La caída de los 'salvadores' extranjeros del fútbol español: Lim, Yansheng y Ronaldo
Los mandatarios del Valencia, Espanyol y Real Valladolid, respectivamente, tienen a sus clubes en una situación crítica
Ronaldo Nazário, Peter Lim y Chen Yansheng son los máximos responsables de tres equipos históricos del fútbol español, que atraviesen su peor momento. Real Valladolid, Valencia y Espanyol son los tres últimos clasificados de LaLiga. Sus tres propietarios extranjeros llegaron como 'salvadores' y ahora son considerados 'enemigos públicos' en Valladolid, Valencia y Barcelona.
El Valencia ocupa la cuarta plaza en la clasificación historia del fútbol español, 90 temporadas en la élite. El Espanyol es el quinto club con más campañas en Primera División, 88. El Real Valldolid aparece en la décimotercera plaza de dicha clasificación histórica. Los tres están en descenso a día de hoy.
Del 'Benvingut Peter', al 'Lim out'
El magnate singapurense llegó a la ciudad del Turia hace una década, en octubre de 2014. Peter Lim fue recibido en Valencia como el 'salvador' del club, uno de los nueve campeones de liga. Mantenerse en competiciones europeas, terminar el Nou Mestalla en 2019 o adquirir las parcelas del actual Mestalla fueron las promesas de Lim a su llegada.
Peter Lim desembolsó unos 94 millones de euros para hacerse con el 70% de las acciones del club por aquel entonces. Una operación con infinidad de cláusulas y préstamos que arrastraba el Valencia a raíz de la construcción del nuevo estadio. Actualmente, Lim posee el 92% de las acciones.
MESTALLA DA LA BIENVENIDA A PETER LIM CON UN ESPECTACULAR TIFO
Todo se remonta a 2009, cuando se realizó una ampliación de capital de 92 millones de euros con el objetivo de afrontar la deuda que pesaba sobre el club. La incapacidad para devolver ese dinero llevó a la Fundación Valencia, controlada por la Generalitat, y a Bankia a controlar el club. En 2013, el conjunto deportivo se pone en venta.
La propuesta de Peter Lim fue la elegida de entre siete ofertas. Amadeo Salvo, presidente del club, y Aurelio Martínez, presidente de la Fundación, fueron los encargados de liderar la operación de venta. Lim asumía los 88 millones del préstamo realizado por Bankia y desembolsaba otros cuatro por los intereses generados.
Meriton Holdings, la empresa de Lim, formalizó su desembarco en Valencia con el apoyo de 17 de los 22 patrones de la Fundación. Sin olvidar la dimisión de tres miembros a lo largo del proceso. Además de los votos en contra del Ayuntamiento y de la Diputación de Valencia.
"Viene a invertir, es uno de los sueños de su vida y uno cuando consigue un sueño no lo destroza. Viene a que el Valencia sea cada vez más grande", explicó Amadeo Salvo en su día. Bien, pues exceptuando la Copa del Rey de 2019, el Valencia ha pasado de jugar Champions de manera regular a luchar por mantener la categoría.
El club anunciaba hace un par de semanas "un balance positivo por primera vez en los últimos seis ejercicios". El balance de las cuentas de 2023-2024 reflejan un resultado positivo de dos millones antes de impuestos y un beneficio neto de 168.000 euros. Una cifra que contrasta con la deuda de más de 300 millones que tiene el Valencia, según datos del pasado mes de junio.
En el mismo comunicado se informaba de una nueva línea de crédito por valor de 121 millones de euros. Una operación para reducir deuda histórica y cancelar préstamos con Caixabank, Rights and Media y Gedesco. También libera la hipoteca de Mestalla.
Adicionalmente, el club ha obtenido 65 millones en financiación puente a corto plazo, con Goldman Sachs. Una segunda mitad vinculada al proyecto del Nou Mestalla, que sigue pendiente de diversos permisos.
El "Lim go home" ya es un lema en el valencianismo. El último episodio de represión del magnate data del pasado mes de octubre, cuando unos aficionados fueron detenidos en Singapur. La crispación social y el rendimiento deportivo explican la criticada gestión de Peter Lim al frente del Valencia, que ya baraja la venta del club.
El Espanyol, el juguete roto de Chen Yansheng
Este histórico del fútbol español pasaba a propiedad extranjera a principios de 2016. Rastar Group llegó en enero de ese año a cambio de 17,76 millones por el 56% de las acciones. Además, anunciaron su compromiso de seguir comprando acciones minoritarias hasta llegar al 99,35% actual.
Daniel Sánchez Llibre y Ramón Condal, empresarios que controlaban el club, vieron una oportunidad de venta ante la deuda de 57 millones que ahogaba al conjunto perico. Chen Yansheng invirtió 50 millones de euros, que sirvieron para inaugurar el actual estadio.
"Quiero ver al Espanyol en la Champions en menos de tres años", anunciaba el CEO de Rastar a su llegada a la ciudad Condal. Otra promesa vacía, a pesar de que en la temporada 2018-2019 el Espanyol llegó a los dieciseisavos de final de la Europa League. Misma campaña en la que se consumó el descenso.
Una pérdida de categoría que se producía tras 26 años en Primera División. No sería el único descenso. Antes de la llegada de Chen, el Espanyol solo había militado tres veces en segunda. Con Chen al frente y en el último lustro se han producido dos descensos más.
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La inversión del mandatario chino de 137 millones se estancó tras la pandemia y desde 2022 Chen Yansheng no ha vuelto a Barcelona. La desvinculación con el club parece clara, a pesar del ascenso logrado la campaña pasada. Una fiesta perica sobre el terreno de juego en la que “directiva dimisión” y “chino vete ya” fueron la banda sonora.
Las deudas, la amenaza de otro descenso y la falta de inversión en las últimas temporadas han hecho que la afición estalle contra la directiva. Pese al interés de posibles compradores, Mao Ye, consejero delegado del club, ha reconocido que “en el futuro puede pasar de todo, pero ahora no”. Y ha destacado que “Chen Yansheng es la persona que más inversión económica ha hecho en la historia de RCD Espanyol”.
Caída a los infiernos del Real Valladolid de Ronaldo Nazário
El Real Valladolid se encuentra sumido en una grave crisis que va del terreno de juego a los despachos. "En cinco años, lo normal es que peleemos por un puesto en Champions League. Ahora mismo asusta, pero por qué no pensar en grande", eran sus palabras en 2018.
La caída a los infiernos se confirmó en la noche del 30 de noviembre. Paulo Pezzolano fue destituido como entrenador ese mismo día.
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La situación no para de agravarse y parece que a su propietario, Ronaldo, no le importa demasiado. El 23 de noviembre el astro brasileño jugaba al tenis mientras el Real Valladolid perdía contra el Getafe.
Esto terminó por colmar el enfado de los aficionados, que durante el encuentro contra el Atleti se ‘manifestaron’ en el estadio. Mostraron una pancarta que ponía “Ronaldo go home” y se pusieron a jugar al tenis.
El presidente brasileño tiene una hoja de ruta a seguir y el Real Valladolid parece que no está incluido. Uno de los motivos de la venta puede estar ligado a las elecciones a la presidencia de la Confederación de Fútbol de Brasil de 2026. Para entonces, no podrá poseer ningún club.
Ronaldo Nazário ya se deshizo del Cruzeiro, club brasileño que poseía, el pasado mes de mayo. Una operación por la que desembolsó 78 millones de dólares en 2021, vendiéndolo ahora por 117 millones. El Real Valladolid podría ser el siguiente.
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