al día, Cristina “tiene idea de venir más a España, no como ahora, que no venía apenas. Pero su idea no es venir a fijar su residencia fiscal en España, así que el tiempo que puede pasar en España no superará los 183 días que le permite la legislación, porque su residencia fiscal seguirá en Suiza. Tiene que estar ahí por las cantidades de dinero que se están moviendo por el tema de la herencia y del divorcio”.

Estos 183 días vienen marcados por el artículo 9 de la Ley 35/2006 del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, que establece que una persona que pase más de 183 días al año en España se considera que tiene residencia fiscal en este territorio. Por lo tanto, la infanta Cristina tendría que pasar menos de 183 días para seguir manteniendo la residencia fiscal en Suiza. Estos días no son continuos, sino que se suman todos los periodos en los que haya visitado el país en cuestión.

Su idea de pasar más tiempo en España —siempre dentro de los márgenes de la Ley— viene dada por la independencia que alcanzará la pequeña de los Urdangarin, pero también porque sus dos hijos mayores, sus amigos y su madre, la reina emérita Sofía —uno de sus grandes apoyos—, viven en España.

El divorcio de Cristina y Urdangarin, “sin filtraciones”

Uno de los motivos por los que Cristina mantendrá su residencia fiscal en Suiza es para poder gestionar el tema del divorcio con Iñaki Urdangarin. El pasado mes de junio, los Borbones se reunían en Ginebra (Suiza) en el prestigioso y exclusivo hotel Four Seasons Des Bergues de Ginebra, uno de los alojamientos preferidos de la Casa Real. De hecho, en agosto de 2022, tal y como desveló elcierredigital.com, Juan Carlos I acudió a este hotel con su hija, la infanta Elena, en pleno divorcio de Cristina con Iñaki Urdangarin.

Imágenes del rey emérito en el hotel Four Seasons des Bergues en agosto de 2022./ Autoría: elcierredigital.com.

Según pudo conocer elcierredigital.com, en el cónclave que tuvo lugar en este prestigioso hotel, los miembros de la Familia Real “se cerraron en banda para evitar cualquier posible filtración sobre el divorcio entre Cristina e Iñaki de Urdangarin. No va a trascender la cantidad que será abonada a Urdangarin ni cuándo sucederá esto”, informaban fuentes cercanas a la familia real.

Este diario también pudo saber que el divorcio se producirá en una notaría de Ginebra, mientras que otro de los temas candentes para el Emérito —el reparto de su herencia—, tendrá lugar en una notaría en Lausana, una ciudad suiza clave para los Borbones.

El día 5 de junio, cuando Irene Urdangarin cumplió los 18 años, se abría la puerta para que se iniciara el divorcio de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin. Por lo tanto, a partir del día 6 de junio podría haberse producido en cualquier momento. No obstante, a unos días del 18 aniversario de Irene Urdangarin, este diario pudo conocer que el exduque de Palma habría “apretado aún más el acelerador” y se habría mostrado disconforme con el dinero que se le dará una vez se formalice el divorcio, “pidiendo más de la cantidad acordada”.

En los primeros acuerdos monetarios para llevar a cabo esta ruptura, que sufragará el rey Emérito Juan Carlos I a través de sus cuentas, el exdeportista de élite recibiría 25.000 euros mensuales además de 2.000.000 de indemnización y varios inmuebles, como ya informó elcierredigital.com.

No obstante, estas cantidades podrían variar en el supuesto caso de que se hubiese incrementado este acuerdo inicial. A pesar de todo, Iñaki Urdangarin aceptó este pacto en un inicio con una única condición que sigue manteniendo. Esta es, según comentaban fuentes cercabas al exdeportista a elcierredigital.com, que “las cantidades consten en un documento oficial”.

Este documento, que presumiblemente sería de carácter privado y se presentaría ante notario el día del divorcio, serviría para que el exduque se cubriese las espaldas ante posibles investigaciones de la Hacienda Pública, ya que, a diferencia de la infanta Cristina, tiene residencia fiscal en España.

Estas fuentes comentan a elcierredigital.com que la petición de Urdangarin viene dada porque “está cansado de marrones”, habiendo afirmado en alguna ocasión que “ya se ha comido muchos”.

Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin en su boda.

Además de las cantidades económicas que Urdangarin percibiría tras el divorcio, el exduque de Palma habría intentado mantener a su escolta personal. Para ello, habría alegado que, dado que está en libertad condicional hasta abril de 2024 —cuando cumpliría la condena de cinco años y diez meses impuesta por el caso Nóos—, “quiere tener seguridad” hasta entonces “por si le pasa algo, como las amenazas que Corinna Larsen dijo haber recibido”. Esta también sería una cláusula importante dentro del acuerdo de divorcio.

Herencia millonaria y conversaciones sobre la vuelta del Emérito a España

Mientras que el acuerdo de divorcio tendrá lugar presumiblemente en Ginebra, otra ciudad suiza será la base para el reparto de la herencia millonaria de Juan Carlos I: Lausana. Las últimas visitas del Emérito a España, Suiza y Reino Unido habrían tenido como telón de fondo solucionar este asunto, así como el ya mencionado divorcio de su hija Cristina.

Según ha podido conocer este diario, se estarían ultimando los detalles para que “cada una de sus hijas reciba la cantidad correspondiente”, después de que Felipe VI renunciara a la herencia de Juan Carlos I.

Tal y como informan fuentes cercanas a la familia real, "todo se hará al margen de la Hacienda Pública española, pues las gestiones pertinentes se llevarán a cabo desde Suiza y Reino Unido, donde están las cuentas de Juan Carlos y de donde proceden los bancos que las llevan". Motivo por el cual la infanta Cristina mantendrá su residencia fiscal en el extranjero.

Las infantas Elena y Cristina de Borbón.

Respecto a los beneficiarios de su herencia, el rey Felipe VI "continúa siendo un interrogante" a pesar de haber renunciado a ella. Sin embargo, fuentes cercanas a la Casa Real aseguran que Cristina de Borbón "podrá recibir su parte sin problema, pues su domicilio fiscal está en Suiza —donde además resolverán los trámites de su divorcio y la pensión que recibirá Urdangarin—". Esto sucederá así porque Irene, la menor de los hijos de Cristina, se quedaría con ella en el país suizo para cursar una carrera universitaria durante cinco años.

Sin embargo, la infanta Elena, con domicilio fiscal en España, no podría recibir la herencia de su padre sin que pase por manos de la Hacienda española. Por ello, según indican fuentes cercanas a la familia real a elcierredigital.com, "el supuesto viaje de Victoria Federica a Abu Dabi para reunirse a vivir con su hermano y su abuelo permitiría que el dinero que le corresponde a Elena llegue a través de sus hijos". Esto sería posible si Elena se convirtiera en la administradora de esa cuantía que recibirían Froilán y Victoria Federica.

Con todo esto atado y la situación más tranquila, según ha podido conocer elcierredigital.com, la infanta Elena ha “mostrado el deseo de que su padre vuelva a España. Están intentando todos que vuelva”. Dentro de este “todos”, se incluiría el propio Felipe VI.

“Ha habido acercamientos por parte de la familia real con Feijóo por si, en el supuesto caso de que el PP ganase las próximas elecciones del 23 de julio, pudiesen llegar a un entendimiento para que el rey emérito vuelva a España. Parece ser que Felipe VI está transmitiendo a sus más allegados que, dada la avanzada edad de su padre (85 años), quiere tenerle cerca. Para él sería un gran disgusto si su padre fallece en el extranjero”, cuentan fuentes del entorno a elcierredigital.com.

Por el momento, los planes del Emérito incluyen pasar “largas temporadas” en España mientras mantiene su residencia fiscal en Abu Dabi. Uno de los próximos viajes que planea hacer, como informábamos en elcierredigital.com, es a las regatas de Sanxenxo tras las elecciones del 23 de julio, donde se quedaría hasta partir en agosto a Reino Unido para participar en el Campeonato del Mundo de Wirth.

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