El problema legal que tuvo Luis Miguel antes de enamorarse de Paloma Cuevas

No hay ninguna duda de que el 2020 fue uno de los años más complicados para Paloma Cuevas. Y todo después de que en el mes de junio se hiciera oficial su divorcio de Enrique Ponce y la supuesta relación extramatrimonial del torero con Ana Soria. 

Y aunque durante los meses posteriores Paloma vivió un auténtico infierno, pronto volvió a creer en el amor gracias a Luis Miguel. Sin embargo, unos años antes de enamorarse de la socialité, el ‘sol de México’ tuvo que enfrentarse a uno de los momentos más difíciles de toda su vida.

Según ha trascendido, en mayo de 2017, la actual pareja sentimental de Paloma Cuevas estuvo a punto de pisar la cárcel en California debido a una demanda en su contra.  

El problema legal que casi lleva a Luis Miguel a prisión tiene su origen en una denuncia de William Bill Brockhaus, uno de sus últimos managers. Este hombre, que trabajó con el cantante entre 2011 y 2014, le demandó por más de 2 millones de dólares por incumplimiento de contrato. 

Además, según los biógrafos del artista, dicha denuncia se basaba también en “falta de pago adicional por trabajos hechos y que no tuvieron compensación”.

Luis Miguel fue demandado por su ex manager por incumplimiento de contrato

Aunque Luis Miguel y Paloma Cuevas se conocen desde la infancia, no fue hasta después del divorcio de la empresaria cuando se enamoraron. Sin embargo, unos años antes de convertirse una de las parejas más perseguidas por la prensa, el cantante se vio envuelto en un turbulento episodio. 

En 2014, William Bill Brockhaus, uno de los últimos managers del artista, decidió interponer una demanda contra él por un supuesto incumplimiento de su contrato. Movimiento legal que casi lleva al cantante a prisión en 2017. 

El juicio comenzó en 2015 y, un año después, una corte de Nueva York dictaminó que Luis Miguel debía pagarle a su antiguo representante 1.043.000 dólares por sueldos y comisiones atrasadas. Además, se acordó que el caso se iba a trasladar a California, lugar donde residía el cantante.

A pesar de la resolución judicial, el novio de Paloma Cuevas decidió no cumplir con el fallo del juez y optó por desaparecer. Según su biografía, Brockhaus y sus abogados contrataron detectives privados para localizar al ‘sol de México’ y entregarle la notificación judicial. 

Tras una búsqueda exhaustiva, lograron encontrarle en el hotel Aria de Las Vegas. Sin embargo, Luis Miguel se negó a presentarse en las primeras tres audiencias programadas en una corte de Los Ángeles.

Debido a su negativa a comparecer, la jueza Virginia Phillips emitió una orden de arresto en su contra. La situación se tornó crítica, y la actual pareja de Paloma Cuevas se vio en la necesidad de tomar medidas urgentes para evitar la cárcel.

En estos duros momentos, Luis Miguel contó con el apoyo incondicional de sus dos grandes amigos, Miguel Alemán y Polo Martínez, quienes le asesoraron y acompañaron durante todo el proceso legal. 

El 2 de mayo de 2017, Luis Miguel se entregó a las autoridades cuando acudió a la corte para responder a la demanda civil. Cita a la que Miguel le acompañó para encargarse de gestionar todos los aspectos legales y evitar así su arresto. 

Para lograr dicho cometido, Luis Miguel tuvo que hacer frente a una fianza de un millón de dólares. Finalmente, y tras pasar alrededor de una hora en el edificio que alberga la corte, se aceleró el acuerdo extrajudicial para evitar cualquier posibilidad de regresar a prisión. 

De esta forma, el 9 de mayo de 2017, la Corte del Distrito Central de California dio por terminado el caso. Resolviendo así uno de los momentos más difíciles en la vida del cantante.