Esta es la historia real detrás de 'As Bestas':El inaudito crimen en Santoalla
El filme 'As Bestas' se basa en el asesinato de Martin Verfondern por su vecino en enero de 2010 en esta aldea orensana
Este 19 de enero se cumplen quince años del crimen en Santoalla, una pequeña aldea ubicada en Orense (Galicia). El holandés de origen alemán, Martin Verfondern, vivía junto a su esposa Margo Pool en esta aldea que solo tenía dos casas.
El día de los hechos fue asesinado por uno de los hijos del otro matrimonio. Juan Carlos disparó con una escopeta a Martin, que se encontraba en su vehículo. Julio, hermano de Juan Carlos, le ayudó a ocultar el cadáver y Martin Verfondern permaneció desaparecido durante cuatro años.
Finalmente, los dos hermanos se sentaron en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Ourense en junio de 2018. Juan Carlos Rodríguez fue condenado a diez años de prisión tras ser considerado culpable de los delitos de homicidio y tenencia ilícita de armas.
Su hermano Julio fue declarado culpable de ser cómplice. Pero la ley le eximió de cumplir la pena por encubrimiento por parentesco con el homicida.
Los hechos acontecidos sirvieron de inspiración para una película española, que para muchos es una de las mejores del siglo XXI. También dieron lugar a la creación de un documental que narra los hechos reales. As Bestas se estrenó en el año 2022 y estuvo dirigida por Rodrigo Sorogoyen, una de las figuras más reconocidas del cine español.
Se trata de una película hispanofrancesa protagonizada por Rodrigo Sorogoyen y protagonizada por Denis Ménochet, Marina Foïs, Luis Zahera y Diego Anido. La creación audiovisual se convirtió en una obra de arte admirada por muchos cinéfilos.
En cuanto a premios ganó el Goya a mejor película, dirección, guion original y sonido de 2022. Así como los Goyas a mejor actor para Denis Ménochet, mejor actor de reparto para Luis Zahera, mejor montaje, mejor música original y mejor fotografía.
También obtuvo varias medallas en la 78ª edición de las Medallas del Círculo de Escritores Cinematográficos. E hizo lo propio en los Premios César y la 67ª edición de las Medallas de los Premios Sant Jordi. También fue la mejor película del año en el 35º Festival Internacional de Tokyo 2022.
El contexto previo a la muerte
Todo se remonta al año 1997. Ese año Martin Verfondern y su mujer Margo Pool se mudaron a una de las dos casas que tenía la aldea gallega de Santoalla. Querían estar cerca de la naturaleza, vivir alejados del bullicio de la metrópolis y emprender un negocio agrícola.
En la aldea vivía la familia de los Rodríguez, que estaba formada por un matrimonio y sus dos hijos. Manuel, Jovita y sus dos hijos, Juan Carlos y Julio Rodríguez gozaban de todos los derechos del monte comunal. Era un pinar de 500 hectáreas con recursos madereros con los que podía hacer negocios.
En un primer momento esta familia acogió de buena manera a Martin y Margo. Sin embargo, el matrimonio extranjero se dio cuenta de que podía disfrutar de los derechos de los montes.
La familia de los Rodríguez sentía que esos montes eran suyos y la propuesta de los ‘foráneos’ les indignó. En 2008 la familia se negó a incluirles en el monte comunal. Sin embargo, Martin decidió recurrir la decisión por vía judicial y en diciembre de 2009 obtuvieron este derecho por sentencia firme.
Desde entonces, comenzó el infierno de Martin y Margo. Tuvieron que aguantar amenazas y la familia les envenenó las cosechas. La situación complicada entre ambas familias empeoró a raíz de una oferta de una compañía energética. Martin se negó a vender o la familia Rodríguez se enfadó mucho con él.
A Martin no le quedó más que comprarse una cámara para grabar lo que estaba viviendo. Con estas grabaciones acudió a las autoridades, pero no obtuvo la atención apropiada. Al ver que la situación no cambiaba Martin contrató un seguro de vida y aseguraba que temía por su vida. Poco después, el 19 de enero de 2010, desapareció sin dejar rastro mientras su mujer estaba de viaje.
Hechos ocurridos en el crimen de Santoalla
Según la sentencia, el día de los hechos Juan Carlos se encontró a Martin mientras iba en su Chevrolet Blazer. En ese momento decidió dispararle con una escopeta causándole la muerte en el acto.
Tras esto, llegó su hermano Julio, quien puso el cuerpo del holandés en el asiento trasero y se puso a conducir el vehículo. Lo llevó a un paraje forestal, donde escondió el coche, movió el cuerpo y le prendió fuego.
Santoalla, un pueblo olvidado
Tuvieron que pasar cuatro años desde la desaparición para que un helicóptero de la Guardia Civil localizase el vehículo de Martin. Tras varios detalles, los investigadores dieron con que Juan Carlos fue el homicida y su hermano Julio quien ocultó el cuerpo.
Hoy día Margo Pool sigue viviendo en Santoalla, siendo la única vecina de la aldea. La mujer improvisó una tumba para su marido, cuyos restos descansan en la aldea orensana que les vio llegar a España.
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