Doña Leonor sigue los pasos de Felipe VI y demuestra que será una reina perfecta

Gracias a esa cercanía, sencillez y austeridad que ha heredado de Felipe VI, no hay ninguna duda de que la princesa Leonor va a saber defender perfectamente su papel de reina. 

A pesar de los últimos escándalos que han salido a la luz sobre Juan Carlos I, la hija de los actuales reyes de España ha decidido seguir manteniendo un perfil discreto. De esta forma, la heredera al trono español ha demostrado tener un comportamiento muy similar al de su padre. 

Y un claro ejemplo de esto fue la escapada que la princesa Leonor realizó en el mes de abril a Ámsterdam junto a varios amigos. Sin embargo, lo que más ha llamado la atención ha sido la decisión que tomó en aquel momento: viajar en clase turista, al igual que el resto de sus acompañantes.

Durante su escapada a la capital de los Países Bajos, la hija de Felipe VI y la reina Letizia fue vista tomando un vuelo comercial de Iberia en clase turista. Según un testigo que habló con Monarquía Confidencial, la princesa no intentó ocultarse ni llamar la atención, comportándose como cualquier otro pasajero.

Además, y según ha confirmado dicho medio de comunicación, la princesa Leonor viajó sin la compañía de sus padres. Aunque eso sí, estuvo vigilada en todo momento por dos miembros de su equipo de seguridad.

Con su viaje a Ámsterdam, la princesa Leonor demuestra que ha heredado los valores de Felipe VI

A pesar de ser una de las figuras más relevantes a nivel mundial, la princesa Leonor quiso disfrutar de su viaje a Ámsterdam como cualquier otro joven de su edad. Y prueba de ello fueron la serie de decisiones que tomó en aquel momento. 

Tal y como ha trascendido meses después de esta escapada, la hija mayor de Felipe VI no quiso recibir ningún tipo de privilegios durante su vuelo a los Países Bajos. 

Tanto es así que, aunque las normas de seguridad de la Casa Real son muy estrictas, la princesa Leonor optó por viajar en clase turista con su grupo de amigos. Además, y lejos de esconderse del resto de pasajeros, la futura reina se relacionó sin ningún problema con ellos.

Este gesto de austeridad y naturalidad refuerza la imagen de la princesa Leonor como una futura reina cercana y consciente de su posición. Y aunque viajar en clase turista no es algo habitual en su familia, ella lo hace con normalidad, en línea con el estilo de vida de su padre.

Esta no es la primera vez que la princesa de Asturias realiza un viaje privado. Ya en abril de este mismo año, realizó otro viaje con amigos, esta vez a Nueva York, también en solitario. 

Por otra parte, estas escapadas, siempre alejadas del lujo, son una muestra de que Leonor está preparándose para ser una figura pública, pero también para ser una líder responsable y accesible.