Alerta en hospitales españoles: La diarrea principal causa de consulta en urgencias

En los últimos meses los ciudadanos españoles se han visto afectados por la gripe y la diarrea. Ambas afecciones están siendo protagonistas de las consultas en las urgencias de los hospitales, sorprendiendo que sus picos más altos coincidan en el tiempo.

El caso que más en cuenta hay que tener es el de la gastroenteritis aguda causada por el norovirus. 

El virus norovirus es el responsable de numerosos brotes de gastroenteritis. La infección por norovirus es altamente contagiosa y causa inflamación del tracto gastrointestinal. Produce  vómitos, náuseas, diarrea, dolor de estómago y fiebre en algunos casos.

El norovirus se propaga a través de alimentos o agua que han sido contaminados, pero también por el contacto cercano.

Actualmente, dos de cada cuatro pacientes que acuden a urgencias lo hacen por diarreas. Ante estos datos, resulta recomendable adoptar medidas preventivas y naturales para combatir estas afecciones. El propósito es no tener que recurrir a los medicamentos. 

La situación actual de las diarreas

En cuanto a estadísticas, entre un 50 y 60% de los pacientes que acuden a urgencias presentan problemas intestinales. Para conocer las causas, elcierredigital.com ha contactado con el doctor Luis Montel. 

“Lo primero que hay que destacar es que hay tres formas de presentación. Una es la diarrea pura con o sin dolor abdominal. Otra es una diarrea con vómitos, dolor abdominal y fiebre. El tercer caso reúne todo lo señalado con anterioridad, pero se le suman problemas respiratorios”, señala Montel.

Estas infecciones las presentan personas de todo tipo de edades, desde niños a personas mayores. No obstante, hay personas que acuden con problemas de este tipo y que presentan mucha deshidratación. En ese punto es cuando resulta necesario intervenir, provisionando suero al paciente. 

El doctor Montel señala que en estos casos, lo peor está “en personas mayores, crónicas y diabéticas. En ellos el grado de deshidratación es mayor y el grado para instaurar de nuevo el equilibrio digestivo es muy difícil. Por lo cual, hay que tener cuidado, porque pueden entrar en estado de shock y gravedad”. 

La incidencia de casos con afectación digestiva ha disparado los ingresos en hospitales. “Este incremento se debe al mismo motivo que el que ha provocado el aumento de la Gripe A. Los rotavirus mutan y suelen entrar por el tracto intestinal”, añade Montel.

Y es que cuando un virus afecta a nuestro sistema inmunológico hace que las defensas bajen y el riesgo de infección sea mayor. “Hay que tener especial cuidado con que las bacterias oportunistas emigren y provoquen enfermedades graves como la bronquitis”, observa Montel. 

“En estos casos, un joven de 19 años tiene altas probabilidades de caer en bronquitis. No obstante, su sistema inmunológico le permitirá reponerse antes y mejor que a una persona mayor. Por ende, resulta importante acudir a consulta si aparece sintomatología de bronquitis”, señala el doctor.

“No debemos subestimar si aparece una tos molesta o dolor en el pecho. Además, si van acompañadas de diarreas líquidas o semispastosas de color verde-marrón resulta clave acudir al hospital”, recalca Montel. 

El mejor remedio casero

Para tratar este tipo de infecciones resulta de gran ayuda seguir ciertos consejos y remedios caseros. Para la diarrea es muy efectivo el consumo de agua de arroz, útil en todas las edades.

Luis Montel explica que “el consumo de agua de arroz ayuda a regular el intestino y prevenir la deshidratación. Además, el agua de arroz ofrece múltiples beneficios para la salud. Su contenido de antioxidantes contribuye al cuidado de la piel y el cabello, y ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro”.

“El agua de arroz fortalece el sistema inmunológico, mejorando la respuesta del cuerpo a infecciones. Además, aumenta la energía y alivia los cólicos menstruales”, explica Luis Montel.

Para preparar el agua de arroz se deben colocar 3 cucharadas de arroz blanco por cada 2 tazas de agua, y cocinar durante 20 a 30 minutos. Una vez lista, se cuela el agua blanquecina y se guarda en una jarra en el refrigerador por un máximo de una semana.