Quién es Irene, la hermana solidaria de la reina Sofía que nació en Sudáfrica

Tras un tiempo alejada de los focos, Irene de Grecia se ha dejado ver junto a la reina Sofía en un evento muy especial. Las hermanas han asistido a un concierto solidario organizado por la orquesta La música del reciclaje, de Ecoembes. Actuación en la que han participado artistas de la talla de Miguel Ríos o Iván Ferreiro.

En esta ocasión, dicho evento musical se ha organizado para recaudar fondos que irán destinados a ayudar a los afectados por la DANA. Catástrofe con la que la reina se ha mostrado muy involucrada desde el principio.

Sin embargo, y a pesar de la presencia de la reina Sofía, todos los ojos han estado puestos en su hermana, Irene de Grecia. Y es que, si por algo es conocida, es por su lado más solidario, el cual ha dejado al descubierto en más de una ocasión.

La hija pequeña de Pablo de Grecia y Federica de Hannover tuvo una vida muy diferente a la de sus dos hermanos. Y es que, mientras ellos nacieron en Atenas, ella lo hizo en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, el 11 de mayo de 1942, a consecuencia del exilio de sus padres durante la II Guerra Mundial.

Desde muy joven, Irene demostró tener un gran talento para la música, tanto es así que es una excelente pianista. Sin embargo, esta expresión artística no es su única gran pasión.

Además, si por algo es conocida Irene de Grecia es por su fuerte implicación con los trabajos solidarios. De hecho, ha llegado a ser presidenta de la ONG Mundo en Armonía.

Esta organización sin ánimo de lucro trabaja para asegurar “el bienestar moral, espiritual y material de todos los seres vivos”. Todo ello, “sin discriminación alguna de nacionalidad, religión o ideología política”.

Todo sobre Irene de Grecia, la hermana solidaria de la reina Sofía

Aunque nació en Sudáfrica, después de la muerte de su padre y el golpe de Estado contra su hermano Constantino, Irene de Grecia y su familia se exiliaron en Roma. Sin embargo, en 1973, ella y su madre se mudaron a la India, lugar en el que ambas se enamoraron de la filosofía hindú.

Tanto es así que, durante los años que vivieron en Madrás, ella cambió considerablemente su apariencia. A raíz de esta decisión, y de su fuerte personalidad, sus seres queridos comenzaron a llamarla la ‘tía pecu’, un diminutivo de “peculiar”.

No obstante, su vida cambió en 1981 con el fallecimiento de su madre. Tras esta dura pérdida, Irene de Grecia se trasladó a España y se instaló junto a su hermana mayor en la Zarzuela. Desde entonces, se han vuelto inseparables.

En el año 2002, a Irene de Grecia le diagnosticaron un cáncer de mama, motivo por el que la reina Sofía mandó instalar en palacio una zona dedicada a sus cuidados. Algo que ella misma le contó a Eva Celada, la autora encargada de su biografía:

“Ella se sentaba en un sillón en la habitación para hacerme compañía y, a la vez, estudiaba sus papeles y ponía al día la agenda. Cuidó de mí en cada momento durante aquellos meses”.

En el terreno de lo sentimental, Irene de Grecia nunca llegó a casarse. Y es que, pesar de haber tenido un gran número de pretendientes durante toda su vida, hubo dos personas que se opusieron en varias ocasiones: su madre y Juan Carlos I.