Prisa 'renueva' a su equipo financiero para poder afrontar su regreso a la televisión
La deuda del grupo, superior a los 750 millones de euros, no invita a lanzar un nuevo canal en abierto
El Grupo Prisa ha estudiado en 2024 su regreso al mundo televisivo del que salió con la venta de Cuatro a Mediaset. El editor de la Cadena SER y El País tiene dos posibilidades. Podría alquilar una señal para lanzar una señal con alta carga política, tipo Trece. O conseguirla a través de un concurso público impulsado por el Gobierno de Pedro Sánchez. Cabe recordar que el socialista es el único presidente español que no ha repartido licencias televisivas desde Leopoldo Calvo-Sotelo.
La principal barrera para su vuelta es la alta inversión que supone la industria televisiva. Y las dificultades que existen para amortizarla en un contexto dominado en el ámbito publicitario por dos grupos (Atresmedia y Mediaset España).
Fuentes televisivas explican que el proyecto estaría impulsado por José Miguel Contreras y tendría una alta carga de contenido político y una línea editorial favorable al Gobierno.
Deuda
Prisa no está para grandes inversiones teniendo en cuenta que su deuda supera los 750 millones de euros. Y que su pérdidas, pese a reducirse, han sumado 24,4 millones de euros en el primer semestre de 2024.
La compañía presidida por Joseph Oughourlian ha acometido cambios en su equipo financiero con el nombramiento de Jorge Bujía como director general de Operaciones y Financiero de Santillana. Javier Ruiz ha sido nombrado director de Control de gestión y Riesgos de Prisa (en sustitución del propio Bujía). Y Mariola Riaño ha asumido la dirección del área de Relación con inversores.
El grupo también ha incorporado a Jesús Torres como máximo responsable de la nueva Dirección Corporativa de Personas y Talento.
Carlos Núñez saca pecho por los números en el ámbito digital
Prisa está dividida en 2 áreas (Santillana y Prisa Media) y al frente de la segunda se encuentra Carlos Núñez, que hace unos días en el Club Siglo XXI explicó que su división se divide en "el negocio de la radio, donde tenemos cadenas de radio líderes en los países en los que operamos —España, Colombia, Chile y México—. Y el negocio de la prensa, con el diario El País como buque insignia; As, como uno de los diarios deportivos de referencia; Cinco Días, que trabaja de la mano de El País; y la edición del Huffington Post en España".
El CEO asegura que Prisa se ha convertido los principales operadores de audio digital en el mundo: "El año pasado desarrollamos más de 2.000 episodios de podcasts y más de 51 millones de descargas al mes de media. Además, tenemos 180 millones de inicios de vídeo mensuales, mientras que hemos producido más de 800 horas de directo audiovisual en nuestras plataformas digitales. Tenemos escala y datos. Y en el ámbito digital solo se puede sobrevivir con escala y datos. Además, hay mercados donde crecer. En España el liderazgo es indiscutible y en América tenemos una posición dominante".
Sobre las fake news el directivo aseguró que pretenden "seguir haciendo lo que hacemos: más contenido de calidad para acceder a un mayor número de gente. El gran problema es cómo acotas a los distribuidores de información en que se han convertido las redes sociales y los buscadores en internet, que son realmente medios. ¿Quién es el responsable de lo que se publica ahí?".
Núñez asegura que "el derecho a la información está centrado en la información veraz. Necesitamos potenciar que los medios con buena praxis periodística sean más potentes, definirlos como agentes que contribuyen a la sostenibilidad del sistema democrático. Las compañías tendrían incentivos para invertir en esos medios frente a las redes —que no hacen eso— y comprometen el 50% del mercado publicitario. Eso nos permitiría tener más periodistas para hacer más contenidos y sería una segunda iniciativa para reforzar este esquema".
Explica el CEO de Prisa Media que esta revolución "tiene que ser algo que haga la propia industria. No puede venir alguien diciendo tú sí y tú no. Tiene que ser la propia industria la que nos autorregulemos en un entorno muy complejo y sobre un tema que no solo afecta a España, sino a todo el mundo".
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