Logo El Cierre Digital
Un edificio de apartamentos con letreros de "Se Alquila" en los balcones.
SALUD

La cara 'B' de la Ley de Vivienda: El bucle de la 'inquiocupación' y los altos precios

Analizamos cómo afecta a particulares propietarios de viviendas alquiladas y a los inquilinos con menores ingresos

La Ley 12/2023 de 24 de mayo de Derecho a la Vivienda ha provocado un efecto contraproducente en el mercado inmobiliario en España. Este nuevo decreto no ha dejado satisfecho ni a propietarios ni a inquilinos.

Los más perjudicados son los particulares propietarios de viviendas alquiladas y los inquilinos con menores ingresos. Por tanto, los principales perjudicados de la Ley de Vivienda han resultado ser los particulares.

El Partido Popular tiene una iniciativa para el cambio de esta Ley de Vivienda en la que está buscando apoyos en los partidos políticos del PNV y Junts.

Efectos negativos de la Ley de Vivienda en los propietarios

La inquiocupación y la okupación crean un temor en los propietarios que se plantean poner su vivienda en alquiler. Todo va en su contra. Para empezar, los procesos de desahucio son muy lentos pudiendo enfrentarse a plazos de más de un año.

Además, se han paralizado desahucios en casos en los que el inquilino ha sido declarado en situación de vulnerabilidad. Esto provoca una gran indefensión al propietario que, cuando decidió alquilar su vivienda, no tenía la incertidumbre de que en caso de desahucio su inquilino pudiera paralizarlo. Esto podría hacerlo si se encontrara dentro de los parámetros legalmente establecidos de declaración de vulnerabilidad.

Esto ha provocado situaciones injustas en las que cada vez más propietarios optan por dejar de alquilar sus viviendas por falta de garantías. Otros, por el contrario, lo que han hecho ha sido endurecer los criterios que solicitan para alquilar su vivienda.

En un clima de incertidumbre, se ha pasado a solicitar unas garantías desproporcionadas. Con ellas, muchas personas que quieren alquilar una casa no pueden acceder a la misma.

Efectos negativos de la Ley de Vivienda en inquilinos

Todos los inquilinos se están enfrentando a una subida de precios generalizada. Existe una pequeña parte de inquilinos con grandes ingresos y garantías de pago, sin problemas para encontrar un piso en alquiler.

Otros inquilinos han abusado de dejar de pagar el alquiler al ser conocedores de la posibilidad de paralizar los desahucios. En ocasiones, alegando motivos de vulnerabilidad no sinceros. El motivo de haber creado un mecanismo de suspensión de desahucios por situaciones de vulnerabilidad era proteger a las familias más necesitadas.

El gran problema es que de ello también se han beneficiado familias que realmente sí tienen una capacidad económica suficiente como para pagar el alquiler. Pero de manera sumergida o a nombre de otras personas.

Los grandes perjudicados son los inquilinos con menores ingresos. Lo sufren las familias que se esfuerzan por hacer frente a sus gastos, incluyendo el alquiler. No tienen ingresos elevados y por tanto tienen gran dificultad para que un propietario les alquile una vivienda.

Hay miles de familias en España que se enfrentan a la incertidumbre de no encontrar un piso en alquiler. Muchas veces, por no disponer de ingresos que supongan una garantía suficiente como para que un propietario les acepte.

El trasfondo de la situación inmobiliaria de alquiler

En España existe una gran problemática con la vivienda. Hay muchas familias que no tienen capacidad económica para acceder a su compra. Pero tampoco pueden pagar los precios de un alquiler que ha seguido subiendo desde la aprobación de la Ley de Vivienda.

De hecho, se ha limitado la actualización de renta pactada y está previsto que a final de año se apruebe un nuevo mecanismo aplicable a actualización de rentas de alquiler. Este sustituirá a la tradicional del IPC que marca el INE.

La realidad es que no existe suficiente vivienda pública social para hacer frente a las necesidades de las familias españolas. Con la Ley de Vivienda, el Gobierno ha provocado que los propietarios en España, siendo la gran mayoría particulares, asuman involuntariamente las necesidades habitacionales de familias más necesitadas.

Una pareja con un cochecito de bebé observa anuncios de propiedades en la vitrina de una inmobiliaria.
Dos personas observan los anuncios de viviendas en venta en una inmobiliaria. | Tomàs Moyà, Europa Press

Se han paralizado desahucios por motivos de vulnerabilidad del inquilino. Se trata de algo totalmente atípico, pues todo propietario tiene derecho a la tutela judicial efectiva. Cuando un Juzgado declara que tiene derecho a recuperar su vivienda y que el inquilino sea desahuciado, se paraliza el proceso.

Muchos propietarios si lo hubieran sabido, no hubieran alquilado su propiedad. Precisamente eso es lo que acaban haciendo muchos de ellos prefiriendo no alquilar su casa antes de arriesgarse a un alquiler que no le ofrece todas las garantías.

No se están tomando medidas para frenar eficazmente la inquiocupación, que prolifera con gran impunidad en España.

Todo esto ha hecho que el mercado de alquiler en vez de reforzarse, se desquebraje por completo. Se han retirado viviendas del mercado de alquiler y hacen falta más al haber cada vez más pisos vacíos. Son de dueños que prefieren no alquilarlos ante la inseguridad.

Como se suele decir: "A río revuelto, ganancia de pescadores. Los profesionales que han salido beneficiados por haber aumentado la demanda en sus sectores son los siguientes:

Ante esta situación inmobiliaria en España, las empresas de seguridad han aumentado la instalación de alarmas y sistemas de seguridad. Esto es porque los particulares sienten la necesidad de protegerse a sí mismos ante la situación de desprotección a la que se enfrentan.

También han aumentado exponencialmente la intermediación inmobiliaria de agencias De esta manera se garantiza el cobro de alquiler, pues hacen un estudio exhaustivo y riguroso de la solvencia de los posibles inquilinos.

Los propietarios también recurren cada vez más a empresas de desocupación ante la falta de eficacia del sistema judicial tradicional. También la impotencia de la Policía, que poco puede hacer en la mayoría de los casos de ocupación.

➡️ Nacional ➡️ Derecho ➡️ Bienestar ➡️ Salud

Más noticias: