Las elecciones europeas del 25 de mayo de 2014 supusieron la irrupción en el tablero político de Podemos, y las del próximo 9 de junio de 2024 podrían suponer su resurrección si para entonces han roto con Yolanda Díaz. 

La vicepresidenta segunda del Gobierno exigió sacrificios morados a través de Irene Montero o Pablo Echenique y los morados han firmado pacto. Eso sí, Podemos se reserva la posibilidad de marcharse al Grupo Mixto si hay guerra interna y la hipótesis de presentarse a las europeas del año que viene con la ministra de Igualdad buscando acomodo en Bruselas. 

Ocho puestos de salida

Sumar consigue con el pacto asegurarse de que Podemos pague parte de la campaña, que los morados renuncien al 23 por ciento de los ingresos si se marchan al Grupo Mixto (lo que redundará en favor del resto de fuerzas) y aumentar los escaños porque presentarse separados les penalizaría. 

Podemos, a priori, podría obtener ocho diputados: Ione Belarra (puesto número 5 de la Comunidad de Madrid), Lilith Vestrynge (puesto número 4 de Barcelona) y seis cabezas de lista (Idoia Villanueva en Navarra, Pilar Garrido en Gipuzkoa, Roberto Uriarte en Álava, Noemí Santana en Las Palmas, Javier Sánchez en la Región de Murcia y Martina Velarde en Granada). 

Reglas y enfados en Sumar

Podemos ha firmado que respetará el funcionamiento interno del grupo, las portavocías y la deliberación del voto que se imponga en Sumar, que se ha llevado temporalmente políticamente a Irene Montero, de la que Yolanda Díaz decía hace unos años que la quería "muchísimo" y que era "una de las mujeres más importantes de España".

La ministra de Igualdad ha roto su silencio para solidarizarse con Echenique ("Jefe, te quiero mucho", le ha escrito). El portavoz de Unidas Podemos, que podría ser compensado con un cargo orgánico en Podemos, dice que "esto no va de mí sino que va de los millones de compatriotas cuyas vidas aspiramos a hacer un poquito mejor. Pero, en este caso, la decisión de que yo no vaya en las listas —como en el caso del veto a Irene—, no la hemos tomado nosotros, no la ha tomado Podemos. Ha venido impuesta externamente". 

Más enfadado todavía se le vislumbra a Pablo Iglesias, que denuncia que Yolanda Díaz no es "consciente aún del error político que comete imponiendo su veto a Irene Montero". 

Irene Montero. 

Iglesias asegura que la vicepresidenta "está a tiempo de rectificar y me consta que incluso personas de su propio entorno, que en nada simpatizan con Podemos, tratan de advertirle que está comprometiendo sus propios objetivos políticos al asumirse a sí misma como ejecutora final de una violenta campaña orquestada desde los más siniestros aparatos de las derechas mediática, judicial y política". 

La visión de Yolanda Díaz, según Pablo Iglesias

El fundador de Podemos cree que "Yolanda está imponiendo su visión sin contemplaciones, confiada quizá en los apoyos mediáticos. Se equivoca al hacerlo. Para ganar el poder en la izquierda no hacía falta golpear así a una figura crucial de la izquierda y del feminismo, que ha demostrado algo poco frecuente en política y necesario para la izquierda: valentía". 

Más sintonía se evidencia entre el PCE y Sumar. Y es que la formación marxista dice que este proyecto liderado por Díaz "debe ser capaz de articular una amplia base social e impulsar su movilización, en especial en los barrios populares donde el abstencionismo político tiene mayor peso, única garantía de victoria en las próximas elecciones". 

El PCE cree que "lo debe de hacer sin caer en el electoralismo y los mensajes huecos, algo a lo que nos tienen acostumbrados desde el bipartidismo, sino poniendo en valor el sentido común de las necesidades y la realidad de la mayoría social trabajadora". 

Iván Redondo apoya el pacto entre Sumar y Podemos

Iván Redondo se ha expresado favorable al pacto: "No sé si era la mejor, la menos mala o la única jugada. Pero si te dicen que es la única, tienes que despedir a los que te lo dicen. La política es ingenio y todo es posible. Lo veremos, las cifras están ahí". 

El ex jefe de Gabinete de Pedro Sánchez cree que los vetos "le dan a la derecha un argumento, que es echarle a Irene Montero a la cara. Sumar no puede ser 'vetar', tiene que ser Sumar, y ya veremos si 'multiplicar'". 

Redondo se pregunta: "¿Alguien piensa que se integra a Unidas Podemos? ¿De verdad se integra sin Irene Montero, sin el apoyo de Pablo Iglesias, sin el apoyo de Pablo Echenique? Es un error no haber integrado a Irene Montero si quería ir en listas, porque es algo que desconozco". 

Matrimonio orgánico de conveniencia

Fuentes de Podemos explican que su acuerdo de Sumar es un "matrimonio orgánico de conveniencia" y creen que incluso en la próxima campaña electoral se vislumbrarán las dos visiones tan distintas que Belarra y Díaz tienen a la hora de afrontar el próximo ciclo electoral. 

Sumar apostará por una dialéctica positivista, más cercana a la de Más Madrid o Compromís, mientras que Podemos mantiene su confianza en una retórica contra el establishment, en general, y frente a los mass media, en particular.

Los morados, a medio plazo, podrían intentar articular la marca 'Juntas sí se puede' que un miembro de su partido registró hace unos días ante el Ministerio del Interior.