Montaje propio Este es el módulo de Estremera donde conviven los presuntos corruptos policiales
Entre los mandos que se encuentran en Estremera están el exjefe de la UDEF Sánchez Gil o el coronel García Santaella
En los últimos años los escándalos delictivos también han afectado a los propios miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Muchos de los involucrados en estos hechos criminales que han ingresado en prisión lo han hecho en el centro penitenciario de Estremera.
El 8 de noviembre ingresó el jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional en Madrid, Óscar Sánchez Gil. El coronel de la Guardia Civil Francisco García Santaella ingresó en Estremera el pasado 3 de diciembre.
El 14 de diciembre entraron un Guardia Civil y dos policías. Los tres fueron condenados a siete años y medio de prisión, así como al pago de una multa conjunta de 45 millones de euros. Estos agentes fueron condenados por la Audiencia Provincial de Sevilla por estar involucrados en el tráfico de 367 kilogramos de cocaína procedente de Colombia.
En septiembre llegó a esta prisión el espía del CNI que fue detenido por filtrar datos confidenciales a Estados Unidos. También estuvo en Estremera el agente Roberto Flórez, que fue condenado a nueve años de prisión por vender documentos a Rusia.
Así funciona el módulo que todos comparten
El centro penitenciario de Estremera es el más moderno de Madrid y cuenta con instalaciones de calidad para los internos. Hay más de 1.000 celdas de unos once metros cuadrados, en las que hay baños con ducha.
Concretamente, los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que están en esta prisión se encuentran en el mismo módulo. Se trata del módulo especial FIES 4. De hecho, en el último mes ha habido varios ingresos.
El FIES 4 lo forman miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Fuerzas Armadas o funcionarios de prisiones. Este módulo cuenta con capacidad para unas 50 personas.
El Fichero de Internos de Especial Seguimiento es un instrumento aplicado con regularidad desde 1996. Se trata de una base de datos que almacena información sobre determinadas personas para garantizar su seguridad y prevenir incidentes.
Fuentes penitenciarias señalan a elcierredigital.com que “es un módulo para evitar contacto con el resto de población reclusa. Se tiene un régimen de vida ordinario. Son módulos tranquilos donde no hay problemas y funcionan como los módulos de respeto. Deben colaborar en la limpieza y mantenimiento del módulo”, añaden las fuentes penitenciarias”.
“Módulos de estas características hay pocos en España. Estremera, Albocasser y Morón son centros donde existen estos módulos”, añaden las fuentes.
“Realizan vida normal. Bajan de las celdas para desayunar sobre las 9.00 horas y realizan actividades varias. Comen sobre las 13.00 horas y suben a la celda. A las 16.30 bajan de nuevo para realizar actividades y a las 19.30 horas cenan”, concluyen las fuentes.
Óscar Sánchez Gil y Francisco García Santaella
El exjefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional en Madrid, Óscar Sánchez Gil, ingresó en esta prisión el 8 de noviembre. Lo hizo después de que se encontraran unos 20 millones de euros emparedados en su vivienda.
Sánchez Gil estaría presuntamente vinculado con una organización del narcotráfico. Está acusado de tráfico de drogas, de organización criminal, omisión del deber de perseguir delitos y de lavado de dinero.
Poco más de un mes después, ingresó en esta prisión el coronel de la Guardia Civil Francisco García Santaella. El coronel está cumpliendo una condena de siete años y dos meses de prisión por tráfico de drogas y cohecho.
Las investigaciones comenzaron en 2014 y Santaella fue cesado en 2015, cuando se desveló que estaba siendo investigado. No obstante, las sospechas se remontan a la década de los años 90.
Paradójicamente, disfrutó de su residencia oficial hasta 2017 e iba a ser ascendido a general. La vinculación de Santaella con la trama se descubrió en una conversación entre dos narcos. En ella hablaban de ‘el padre’ y cuando fueron detenidos revelaron que se referían a Santaella.
El coronel fue jefe de la Policía Judicial e Información. La sentencia concluyó que colaboró en la introducción de hachís en la costa de Granada entre 2005 y 2006. Por su participación recibió 360.000 euros.
Otros miembros policiales en el módulo de Estremera
También permanece en Estremera el jefe de la Guardia Civil en el Puerto de Valencia, Jesús Fernández Bolaño. Este individuo fue detenido junto a tres albaneses y se les atribuía los delitos de organización criminal, tráfico de drogas y blanqueo de capitales entre otros. Concretamente, esta organización introdujo una tonelada de cocaína por el puerto valenciano.
Estremera fue el hogar del exagente del CNI Roberto Flórez, que fue condenado por espiar para Rusia. Desde septiembre otro espía del CNI que filtró datos confidenciales a Estados Unidos permanece en la prisión de Estremera.
El 14 de diciembre un guardia civil y dos policías ingresaron en el centro penitenciario de Madrid VII. Estos individuos fueron condenados a siete años y medio de prisión, así como a una multa conjunta de 45 millones de euros. Según la sentencia ratificada por el TSJA formaban parte de una organización que introdujo 367 kilogramos de cocaína.
En 2021 cuatro policías nacionales de Mérida ingresaron en este centro penitenciario. Estaban involucrados en la Operación antidroga ‘Minuro-Peces’. Supuestamente, pertenecían a un entramado criminal asentado en Badajoz.
Se les imputaron delitos contra la salud pública, pertenencia a organización criminal y omisión del deber de perseguir delitos.
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