Continúa el terror en Ecuador: Asesinan a un fiscal anticorrupción, oleada de detenciones y militarización de calles

Tras varias semanas de incertidumbre, caos y pánico en las calles, el Estado en Ecuador se ve amenazado una vez más por el crimen organizado. César Suárez Pilay, un reconocido fiscal ecuatoriano encargado de investigar a los grupos delictivos, fue asesinado a tiros este miércoles mientras conducía por el norte de Guayaquil. Su vehículo fue acribillado con 20 disparos y no contaba con escolta de seguridad. Suárez estaba a cargo de algunos de los casos de corrupción más importantes del país.

La semana pasada, una pandilla de 13 personas armadas asaltó el canal de televisión pública, TC Televisión, mientras estaba en plena emisión y durante el estado de excepción que regía el país. Tal y como informó elcierredigital.com, los periodistas y espectadores de todo Ecuador presenciaron cómo estos hombres encapuchados apuntaban a los trabajadores del canal en la ciudad de Guayaquil, manteniendo la emisión en directo.

Durante el asalto, un joven sostenía una escopeta Winchester en el cuello de José Luis Calderón, el presentador principal del programa, quien suplicaba a la policía que se retirara y obedeciera las órdenes de los delincuentes. Finalmente las autoridades pudieron acceder al local y detener a los asaltantes.

Al mismo tiempo, a pocos kilómetros de distancia, la Universidad de Guayaquil vivía otro escenario terrorífico generado también por miembros del crimen organizado. Estos hechos llevaron al gobierno de Daniel Noboa a declarar un "conflicto armado interno", produciéndose una militarización casi completa del país.

César Suárez Pilay, fiscal acribillado en Guayaquil.

Suárez Pilay era el responsable de investigar el asalto al mencionado canal de televisión. Según las autoridades, se sospecha que ‘los Tiguerones’, una banda importante detrás de gran parte de las extorsiones en Guayaquil, la ciudad más poblada del país y que ha sido afectada por la violencia en los últimos tres años, estuvieron involucrados en el incidente. En sus inicios, ‘los Tiguerones’ eran un grupo formado por ex guardias de prisiones que se convirtieron en delincuentes, pero actualmente cuentan con miles de miembros y su expansión se ha dejado notar en las zonas más calientes de Guayaquil. 

Imagen del secuestro del canal TC Televisión en Guayaquil por parte de miembros del crimen organizado.

El fiscal Suárez formaba parte de la Unidad Nacional Especializada contra la Delincuencia Organizada y se encargaba de varios casos relacionados con la corrupción, como el de los sobreprecios en la compra de suministros médicos durante la pandemia de Covid en el hospital Teodoro Maldonado Carbo del Instituto de Seguridad Social en Guayaquil. En esta investigación, el fiscal vinculó a Daniel Salcedo, que ya había sido condenado por corrupción relacionada con hospitales y que también está involucrado en el ‘caso Metástasis’. Salcedo fue arrestado recientemente en Panamá, por lo que la Corte de Justicia solicitó su extradición. 

César Suárez también estaba a cargo de una investigación sobre un fraude de 900 millones de dólares a los fondos de pensiones de la Seguridad de la Policía, operación en la que también están involucradas personas con vínculos políticos, algunos de los cuales se encuentran prófugos y son buscados por Interpol.

Las medidas de Noboa contra la violencia en Ecuador

Durante su campaña, el recién llegado Daniel Noboa prometió la adquisición de barcos prisiones para trasladar a los líderes de las bandas que operan en los centros penitenciarios del país a una distancia de 80 millas de la costa en el Pacífico. Según sus declaraciones, ya ha identificado tres barcazas que podrían llegar a Ecuador en un plazo de siete u ocho meses. Sin embargo, a pesar de que esta medida de seguridad fue ampliamente anunciada, el presidente ahora reconoce que no es la solución definitiva para enfrentar la grave situación de violencia que atraviesa el país.

En cualquier caso, el presidente ecuatoriano no ha abandonado la idea de reformar el sistema penitenciario, pues ya ha ordenado construir dos mega cárceles de máxima seguridad, muy parecidas a las que implementó Nayib Bukele en El Salvador.

En los últimos días ha trascendido que las cárceles se edificarán en las áreas amazónicas de Pastaza y en la región costera de Santa Elena. Estos lugares fueron seleccionados por la menor presencia de grupos narcoterroristas, según declaró Noboa, al tiempo que afirmaba que las cárceles contarán con diferentes áreas y un adecuado aislamiento de los prisioneros.

El presidente de Ecuador, Daniel Noboa.

Se confirmó que las cárceles estarán ubicadas a unos 20 o 30 minutos en vehículo de las zonas pobladas, distancia que permite asegurar el abastecimiento. Noboa también mencionó que en los próximos días se celebrará una ceremonia en Pastaza para colocar la primera piedra de la primera cárcel.

Y es que en los últimos años las cárceles han sido escenario de masacres entre los reclusos que luchan por el control de los centros de reclusión. Según las autoridades, estas disputas se han trasladado al territorio y están relacionadas con el narcotráfico y el crimen transnacional. De ahí la importancia que el Gobierno de Noboa otorga a los centros penitenciarios y a su seguridad, aunque esta lucha por eliminar el poderío del narco en las cárceles lleva siendo una tarea pendiente de numerosos gobiernos del país.

Liberación de una cárcel en Ecuador por parte de las autoridades.

Aunque la situación actual parece haber sobrepasado todos los límites imaginables en Ecuador, después de haber perdido a dos candidatos presidenciales, un fiscal y un considerable número de policías, funcionarios y civiles, en las últimas horas las autoridades del país afirman haber asegurado las cárceles que se encontraban bajo fuerte control de las bandas.

Según las últimas noticias, los operativos se llevaron a cabo con una gran cantidad de armamento y se ha liberado a más de 150 personas que eran retenidas como rehenes dentro de las cárceles, incluyendo guardias y personal de administración. 

Durante estas operaciones, al menos un funcionario perdió la vida, aunque se ha logrado evitar un derramamiento excesivo de sangre. Los prisioneros fueron ubicados en los patios en filas y sentados, con las manos en la nuca, en imágenes que recuerdan, de nuevo, a las protagonizadas por el presidente Nayib Bukele en El Salvador para mostrar la derrota de las pandillas.