El plan con el que Cari Lapique y Carla Goyanes han podido recuperar la sonrisa
Cari Lapique y Carla Goyanes reaparecen juntas en Madrid dos meses después del fallecimiento de Carlos Goyanes
Dos meses después del fallecimiento de Carlos Goyanes, y la posterior muerte de su hija Caritina, Cari Lapique y Carla Goyanes han comenzado a retomar poco a poco su vida social. Y prueba de ello es el último plan que han hecho juntas.
El pasado fin de semana, madre e hija decidieron acudir al estadio Santiago Bernabéu para disfrutar de un partido de fútbol. Aunque no abandonaron su luto, durante dicho encuentro deportivo, ambas lograron esbozar alguna que otra sonrisa durante los 90 minutos que duró el partido.
Este encuentro, entre el Real Madrid y el Villarreal, terminó con una victoria 2-0 para el equipo madrileño. Aunque fue un partido cargado de emoción, lo más importante para Cari Lapique y Carla Goyanes fue el respiro que les ofreció.
Durante dicho partido, ambas mujeres lograron dejar a un lado sus preocupaciones y centraron toda su atención en las múltiples jugadas de ambos equipos.
Cari Lapique y Carla Goyanes logran dejar sus preocupaciones a un lado gracias al fútbol
Todo apunta a que, a pesar de estos dos grandes mazazos, Cari Lapique y Carla Goyanes han encontrado consuelo en los pequeños momentos que les permiten distraerse de su dolor. Entre ellos, su última visita al Santiago Bernabéu.
Sin embargo, durante estos dos largos e interminables meses, el apoyo incondicional de sus seres queridos también ha sido crucial para que madre e hija comiencen a reconstruir sus vidas.
Cari Lapique ha contado en todo momento con la ayuda de su hermana Miriam y de sus amigos más cercanos, entre los que se encuentran Nuria González o Isabel Preysler. Estas personas han sido, sin duda, su pilar de fortaleza en estos momentos tan difíciles.
La familia ha demostrado una gran entereza ante la adversidad. A pesar del dolor, han encontrado formas de seguir adelante, manteniéndose unidas. El partido en el Santiago Bernabéu fue un ejemplo de cómo, poco a poco, intentan retomar la normalidad, aunque el dolor esté presente.
No obstante, el pasado ha dejado cicatrices profundas en ellas. El 7 de agosto, Carlos Goyanes falleció a los 79 años en su casa de Marbella a consecuencia de un infarto. Pocos días después, el 26 de agosto, su hija Caritina también falleció, dejando a la familia sumida en un profundo dolor.
Aunque el proceso de duelo es largo, ahora Cari Lapique y Carla Goyanes están demostrando que, con el tiempo, es posible encontrar pequeños momentos de alegría en medio del dolor.
El último partido de fútbol que han visto fue solo una pausa en la tristeza, un respiro en medio de la tormenta. Sin embargo, esos instantes son los que permiten a la familia seguir adelante, apoyándose mutuamente en cada paso del camino.
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