Vuelve a la actualidad, una vez más, una de las desapariciones más mediáticas del panorama internacional. Después de 30 años de búsqueda, teorías y pruebas que han resultado ser fallidas, el caso de Ylenia Carrisi es de nuevo el centro de todas las miradas.

A la hija de los famosos cantantes Al Bano y Romina Power, una mujer joven, rubia y de ojos azules de entonces 23 años, se le perdió la pista el 6 de enero de 1994 en Nueva Orleans. Tras declararla las autoridades italianas muerta en 2014 –a petición de su padre Al Bano, que siempre mantuvo que su hija había fallecido tras precipitarse en el río Misisipi–, esta semana ha salido a la luz que un detective privado americano podría aportar una prueba de ADN y demostrar que Ylenia sigue viva.

Ylenia Carrisi, antes de su desaparición

Romina y Albano habían sido la pareja más famosa de Europa durante años. Se conocieron en 1969 en el rodaje de una película. Él era un cantautor de éxito en los 60, en la mejor época de la música italiana. Ella era una joven y bella actriz hija de un mito de Hollywood, Tyrone Power, y de la bella actriz mexicana Linda Christian. En 1975 decidieron convertirse en dúo musical y durante 25 años acumularon éxitos e incluso representaron a Italia en Eurovisión en 1985.

En noviembre de 1970 nació en Roma su hija mayor Ylenia. Desde pequeña ocupó la portada de las revistas y llegó a probar suerte como cantante junto a sus padres, como presentadora en la versión italiana de La ruleta de la fortuna y como modelo llegando a posar junto Antonio Banderas.

La desaparición de  Ylenia Carrisi tuvo lugar en enero de 1994. Según algunas fuentes, la joven tenía un carácter complicado que le hacía chocar, en ocasiones, con su padre. Su madre Romina Power siempre ha desmentido que su hija tuviera ningún tipo de problemas, pero sí ha confesado que tenía 'ansias de vivir' y volar lejos del hogar. Por eso decidió iniciar el año viajando por Estados Unidos, el país de origen de su madre, y antes de desaparecer recaló en Nueva Orleans, una de las ciudades más bohemias del país.

Ylenia Carrisi junto a sus padres Romina y Al Bano.

El único testimonio que pudo aportar algo de luz acerca del caso de la hija de Romina y Al Bano fue el del guardián del Acuario Municipal de Nueva Orleans, que contó haber visto a una mujer con las mismas características físicas que Ylenia tirarse al río Misisipi. Al Bano siempre mantuvo esta versión y afirmó que está muerta a pesar de desear, con todas sus fuerzas, recuperar a su hija.

La pareja estrella de la música italiana viviría durante los siguientes cinco años marcada por la desaparición de su hija. Al Bano siempre dio por válida la versión del río. Incluso hizo público un diario de la joven que se encontró en el hotel donde se alojaba en Nueva Orleans en el que escribió: “Pertenezco al agua”. Esto revalidaría la tesis de que la joven acabó voluntariamente con su vida lanzándose al río.

Tras la desaparición de su hija, Romina y Al Bano vivieron desencuentros insalvables. Cada uno creía la versión que le convenía más acerca de la historia sobre la desaparición de Ylenia. Mientras que ella apostaba por ser positiva y pensar que, efectivamente, su hija estaba viva, él creyó a pies juntillas la versión del guardián del Acuario Municipal de Nueva Orleans.

En 1999 la pareja acabó en un divorcio que conmocionó a la prensa europea. Sólo unas semanas antes habían acudido en España al programa de María Teresa Campos Día a Día en Telecinco. La tensión entre los artistas era más que evidente y ante la pregunta de la periodista sobre la supuesta crisis que estaban viviendo aseguraron que los rumores siempre les han perseguido.

Desde entonces toda la familia paseó por platós televisivos tanto en Italia como España o Alemania. Yari, Cristel y Romina Jr., los hijos de los artistas se posicionaron a favor de una o de otro. También terció en el asunto Linda Christian, que no perdió la oportunidad de atacar al que fuera su yerno. También saldrían a luz infidelidades mutuas que pusieron en cuestión la visión idílica de la pareja.

Las diferentes teorías sobre el caso Ylenia

En 2005 se montó todo un escándalo mediático cuando la periodista Lydia Lozano aseguró tener datos para poder afirmar que la joven estaba viva. Poco después, ante la agresiva respuesta de Al Bano y consciente del error que había cometido, la hoy colaboradora de 'Sálvame' tuvo que recular entre lágrimas: "Me he precipitado. He hablado demasiado. Quiero decir, con el corazón en la mano, que mis intenciones eran buenas. Sólo pretendía dar una alegría. He metido la pata. Pido perdón. Estoy hundida", aseguró la periodista.

En junio de 2011, el semanario alemán Freizet Reuve aseguró que estaba interna en un convento. Sin embargo, la información nunca llegó a confirmarse. Para lo único que sirvió aquel atisbo de esperanza fue para que Romina, firme defensora de las teorías que aseguraban que Ylenia no había muerto, pudiese mantener la fe en recuperarla.

Al Bano y su hija Ylenia Carrisi.

En 2015, Paul Moody estaba a punto de jubilarse. Era forense en Florida y había pasado los últimos años de su vida identificando a las víctimas de Keith Hunter Jesperson,  el asesino de la cara feliz, que había matado a ocho mujeres. El año pasado, meses antes de dejar su puesto de trabajo, escribió a Jesperson a la cárcel en la que cumple varias cadenas perpetuas por sus crímenes.

El forense necesitaba identificar a la víctima número 8, la única a la que no había podido dar nombre. Y Jesperson, que apenas había colaborado hasta entonces con la policía, accedió a verlo. Le explicó que la había matado en 1994, en la cabina del camión que él conducía, que la había recogido en Tampa (Estado de Florida) porque la joven, que tenía entonces unos 24 años, quería ir a Las Vegas. Y que se llamaba Susan. Jesperson le dio un retrato robot. Más tarde  el asesino de la cara feliz identificó la fotografía de una joven: era ella. En realidad, el camionero estaba viendo la imagen de  Ylenia Carrisi, la hija mayor de los cantantes Al Bano y Romina Power, desaparecida en enero de 1994, a los 24 años, dada por muerta oficialmente 20 años después y que durante su estancia en Estados Unidos se hacía llamar Susan.

La maquinaria se puso en marcha y se iniciaron las primeras pruebas en los restos de Susan, cuyo cadáver fue encontrado en un bosque de Tampa en 1996, meses después de la detención de Jesperson. Las investigaciones preliminares del último año han dado lugar a claros indicios, en opinión de los investigadores encargados del caso: todo apuntaba a que Susan era Ylenia Carrisi .

Pero una vez más, solo se trataba de falsas esperanzas. Según confirmaban medios italianos y el programa Espejo Público, el cuerpo encontrado no es el de  Ylenia Carrisi. El sheriff del caso era el encargado de notificarlo a la familia, por lo que el misterio sigue sin resolverse y seguirá generando todo tipo de especulaciones.

Ylenia en su juventud (izda.) y la supuesta Ylenia madura (derecha).

En octubre de 2019 el asunto volvió de nuevo a los medios tras la publicación de una fotografía de una mujer en la ciudad de Venecia. El hombre que tomó la instantánea aseguraba que se trataba de la hija de Al Bano y Romina Power. El autor de la foto, Roberto Fiasconaro, asegura que Ylenia, desaparecida, habría regresado a Italia en el año 2000 y que estuvo a punto de ser descubierta por un diario alemán.

La mujer retratada en Venecia recordaba mucho físicamente a la primogénita de Al Bano pero con los lógicos cambios del paso del tiempo. Según el relato de Fiasconaro, éste se habría acercado a ella para preguntarle en inglés si era Ylenia Carrisi y ella habría respondido instintivamente que sí. Sin embargo, luego lo habría negado y sus amigos y un niño que estaba con ella se habrían interpuesto para llevársela.

La última de las teorías que han salido a la palestra mediática llega de la mano de un expolicía de Florida, ahora detective privado, que asegura que una prueba de ADN podría probar que Ylenia Carrisi está viva. De ser esto cierto, la hija de Romina y Al Bano tendría hoy 53 años.