Pisos turísticos amenazan la historia de Marbella: 'Nos quitan la identidad cultural'

El castillo de Marbella es una de las principales obras arquitectónicas que otorgan valor histórico a esta ciudad costera, que, además de destino predilecto de la jet set y turístico, es también el ‘refugio’ del crimen organizado. El Gobierno de España ha invertido 450.000 euros para la rehabilitación del castillo que terminará este mes de julio.

Concretamente, la Casa del Gobernador, que se encuentra en el interior del castillo y fue residencia del rey Felipe IV, en 1624, ha sido objeto de un plan de construcción de apartamentos turísticos. En esa casa también nació José López Domingo, el primer y único presidente del Gobierno (1906) marbellí.

Esta amenaza de especulación urbanística en uno de los principales puntos históricos de Marbella ha provocado la inmediata reacción de ciudadanos, políticos, entidades y figuras de la cultura, que han impulsado un manifiesto con la intención de preservar el patrimonio histórico municipal de la Casa del Gobernador. En este manifiesto se pide que el inmueble sea convertido en un espacio cultural y no turístico. 

La Casa del Gobernador pertenecía a Sevillana de Electricidad, que fue absorbida por Endesa. El edificio quedó libre y hace poco fue adquirida por un promotor inmobiliario privado que solicitó licencia para construir once apartamentos. El proyecto se encuentra en fase inicial y la mayoría de apartamentos serían construidos en la casa y el resto en los almacenes que se encuentran adosados a la muralla. Además, esta casa cuenta con un patio en el que hay restos arqueológicos romanos que están por explotar. 

En una conversación con elcierredigital.com, el experto en gestión y presidente de Fundación Ciudad, Tomás Vera,  señala que “Marbella es una ciudad con capacidad económica, que puede invertir en generar un expediente de expropiación por interés público y pagar un justiprecio por ese espacio. Esto permitiría que se aborde en dos o tres años la construcción de un museo, que no sería muy costoso. Es un icono que explica muchos años de historia de Marbella en un único espacio”. 

"Nadie conoce la historia porque no se cuida ni se cuenta"

Para el experto en gestión, “el castillo de Marbella es el origen de la ciudad y es un bien de interés cultural. No puedes hurtar a la ciudad ese espacio, sobre todo, cuando no tiene ninguna otra cosa en términos de patrimonio histórico, pese a que es una ciudad que tiene una historia rica y antigua. Nadie conoce esa historia porque no se cuida ni se cuenta. Hay que cuidar la identidad de la ciudad”.

Las reclamaciones de los indignados con este plan de desarrollo urbanístico argumentan la necesidad de preservar un espacio que otorga identidad histórica a los marbellís. Según sus testimonios, cuando preguntaron a la alcaldesa sobre el movimiento para salvar la Casa del Gobernador y sobre la autorización de la licencia para construir apartamentos turísticos, la edil afirmó que desconocía el asunto. “Si la alcaldesa no está informada, es ignorante y si está informada, es insensible”, sentenciaTomás Vera. 

“Aparte de esto, mienten diciendo que son un movimiento político en contra de los apartamentos turísticos.  Los ciudadanos e instituciones que estamos en contra de los apartamentos turísticos somos un movimiento a favor de recuperar el patrimonio histórico de la ciudad de Marbella y de generar un núcleo de conocimiento para los jóvenes de la ciudad de lo que es la historia y el patrimonio de la ciudad de Marbella. Somos la cuarta ciudad de España con más apartamentos turísticos, ya que tenemos cerca de 7.000”, añade el experto en gestión.

La situación que vive la ciudad de Marbella

Marbella se ha convertido en una ciudad de 'refugio' del crimen organizado, una ciudad ‘financiera’ donde se da rienda suelta a los negocios y, en ocasiones, a los delitos. Sin embargo, también es una ciudad que cuenta con 150.000 personas empadronadas, que desempeñan diferentes labores productivas para el funcionamiento de la ciudad.

Tomás Vera denuncia que “no estamos hablando de una ciudad pequeña. Sin embargo,  tiene una ausencia absoluta de instalaciones culturales, deportivas, educativas y sociales. No hay museos, ni centros culturales ni salas de exposiciones pictóricas. Posiblemente, sea la única ciudad del mundo de más de 150.000 habitantes que no tiene estadio de fútbol, pista de atletismo o piscina cubierta”.

“El principal problema es que no hay un museo histórico de la ciudad, que es por donde empieza cualquier pequeña ciudad  a aumentar su patrimonio histórico y guardar el mismo. Tenemos patrimonio histórico, pero no dónde exponerlo. Hay un desierto histórico que no es positivo para los marbellís. Todos estos antecedentes agravan la situación”, concluye Tomás Vera.