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Una persona con uniforme naval blanco y gorra de oficial está frente a un gran velero en el mar, con el cielo azul y algunas nubes de fondo.
INVESTIGACIÓN

Dos meses del inicio de la travesía de Leonor en el 'Elcano': Desde mareos a vértigos

La Princesa Leonor ha tenido problemas en Brasil y en Uruguay y acaba de zarpar hacia el Pacífico rumbo a Chile y Perú

Este martes, 11 de marzo, se cumplieron dos meses desde que la princesa Leonor  se embarcó en el buque escuela Juan Sebastián de Elcano como parte de su formación militar. 

Sin embargo, lejos de ser una experiencia sencilla, la heredera al trono de España está viviendo una de las pruebas más duras de su preparación. Una etapa marcada por problemas de adaptación al entorno marítimo, mareos constantes y malestar generalizado.

Como ya revelamos hace una semana en exclusiva en elcierredigital.com, la princesa sufre de cinetosis. Esta afección le ha provocado episodios de náuseas, vómitos y mareos desde el inicio de la travesía

La información fue confirmada por el jefe de Relaciones Públicas de la Armada Nacional de Uruguay, Alejandro Pérez. Este afirmó a algunos periodistas, entre ellos elcierredigital.com, que Leonor "habría experimentado problemas de adaptación al entorno marítimo". Y que "ha tenido problemas con el tema del viaje, le está costando soportarlo". 

Una persona en uniforme naval realizando un saludo militar a bordo de un barco.
La princesa Leonor a bordo del Elcano. | Europapress

De hecho, señaló que “ya en Brasil se la pudo ver con moratones en los brazos. Posiblemente provocados por las náuseas y los mareos que está experimentando”. Por entonces, desde Casa Real manifestaron su desinterés en aportar información de “un tema de índole privado”.

Una semana después de la exclusiva de elcierredigital.com, algunos de los principales medios de cabecera de este país se han hecho eco de la noticia. Y confirman que Leonor sufre mareos y náuseas derivados de la cinetosis y el mal de altura. Por nuestra parte, ofreceremos documentos con información exclusiva en ‘El hilo de la Cometa’, el podcast de El Cierre Digital, presentado por Juan Luis Galiacho.

El malestar de la princesa no es un tema menor dentro de la Casa Real. Si bien es normal que los nuevos tripulantes sufran mareos en alta mar, en su caso, la persistencia de los síntomas genera preocupación. 

Un barco de vela con una bandera de España ondeando y varias personas vestidas de blanco a bordo.
El buque escuela Juan Sebastián Elcano en Montevideo. | Cedida

Fuentes cercanas a Zarzuela han indicado que, si los problemas de adaptación continúan, “se valoraría la posibilidad de que la reina Letizia la visite en alguna de las escalas previstas en Chile o Perú para acompañarla y evaluar su estado”.

Estas mismas fuentes apuntan a que "es muy probable que Leonor obtenga permiso para ausentarse temporalmente de la travesía con motivo del 18 cumpleaños de su hermana Sofía, que se celebrará el 29 de abril". Este descanso le permitiría “liberarse un poco del Elcano y recuperarse antes de continuar con su formación”.

Una estancia en Montevideo marcada por la incertidumbre

El 5 de marzo el Juan Sebastián de Elcano llegó a Montevideo, Uruguay. Allí, la princesa debía participar en el acto de jura de bandera de 45 españoles residentes en Uruguay. Desde que partieron de Brasil, los rumores sobre su estado físico llevaron a especular con que su visita a Uruguay sería de perfil bajo. Incluso se habló de que no participaría en actos oficiales.

Un grupo de cadetes navales en uniforme blanco, uno de ellos sosteniendo una bandera de España.
Leonor en la ceremonia de jura de bandera en Montevideo. | Montaje propio

Sin embargo,  en un gesto de resistencia y compromiso con su formación, Leonor hizo de tripas corazón y presidió el evento. A igual que lo hizo su padre, el rey Felipe VI, en 1989 en la misma ciudad. Su presencia, aunque discreta, dejó claro que, a pesar de las dificultades, está dispuesta a cumplir con sus deberes como heredera.

Ataviada con el uniforme de gala de la Armada, la princesa Leonor mostró sus condecoraciones. Entre ellas la banda, la placa de la Orden de Carlos III, el Toisón de Oro y la Gran Cruz al Mérito Militar.

Durante la jura de bandera, la heredera al trono participó en la ceremonia oficial celebrada en la cubierta principal del buque escuela. El acto estuvo presidido por la ministra de Defensa, Margarita Robles.

El acto de jura de bandera en Montevideo fue una prueba de fuego para la princesa. Leonor, aunque afectada por el mareo, logró mantenerse firme durante la ceremonia y continuar con la agenda oficial.

Próximos destinos y la posibilidad de una visita real

Tras la escala en Uruguay, el Juan Sebastián de Elcano zarpó hacia Chile el 9 de marzo. Allí tiene dos paradas programadas: Punta Arenas del 20 al 23 de marzo y Valparaíso del 4 al 8 de abril. 

Posteriormente, la travesía seguirá en dirección a El Callao, Perú (del 18 al 22 de abril), Panamá (del 3 al 5 de mayo) y Colombia (del 9 al 14 de mayo). Luego se dirigirá a República Dominicana, Nueva York y finalmente regresará a España en julio.

El hecho de que la princesa tenga que seguir enfrentándose a condiciones adversas en mar abierto ha generado dudas. También ha reforzado la posibilidad de que la reina Letizia haga una visita a bordo durante alguna de las escalas en Chile o Perú. 

Aunque no hay confirmación oficial, la visita podría servir como un "respiro para la princesa". También ayudaría a "una evaluación más cercana de su estado físico y emocional", según fuentes cercanas a Zarzuela.

Un reto para la heredera

La formación en el Juan Sebastián Elcano es una tradición en la familia real española. Tanto el rey Felipe VI como el rey emérito Juan Carlos I realizaron esta travesía como parte de su preparación militar. La experiencia busca inculcar valores de disciplina, resistencia y trabajo en equipo, elementos esenciales para un futuro jefe de Estado.

Una joven con uniforme naval sonríe mientras una persona mayor la observa en segundo plano.
La princesa Leonor junto al rey Felipe VI. | Europapress

Sin embargo, la adaptación de Leonor está siendo más complicada de lo esperado. La persistencia de sus síntomas podría comprometer su capacidad para completar el viaje en condiciones óptimas. 

Aunque es posible que con el tiempo su cuerpo se habitúe al movimiento del barco, las señales hasta ahora han sido preocupantes.

El debate sobre si debería continuar o no con la travesía sigue abierto. Mientras tanto, su evolución a bordo del Juan Sebastián Elcano sigue generando interés tanto en España como en el extranjero.

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