Logo El Cierre Digital
Edificio de una tienda IKEA con un gran letrero amarillo sobre fondo azul y un cielo despejado.
INVESTIGACIÓN

IKEA quiere lavar su imagen: Aportará al fondo de ayuda a presos políticos en Alemania

Se ha descubierto que los detenidos por la Stasi realizaron en los años 70 trabajos forzosos para la multinacional IKEA

Ingvar Kamprad fundó la empresa Ingvar Kamprad Elmtaryd Agunnaryd (IKEA) en 1943 a la edad de 17 años, vendiendo artículos como bolígrafos y carteras. Con el paso de los años la multinacional de origen sueco ha creado todo un emporio que ha alcanzado gran relevancia mundial.

Pese a sus éxitos, en 2012 la empresa se convirtió en foco de investigaciones. Fue la propia multinacional la que encargó una investigación al existir indicios de que se habían empleado presos políticos. Esta investigación trataba de abordar si se utilizaron trabajos forzados en la República Democrática Alemana hasta la caída del Muro de Berlín. 

La investigación fue realizada por la auditoria Ernst & Young en mayo de 2012. Finalmente, en noviembre de 2012 se concluyó que la Stasi forzó a prisioneros políticos de la Alemania comunista a trabajar para algunos proveedores de Ikea en 1975. 

Fachada de un edificio azul con el logotipo amarillo de IKEA.
IKEA se compromete en aportar 6 millones de euros para las víctimas de la RDA | Europa Press

También se desveló que hubo representantes de Grupo IKEA que sabían que se utilizaban presos en la producción de la antigua RDA. Tras publicarse los resultados del informe, Ikea lamentó “profundamente” lo ocurrido y pidió perdón.

También prometió compensar a las víctimas de la RDA y restaurar en cierto modo el daño causado. Ahora, ha anunciado el pago de 6 millones de euros al fondo nacional para las víctimas de los trabajos forzosos de la RDA. 

IKEA ha decidido desmarcarse de una situación que ponía su pasado en entredicho. No obstante, se considera que muchas otras compañías occidentales se beneficiaron de estos trabajos forzosos. El motivo, mano de obra barata y disciplinada que era capaz de realizar mucho trabajo en poco tiempo.

El contexto de la situación

La Unión Soviética ocupó Alemania del Este en 1949 y se mantuvo hasta 1990. Estableció un estado comunista donde la Stasi (Policía secreta de la RDA) reprimía a la oposición. Muchos de los presos que realizaron trabajos forzosos fueron encarcelados por oponerse o ser críticos con la República Democrática Alemana. 

Una gran parte de los presos políticos fueron obligados a trabajar en fábricas y muchas empresas se beneficiaron de la situación. En las investigaciones se pudo demostrar que el sofá Klippan fue fabricado por internos de la cárcel de Waldheim en 1986. Hubo varios testigos que declararon haber trabajado para empresas occidentales. 

En 2021 el gobierno alemán propuso crear un fondo de ayuda a las víctimas de la RDA. En las próximas semanas se votará su creación en el Parlamento alemán. No obstante, está prácticamente asegurado que el fondo se terminará realizando e IKEA formará parte del mismo.

La filial alemana del gigante sueco lleva años en conversación con la Unión de Asociaciones de Víctimas de la Dictadura Comunista (UOGK). Estas asociaciones fueron las que hicieron a IKEA decidirse a tratar de reparar el daño causado. 

Tras el anuncio, se pronunció el director ejecutivo de IKEA Alemania. “Lamentamos profundamente que los productos para IKEA también hayan sido producidos por presos políticos en la RDA. Desde que se supo, IKEA ha trabajado constantemente para aclarar la situación”, señaló.

“Por lo tanto, acogemos con satisfacción la implementación del fondo de ayuda y nos complace poder cumplir nuestra promesa”, concluyó.

➡️ Empresa ➡️ Internacional ➡️ Historia ➡️ Crímenes ➡️ Investigación

Más noticias: