'Las claves del siglo XXI', el programa que rompe la paz y abre la guerra en RTVE

RTVE parece no ser capaz de salir del naufragio que está viviendo en los últimos tiempos. La cadena pública acumula ya más de cuatro años de constantes pérdidas de audiencia sin que nadie sea capaz de mejorar los alarmantes índices.

Según denuncian en varios medios, todo parece comenzar con el nombramiento a dedo de Rosa María Mateo, que la llevó a ser conocida como “la peor y más polémica” dirigente de la historia de RTVE, según fuentes internas.

Con la llegada de José Manuel Pérez Tornero al frente del nuevo Consejo de Administración, la esperanza volvió a aflorar en la cadena. Pero no por mucho tiempo. La gestión de Pérez Tornero también está siendo criticada por trabajadores y sindicatos. 

Elcierredigital.com ha hablado con José Carlos López Vázquez, portavoz de la Sección Sindical de USO en CRTVE, que denuncia que “en vez de emprender una profunda regeneración, Tornero se queda paralizado por el miedo a equivocarse y a las presiones y, en lugar de tomar la iniciativa y dar paso a la profesionalidad que de él se esperaba, tal vez mal asesorado por profesionales de dudoso pedigrí, rápidamente queda al descubierto su incapacidad como gestor”.

El sindicato denuncia que con su liderato "hemos caído hasta la cuarta opción de la audiencia y el desplome no ha tocado fondo". Y se preguntan, “¿cómo sin público ni apoyo de la opinión pública, pueden considerarse un auténtico y necesario servicio público?”.

Desde el sindicato critican que Pérez Tornero, "fruto de ese miedo y paralización, se ha entregado a la negación y a mirar hacia otro lado en una clara política de testarudez". Algo que dicen, "muestra en la carta en la que defiende públicamente su obstinación de mantener en el prime time del viernes noche el programa Las claves del Siglo XXI, pese a su estrepitoso fracaso de audiencia”.

Las claves del Siglo XXI

Las claves del Siglo XXI no obtiene los mejores resultados en la cadena pública. El formato dirigido por Javier Ruiz cerró su primera temporada con una cuota de pantalla media de 5 puntos de share y tras 13 capítulos, no se ha llegado ni a acercarse a la "baja media" de la cadena pública.

Sin embargo, las cosas han empeorado para la segunda temporada que dio comienzo el 29 de abril. El hecho de apostar por un formato informativo para la noche del viernes y la dureza de la competencia siguen lastrando los números de un programa que ha estado cuestionado desde el primer día de su emisión.

Por su parte, Pérez Tornero no deja de defender este formato. El presidente de la Corporación lleva insistiendo varias semanas en que el programa necesita “tiempo para afianzarse” y mantiene que es un formato que aspira a obtener la mayor audiencia posible. Además, alega que "la evolución del formato ha sido ascendente y correcta".

Las claves del siglo XXI presentado por Javier Ruiz.

Desde el sindicato USO denuncian que “según el diccionario de la RAE, ‘ascendente’ es ir a más, sumar, crecer, subir, mejorar, aumentar... Pero el programa que dirige a precio de oro Javier Ruiz cerró los 13 episodios de su primera temporada con una cuota de pantalla de 5 puntos de share de media. Muy lejos de la ya raquítica media de RTVE. ¿Es eso ‘ascendente’?”, preguntan con ironía.

Las claves del Siglo XXI comenzó su aventura con una cuota de 5,5% (710.000 espectadores) y continuó en un progresivo descenso hasta acabar el programa 13 con un share de 4,5% (552.000 espectadores), perdiendo un total de 158.000 espectadores por programa. Además, los primeros programas de la segunda temporada han registrado datos de audiencia aún más bajos llegando hasta el 3,6 de share con 450.000 espectadores.

José Carlos López Vázquez, portavoz del sindicato, expone ante elcierredigital.com: “Es inasumible que un programa que emitimos en 'prime' rebaje el índice medio de la cadena. Es inadmisible en todos los extremos. Un día puede ser, por una cuestión puntual de que una cadena haya sacado una programación especialmente buena, pero lo que no es de recibo es que la tendencia sea constantemente a la baja. Por eso, nosotros criticamos que se defienda a este programa con este tipo de actuaciones”.

“Señor Tornero, las mentiras y la manipulación descarada tienen las patas muy cortas y difícilmente se puede consolidar la credibilidad y el respeto hacia la opinión pública si se suscriben y firman, de puño y letra, comunicados burdamente falaces. En vez de tergiversar descaradamente los datos podría haber explicado en su misiva las verdaderas razones de por qué mantiene en parrilla un programa fracasado que lastra las audiencias generales de La 1”, denuncia el sindicato en su pagina web.

Sobre lo que cree que lleva a Pérez Tornero a comportarse así, el portavoz del sindicato explica a este medio: “Racionalmente nada. Lo que está claro es que cuando se toman este tipo de decisiones o este tipo de defensa de un formato que no funciona es porque tiene que haber otras connotaciones que se nos escapan. Pero evidentemente los datos están ahí, los datos son absolutamente tozudos. Y esto en otro tipo de empresas no pasaría, ya que desde el minuto uno que estuviera por debajo de la media de la cadena sería sustituido sin ninguna duda. Aquí no se hace y la pregunta es esa precisamente, ¿por qué?”.

José Manuel Pérez Tornero.

Desde USO creen que Pérez Tornero ha hecho “una peligrosa elección. Que no es el camino apropiado y exigible para un docente de tan amplia trayectoria. Está dirigiendo sus pasos hacia la ruta que tomó Rosa María Mateo. Y mire cómo acabó”, alegan.

“USO sabe que la mentira no es la respuesta adecuada a los ciudadanos, ni a los espectadores, ni a los representantes políticos elegidos democráticamente por los españoles que, además, le eligieron a usted. Tampoco es la moneda para recompensar el esfuerzo de los trabajadores por mantener RTVE a flote. Y aún menos la forma de transmitir confianza y entrega a sus compañeros de singladura en el equipo de dirección”.

“El presidente ha dicho en diversas ocasiones que necesita 5 años para que su proyecto fructifique. Ya ha consumido 1 y lo único que hemos visto es caos acompañado de buenas palabras y promesas, muchas de ellas imposibles. Y así, ¿hasta cuándo?. Dicen que rectificar es de sabios. Y la sabiduría es, o debería ser, el principal objetivo de todo académico docente que se precie. Y aunque el barco de RTVE navega desde hace tiempo en la tormenta, hacia el caos, por la impericia de sus distintos capitanes, nunca es tarde para dar un golpe de timón e intentar evitar un naufragio que parece inevitable”, concluye la nota del Sindicato.

Un mal comienzo

José Luis Balbín, exdirector y expresentador del mítico programa de debates 'La clave', emitido en RTVE en los años 70 y 80, manifestó su enfado con la cadena pública a través de un burofax al que tuvo acceso en exclusiva elcierredigital.com. El motivo de la polémica fue que el estreno de 'Las claves del siglo XXI', según el periodista, "se aprovecha del prestigio" asociado a su programa. Balbín se había negado previamente a las peticiones de Javier Ruíz de cesión de marca.

Según sus palabras, en octubre de 2021 fuentes de TVE en representación de Javier Ruiz "se pusieron en contacto conmigo para hablarme de un programa que se empezaría a emitir en enero al que querían titular 'La clave' y que, una vez comprobado que la marca la tengo registrada, querían proponerme la cesión de la misma". José Luis Balbín se opuso entonces a la 'venta' de la marca 'La clave', que "permanecerá por siempre vinculada al mítico programa de debate", ha asegurado.

A pesar de las reiteradas negativas del periodista asturiano, los trabajadores de RTVE iniciaron la promoción del nuevo estreno con el rótulo 'Las claves del siglo XXI'. "Si queda alguna duda, no hay más que observar el rótulo promocional que aparece en pantalla: 'Las claves' y, apenas imperceptible, en el margen inferior derecho, XXI", indica en su comunicado Balbín. Esta respuesta de la cadena ha sido calificada por Balbín como una muestra de "falta de imaginación y ética profesional", pues, según él, se ha aplicado para el título "la fórmula del subterfugio".