La Policía Nacional continúa la búsqueda de la sevillana María Ester Estepa Pérez, de 42 años de edad, que lleva desaparecida desde el pasado 23 de agosto en la provincia de Alicante. En conversación con elcierredigital.com María Josefa Pérez, madre de María Ester, ha confesado que "le siguen enviando mensajes, llamando a su teléfono móvil e incluso enviando correos electrónicos por si ella decide ponerse en contacto con ellos".

Desde SOSDesaparecidos han activado la alerta por la desaparición de María Ester, que mide 1,58 m, tiene el pelo y ojos castaños y es de complexión delgada. 

Cronología de los hechos

La familia de María Ester Estepa Pérez dejó de tener noticias el pasado 23 de agosto. Tal y como revela María Josefa Pérez, su madre, en conversación con elcierredigital.com, "comenzamos a preocuparnos cuando dejó de contestarme a los mensajes. Tenemos una relación muy estrecha y solemos hablar todos los días, por lo que nos parecía raro no recibir respuestas a los mensajes y llamadas".

Desde hace diez años, María Ester ha estado fuera de casa pero siempre localizable y, es más, ella quería regresar a Sevilla porque "estaba harta de que no le salieran las cosas bien". "En 2022, desde Sevilla se marchó a Alicante y, posteriormente, a Elche, donde residió durante tres años. Luego viajó hasta el municipio de Santa Pola y fue allí cuando comenzó una relación con un hombre. Todo comenzó al alquilarle una habitación, pero empezaron los problemas porque la maltrataba", revela a elcierredigital.com su madre. 

Cartel de SOSDesaparecidos con la imagen de Maria Ester. 

Desde Santa Pola regresó a Sevilla, provincia donde residen sus padres, y tras pasar allí una temporada decidió volver a Alicante. "Desde septiembre hasta enero mi hija ingresa en un centro de acogida para mujeres en situación de maltrato en el pueblo de Mutxamel. En febrero abandona el centro y empieza a vivir en un piso compartido en la calle Moncada, número 20, de Alicante. Yo no me enteré hasta tiempo después de que estaba muy mal", afirma Maria Josefa.

"Fue el día 23 de agosto cuando recibo unos mensajes muy rarísimos de ella y, sinceramente, pienso que es alguien que se ha hecho pasar por mi hija. Yo llamaba y saltaba el buzón, el teléfono estaba apagado. Era muy raro. Me comentaba que se iba a Argentina o que estaba en Barcelona. No son cosas propias de mi hija", afirma Maria Josefa. 

"Es una persona muy familiar"

Fue este pasado verano, concretamente en julio, cuando María Josefa mantiene una de sus últimas conversaciones con su hija. "Desde finales de julio, una expareja de mi hija le ofreció viajar a Tarragona donde podía residir durante un tiempo. Fue allí donde se quedó hasta finales de aquel mes y una de las últimas cosas que me dijo por teléfono antes de desaparecer fue que iba a dejar a sus dos perritos con una de las chicas con las que había coincidido en el centro de acogida de Mutxamel", revela María Josefa. 

El pasado mes de agosto el rastro de María Ester se pierde y es en ese momento cuando su familia decide interponer la denuncia por desaparición en la comisaría de la Policía Nacional del distrito de Nervión, en la provincia de Sevilla. "Actualmente el caso de mi hija lo lleva el grupo de homicidios de Sevilla y Alicante", sostiene María Josefa. 

"Desde ese día no sabemos nada de mi hija. La Policía Nacional lo único que nos ha dicho es que a primeros de septiembre ha estado en un albergue de Gandía pidiendo comida y también que estuvo en un centro de salud porque le dolía mucho la pierna y le habían recetado paracetamol", revela Maria Josefa.

"No sabemos donde está ni qué ha podido pasar. Estamos muy preocupados, sobre todo por su expareja, que es una persona muy conflictiva y ha tenido problemas con otras exparejas. Tanto mis hijos como nosotros y mis nietas nos estamos movilizando por las redes sociales y otras ciudades de España para encontrarla. Mi hija es una persona muy familiar y que desaparezca de la noche a la mañana es muy extraño", confiesa María Josefa en conversación con elcierredigital.com.