Concluye el juicio por el caso Cuzcurrita: Esto es lo que prevé realizar la acusación
El jurado ha considerado culpables por unanimidad a los 2 acusados del caso Cuzcurrita y se podría aplicar la permanente
El juicio por el caso Cuzcurrita concluyó el 19 de noviembre. Carlos SR y Antonio DG estaban acusados del asesinato, en mayo de 2023, de Guillermo Castro en Cuzcurrita (La Rioja). Así como del delito de robo con violencia.
El caso Cuzcurrita tuvo lugar en la vivienda de Guillermo Castillo, de 78 años. Los dos acusados acudieron a casa de la víctima para “pedirle dinero”, aunque según la defensa de la hija de la víctima “fue para robarle”. Una vez en casa de Guillermo, los dos acusados le propinaron una fuerte paliza que le causó la muerte y efectuaron el robo.
La Fiscalía solicitaba una pena de 27 años de prisión para ambos acusados. Por su parte la acusación particular, representada por el letrado Marcos García Montes, pedía prisión permanente revisable para los dos acusados.
Finalmente, según ha podido saber elcierredigital.com, el jurado ha considerado a los acusados culpables por unanimidad. Y han aceptado el supuesto previsto en el artículo 140.1.1ª del Código Penal.
Este artículo establece que se puede aplicar cuando la víctima es una persona especialmente vulnerable por razón de su edad, enfermedad o discapacidad. Por eso, Montes sostiene que “se aplicará la prisión permanente revisable”.
Ahora queda por conocer cuál será la sentencia del juez de la Audiencia Provincial de Logroño. No obstante, parece que el caso Cuzcurrita no se quedará aquí. Elcierredigital.com ha contactado con Marcos García Montes para conocer el futuro del caso.
Montes señala que “a expensas de conocer la sentencia, tenemos previsto solicitar la apertura de un nuevo procedimiento. Sería contra terceros que habrían participado en los hechos, no obstante, queda conocer el veredicto para formalizar esta solicitud”.
Para la defensa, “los dos autores de la muerte y asesinato de Guillermo elaboraron un plan a modo de coartada”. Sostiene que “se ideó el crimen, se buscó la hora y el lugar”. Además, tras los hechos acudieron a casa de una persona —que era quien vendía drogas a los acusados—, se lavaron y se desprendieron de las prendas que llevaban.
“Parece que la Fiscalía y el juzgado no quieren verlo, pero hay más personas que deberían estar sentadas donde los acusados”, señala Montes.
Posible nuevo procedimiento por el caso Cuzcurrita
La defensa de la hija de la víctima solicitará una pieza separada para incriminar a otras cuatro personas, presuntamente vinculadas con el asesinato de Guillermo Castillo.
En las conclusiones, Montes exponía que había “quedado acreditada la posible participación, de forma perfecta o imperfecta, de terceras personas. El día en que se dicte sentencia firme se presentará la oportuna querella”.
La primera de estas personas es Carlos G, que era propietario del narcopiso al que acudieron los acusados tras los hechos. La acusación le considera “coautor necesario o encubridor” del asesinato de Guillermo.
Hay que subrayar que antes de los hechos los acusados del caso Cuzcurrita estuvieron en casa de Carlos G consumiendo drogas. Además, según la defensa de uno de los acusados, Carlos G vio a Antonio DG “lleno de sangre y este se lavó y se cambió de ropa en su casa”. Y es que los dos acusados acudieron a casa de Carlos G tras cometer los hechos.
En este ‘nuevo’ procedimiento se acusará a Carlos G de falsedad y de coautor necesario o encubridor del asesinato. También se solicitará la deducción de testimonio de María AG, hermana del acusado Antonio DG, y María IC, pareja del acusado Carlos SR. A ambas se buscará inculparlas de falsedad de juicio y encubrimiento.
En el juicio María IC afirmó que “había sido presionada para modificar su declaración”. Concretamente, señaló que habían sido miembros del clan Altimasveres, entre ellos, Luis GD, tío de Carlos G y amigo del acusado Antonio DG.
Montes acusará a Luis GD de un supuesto delito contra la administración de justicia. Asimismo, acusará a Carlos SR de un delito contra la seguridad vial, al conducir el vehículo de su pareja sin carnet y bajo los efectos de las drogas.
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