
Qué hay tras Victoria Martín Serrano, 'la otra' mujer en la sombra de Martín Berrocal
La exmodelo onubense conoció al empresario taurino en los 70 y sabía que tenía a su mujer Marisa del Molino en Madrid
La reciente emisión del documental "Las Berrocal" y las intervenciones mediáticas de Vicky Martín Berrocal han intensificado el debate público en torno a la figura de su padre, el empresario taurino José Luis Martín Berrocal, y su compleja vida familiar.
En ese contexto, las diferencias entre Vicky y Marisa Martín del Molino, hija del matrimonio legal de José Luis en Madrid, han cobrado protagonismo. Marisa ha expresado su malestar ante lo que considera una exposición parcial y sentimental de la historia familiar. "Estoy dolida. No tendrían que salir hablando personas que no conocieron ni siquiera a mis abuelos", declaró a medios del corazón. Vicky, por su parte, ha afirmado que simplemente está compartiendo su verdad. "La sangre no siempre garantiza cariño", expresó en una entrevista reciente.
Las tensiones se han agravado desde el estreno del docu-reality, donde Vicky expone su vivencia como hija nacida de una relación paralela. Marisa ha rechazado participar en homenajes conjuntos y ha señalado que no acepta que se construya un relato a costa de lo que ella considera la familia legítima. La madre de Vicky, Victoria Martín Serrano, ha evitado pronunciarse directamente sobre este conflicto. Su decisión de mantenerse al margen no ha evitado, sin embargo, que su historia personal haya quedado en el centro de la atención mediática.

Victoria Martín Serrano nació en Huelva en 1947 en el seno de una familia modesta. Desde muy joven destacó por su porte y elegancia. A los 18 años fue coronada Miss Huelva, un título que le permitió acceder al circuito de la moda local.
Participó en pasarelas provinciales, posó para fotógrafos comerciales y comenzó a trabajar en unos conocidos almacenes del centro de la ciudad. Era una figura conocida en la Huelva de los años 60. Fue allí, en su lugar de trabajo, donde conoció a José Luis Martín Berrocal en los 70. El empresario estaba afincado en la provincia por sus negocios ganaderos y taurinos.
El inicio de una relación desigual
José Luis Martín Berrocal era veinte años mayor que Victoria. Él ya tenía una relación en Madrid, aunque inicialmente ocultó esa información. Victoria descubrió la verdad en una cena, cuando una conocida le advirtió de la existencia de otra mujer y una hija.
En 1981, en una entrevista con Pilar Eyre publicada en Lecturas, Victoria confesó: "Desde un principio supe que tenía otra mujer en Madrid y que nunca se casaría con ninguna de las dos". Y añadió: "Aun así, me sentía con los mismos derechos que la otra". De igual manera, contó en el pódcast de su hija Vicky cómo recibía llamadas de Marisa del Molino (mujer de Martín Berrocal). Con diversas insinuaciones, Victoria deja ver que se sentía la 'principal' de Martín Berrocal.
Pese a un distanciamiento inicial, retomaron la relación bajo un acuerdo tácito: él no dejaría a su familia legal y ella no le exigiría matrimonio. Aceptó vivir en un segundo plano durante más de tres décadas. Asumió un rol que la sociedad del momento denominaba "amante", aunque ella lo consideraba una relación estable y legítima a su manera. Durante años compartieron viajes, tiempo en Huelva y decisiones cotidianas, pero siempre fuera del marco formal del matrimonio.
Maternidad en la sombra
En 1973 Victoria quedó embarazada de su primera hija, Vicky. Ocultó su embarazo a sus padres y dio a luz sola en Sevilla, en el hospital Virgen del Rocío. Fue asistida por una prima, mientras José Luis permanecía en Madrid. El empresario conoció a su hija una semana después.
Nueve años más tarde, en 1982, nació su segunda hija, Rocío. José Luis continuó residiendo oficialmente con su familia legal en la capital, aunque mantenía frecuentes desplazamientos a Huelva.

La figura paterna de José Luis fue intermitente en la vida de sus hijas. Vicky contó que descubrió la existencia de sus hermanos madrileños en su juventud, cuando vio a un chico parecido a ella en una discoteca. Al enfrentarse a su padre, este le confesó: "No tienes uno, tienes tres hermanos". No hubo vínculos estrechos entre los hermanos de ambas familias.
Empresaria y madre en solitario
Además de criar a sus hijas casi sin apoyo, Victoria gestionó una boutique de moda en Huelva durante varios años. Su conocimiento del sector textil y su gusto personal le permitieron desarrollar una pequeña actividad empresarial. Regentó tiendas de ropa femenina en la ciudad, una ocupación que combinaba con la educación de sus hijas y su discreta vida personal. Nunca aspiró a la visibilidad pública y evitó los focos mediáticos incluso cuando su hija mayor comenzó a ganar notoriedad.
En 1994, tras años de doble vida, José Luis se trasladó definitivamente a vivir con Victoria en Huelva. A pesar de ello, nunca formalizaron su relación mediante matrimonio. Él nunca se divorció legalmente. La convivencia duró hasta su muerte, en 2008. Victoria no volvió a tener pareja desde entonces y conserva una escultura de José Luis en el patio de su casa en El Rocío. La saluda cada mañana como un gesto íntimo de continuidad emocional.
Reaparición pública y documental
Durante décadas, Victoria evitó hablar públicamente sobre su historia. La situación cambió en 2023 cuando accedió a participar en el pódcast "A solas con Vicky". El episodio marcó un antes y un después en la imagen pública de la familia. Su participación fue directa y sin artificios. Relató los momentos más duros, las decisiones que tomó y los sacrificios para mantener la relación con José Luis en sus propios términos.
El éxito del pódcast derivó en la producción del documental "Las Berrocal", emitido por Movistar Plus+. En este aparecen Victoria, sus hijas y su nieta Alba. Se narra la convivencia diaria de tres generaciones y se revelan anécdotas familiares. Como el viaje a Colombia en los años 80 donde José Luis y Victoria fueron invitados por Pablo Escobar a su hacienda Nápoles. Según Vicky, fue la única vez que vio a su padre intimidado.
En una aparición en el programa "El Hormiguero", Victoria sorprendió al revelar que tenía una hermana secreta, fruto de una relación extramatrimonial de su padre. Ni siquiera sus hijas conocían ese dato. Este episodio reabrió viejas preguntas sobre los vínculos familiares, los silencios y las lealtades heredadas.
La aparición pública de Victoria también ha provocado tensiones con la familia de Madrid. Marisa Martín del Molino, hija del matrimonio legal de José Luis, criticó abiertamente la exposición mediática. "Yo no doy un minuto de gloria a la querida", declaró. Acusó a Victoria y a Vicky de reescribir la historia familiar con fines mediáticos. Vicky, en cambio, ha sostenido que solo cuenta su versión de los hechos y que no busca dañar a nadie.
Una vida en los márgenes del relato oficial
Con 78 años, Victoria Martín Serrano ha ofrecido una perspectiva que había sido ignorada. Durante décadas ocupó un lugar secundario en la narrativa pública, pero su testimonio ha permitido reconstruir aspectos de la biografía de José Luis Martín Berrocal. Más allá del conflicto entre familias, su voz aporta contexto a una historia marcada por los acuerdos privados, los vínculos no reconocidos y el papel de mujeres que, como ella, vivieron al margen de las estructuras tradicionales.
En un momento de exposición mediática y tensiones entre generaciones, el relato de Victoria ayuda a completar la historia de una figura como Martín Berrocal. Y, sobre todo, invita a reflexionar sobre cuántas otras Victorias han existido en silencio en la historia reciente de España.
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