Localizan con vida a Ana María Ruiz, la mujer desaparecida tras salir de un hospital

Ana María Ruiz Serrano desapareció el pasado 7 de octubre en Málaga y desde entonces no se sabe nada de ella. Sin embargo, su última comunicación con sus hijas fue el 2 de octubre. Ese día envió un audio muy nerviosa y llorando, a la pequeña de sus tres hijos, en el que le dijo que estaba en el médico por una revisión, ya que estaba a la espera de una cirugía de corazón.

Desde ese día el teléfono de Ana María se apagó y sus hijas no volvieron a saber nada de ella. Afortunadamente la mujer ya ha sido encontrada con vida y este 27 de octubre se reencontrará con sus hijas.

Cinco días después esta mujer fue a urgencias del Hospital Universitario Virgen de la Victoria en Málaga. El 7 de octubre su hija Alba llamó al hospital solicitando conocer por qué su madre había ido al hospital el 2 de octubre. Los médicos le dijeron que no había acudido por ningún motivo quirúrgico.

Su expareja se encuentra en prisión

Elcierredigital.com ha contactó con  Alba, hija de Ana María Ruiz Serrano, que señalaba: “Mi madre es una persona que lleva diez años entre centros de rehabilitación, albergues, casas de acogida de mujeres maltratadas y en la calle. Ha ingresado en varias ocasiones por palizas de su pareja. En abril de 2023 este hombre le dio una paliza muy fuerte y mi madre ingresó en el Hospital Clínico de Málaga, donde fue operada por rotura de pelvis y cadera. Estando en el hospital enfermó de Covid y cogió una neumonía". 

Tras permanecer dos meses en el hospital, Ana María salió a una residencia de monjas y de allí fue a un centro de mujeres maltratadas. El 18 de septiembre se celebró el juicio y su pareja entró en prisión pese a que la desaparecida no declaró. “Ana María vivía con su maltratador en una autocaravana, que fue donde recibió la última paliza. El día que recibió la paliza se la encontraron desnuda e inconsciente. Con este hombre estuvo cerca de un año y medio. Desde que recibió la paliza mi madre va con un andador porque está recién operada de la cadera”, añadía Alba. 

La hija de la desaparecida indicaba que “el mismo día del juicio la encontraron bebida en la casa de mujeres maltratadas y la echaron a la calle en plena noche. Desde que la echaron de allí el 18 de septiembre por incumplir las normas, mi madre ha estado en la calle. También nos sorprende que nos hayamos enterado de que la echaron a raíz de que empezamos a preocuparnos por no saber nada de ella”.

"Nunca ha estado tanto tiempo sin hablar con nosotros"

“El hombre que maltrataba a mi madre vivía en el barrio malagueño de Huelin, donde es muy conocido. Desconocemos si pudo dar la orden desde prisión de que le hicieran algo a mi madre. Lo que sí sabemos es que la Guardia Civil no descarta ninguna hipótesis. El hombre que está en prisión le decía que quién iba a preguntar por ella y que quién la iba a buscar. Desconocemos si ha podido contactar con alguien desde prisión, es todo muy raro. Las cámaras de este hospital podrían resolver muchas dudas, ya que podríamos saber si mi madre iba acompañada”, narraba Alba. 

Esta mujer de 56 años cuenta con un policía de seguimiento desde hace tres años. “Tras saber que había estado en el hospital de urgencias se lo pregunté al policía de seguimiento, pero me dijo que no sabía que había ido. No entiendo por qué fue a corroborar que había estado allí y no pregunto a qué fue mi madre”, explicaba la hija de Ana María. 

Ana María Ruiz ha vivido en Madrid, Palma de Mallorca y Almería, donde también fue maltratada por un hombre de origen búlgaro. En total lleva cinco  denuncias por maltrato de diferentes hombres. La hija de la desaparecida comentaba que “cuando empezamos a preguntar me dijeron que se había hecho una revalorización de riesgo sobre este hombre. Ante esto pregunté y me dijeron que estaba en prisión, sin embargo, el policía de seguimiento me dijo que no está en prisión. Al final, cuando una persona vive en la calle se une con un círculo conflictivo. Ni sus hijos ni el policía de seguimiento sabemos si había conocido a otro hombre".

“Pese a que mi madre lleva diez años malviviendo es la primera vez que pongo una denuncia por desaparición, nunca ha estado tanto tiempo sin decirnos nada. Ella vive en la calle porque no quiere normas de nadie y quiere hacer su vida. Le hemos dado soluciones pero ella siempre ha querido seguir viviendo su vida. La última transferencia que le hacen es el 11 de septiembre porque el único ingreso que tiene ella era el pago por mujer maltratada. No sabemos si había retirado el dinero del banco”; aclaraba Alba. 

“Como es una persona con adicciones y que vive en la calle piensan que para qué hacer nada, no es justo que la den por perdida. Mi madre le tenía pavor al hombre que la maltrató y me decía que estuviese quieta que era muy peligroso. Esté como esté, quiero que la encuentren, porque nadie se ha preocupado por ella y eso es muy duro. Lleva casi cuatro semanas sin dar señales de vida. La principal pregunta que nos hacemos es qué ocurrió en esos días para que mi madre vuelva a acudir a urgencias”, se preguntaba la hija de Ana María que ahora podrá estar tranquila y saber dónde ha estado su madre todo este tiempo.