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Un hombre con una camiseta negra y una toalla rosa es escoltado por dos oficiales de policía en un muelle.
SUCESOS

Las versiones de Daniel Sancho sobre el crimen varían; la primera es clave

José Ruz señala que el chef compró productos para deshacerse del cuerpo antes de que llegara la víctima al hotel.

El chef madrileño Daniel Sancho se encuentra en el ecuador proceso judicial en el tribunal provincial de la isla de Koh Samui por el presunto asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta. Era este 25 de abril cuando iba a tener lugar la declaración del presunto asesino así como testigos del acusado su padre, el actor Rodolfo Sancho, y dos policías de inmigración de  Koh Phanghan, la isla asiática en la que tuvo lugar el supuesto crimen el pasado 2 de agosto. 

No obstante, el juzgado de Tailandia ha suspendido la declaración del hijo de la gestora de patrimonios Silvia Bronchalo por fallos en el aire acondicionado de la sala. Y se reanudará el próximo martes 30 de abril.

La defensa del hijo de Rodolfo Sancho trata de demostrar que cometió un "homicidio imprudente" para que la pena sea de diez años de prisión con pronto traslado a las cárceles españolas, mientras que la acusación busca demostrar que se trató de un "asesinato agravado con premeditación" que supondría la pena de muerte o cadena perpetua.

La clave del crimen se encuentra en el hecho de que se pueda demostrar la premeditación o el hecho de que fue un accidente. Elcierredigital.com ha contactado con el experto en true crimes y creador de contenido del canal de Youtube Triun Arts, José Ruz, que analiza las versiones de Daniel Sancho hasta la fecha.

José Ruz señala que “los hechos que evidencian una posible premeditación son su primera declaración, donde admite que compró los productos para asesinar y descuartizar.  Es clave que comprara los productos antes de que llegara Edwin, que alquilara el hotel también antes de la llegada del cirujano y donde solo metió los productos que compró en Tailandia y por último, que denunciara la desaparición omitiendo que alquiló un bungalow en Bougain el día 1 de agosto,  alegando que se alojaba en Panviman Resort y que el día 3 alquiló el bungalow en el Bougain. Con esto último buscaba ocultar el fin por el que había alquilado el hotel. Todo apunta a la premeditación”. 

Un hombre con cabello largo y una camiseta negra está de pie frente a un edificio con una inscripción en un idioma extranjero.
Montaje del Tribunal Provincial de Koh Samui y Daniel Sancho. | El Cierre Digital

El hecho de que el juicio se esté celebrando a puerta cerrada ha generado gran hermetismo de cara a los medios. Sin embargo, este 24 de abril ha tenido lugar la declaración del abogado de la familia Arrieta en España, Juan Gonzalo Ospina. La defensa de Arrieta se ha centrado en "el dolor" y "la realidad económica" de la familia del cirujano colombiano.  La acusación reclama a Sancho una indemnización de 760.000 euros, aunque ha afirmado que estaría satisfecha con una sanción de 410.000 euros.

Los movimientos de Daniel Sancho en Koh Phangan

El creador de contenido reconstruye los pasos de Sancho antes y después del crimen. “Cuando Daniel Sancho llega a Koh Phangan, lo primero que hace, aparte de alquilar la moto, es registrarse en el Panviman Resort, que es el hotel que había pagado y reservado Edwin Arrieta. El propio Arrieta mandó un mail a este hotel diciendo que se iba a alojar Daniel Sancho allí desde el día 31 de julio porque él llegaba el día 2 de agosto. Sancho hizo el check in y dejó todas sus pertenencias en el Panviman”, relata.

El día 1 agosto Daniel Sancho reservó vía online un bungalow en Bougain Villas, que está a unos 45 minutos en vehículo en el lado opuesto de la isla. Al mediodía de ese 1 de agosto llegó al Bougains Villas y cuando tenía las llaves del bungalow se fue al Big C y compró uno de los cuchillos, los estropajos, las bolsas de basura y los productos de limpieza. Posteriormente llevó los productos al bungalow del Bougain. Ruz considera que “si pensaba quedarse en ese hotel lo lógico es que hubiese llevado sus cosas, pero no lo hizo. En la noche del 1 al 2 de agosto volvió al Panviman para dormir allí”.

Cuando se levantó  el día 2 cogió la moto y volvió al Bougain Villa. Sobre las 12.00 horas del mediodía se fue a comprar la sierra, un cuchillo y una tabla, y todo eso lo lleva al Bougain Villa antes de que llegase Edwin Arrieta. De allí se fue a buscar a Edwin al muelle. Tras recogerle pararon a comer y posteriormente llevó a Edwin al Bougain Villa. “La cuestión es, para qué llevas a Edwin al Bougain si allí no hay nada más que los cuchillos, la sierra y demás productos que había comprado”, indica José Ruz.

Una piscina infinita con vista al mar rodeada de palmeras y vegetación tropical, con una terraza que incluye tumbonas verdes y una sombrilla, junto a una estructura de estilo rústico con arcos y escalones de piedra.
Panviman Resort. | El Cierre Digital

Ruz explica que “lo más normal es que hubiese llevado a Edwin a la habitación que el cirujano colombiano había alquilado. Una vez en el bungalow, pasó lo que pasó. A partir de las 23.00 horas Daniel hizo una primera salida con unas bolsas de basura y alquiló un kayak con una señal de 1.000 euros para cuatro o cinco días. La habitación del Bougain la alquiló hasta el día 6 de agosto. Posteriormente realizó las incursiones con el kayak para repartir los restos y fue a los contenedores a dejar más restos”.

Posteriormente se levantó el día 3 a las seis de la mañana e hizo otra incursión para seguir tirando restos. Tras esto cogió la moto para dirigirse al Panviman, pero de camino paró a desayunar en un restaurante cercano. “Allí publicó una foto muy interesante, ya que mostraba un cartel en el que ponía “un coco al día mantiene alejado al doctor”, algo bastante  frívolo porque estaba repartiendo los restos de Edwin. En este restaurante se olvidó la bolsa con el cuchillo y las vendas, algo lógico en el contexto en el que estaba”, observa Ruz.

Vista aérea de un conjunto de casas modernas con techos grises, piscinas privadas y rodeadas de vegetación tropical.
Bougain Villas. | El Cierre Digital

El 3 de agosto fue al Panviman porque acababa la reserva que había hecho Edwin. Tras entregar las llaves cogió sus pertenencias y preguntó a la recepcionista si Edwin se había registrado. Acto seguido volvió al Bugain Villas. José Ruz considera que “todo esto muestra que la premeditación es más que probable. Si quería cortar con él podía haberle llevado al Panviman y dejar la relación allí y si quería darle una sorpresa no compró los productos más útiles para ello”.

“A esto hay que sumarle que en su primera declaración al hablar de los cuchillos dijo que los había comprado para el asesinato de Edwin. También dijo que había comprado los productos para hacer desaparecer el cuerpo. Si los productos eran para grabar vídeos porque compró los productos antes de recoger a Edwin en vez de cuando se fue Edwin. Además, qué necesidad hay de alquilar una habitación el día 1 cuando no vas a dormir hasta el día 3 de agosto. Si no lo tenía premeditado algo pensó hacer cuando estaba en Tailandia”, concluye el creador de contenido.

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