El 'virus del camello': La nueva amenaza que afecta a la final del Mundial de Qatar

A un día de la final del Mundial de Qatar, que enfrentará a Argentina y Francia, les bleus se han visto amenazados por un virus que se ha infiltrado en la competición. El virus del camello, conocido como el coronavirus del síndrome respiratorio de Oriente Medio, fue detectado en Arabia Saudí en 2012 y cuenta con una tasa de mortalidad del 35% entre las personas infectadas. Este virus está causado por un coronavirus, el MERS-CoV, que hasta octubre de 2019 ya había causado más de 2.400 casos de infección en distintos países.

El 14 de diciembre Didier Deschamps anunció que son cuatro los jugadores que han enfermado a lo largo de la Competición. El primero fue Marcus Thuram en la fase de grupos, posteriormente  fue Adrien Rabiot, que permaneció aislado en su habitación de hotel y Dayot Upamecano, que también fue separado del grupo, aunque los dos ya se encuentran con el grupo.

Uno de los últimos en caer fue Kingsley Coman, que está con los mismos síntomas y no jugó contra Marruecos por ese motivo. En la tarde del 16 de diciembre Varane y Konaté también han caído enfermos. Sin embargo, ningún caso ha sido confirmado y debido a los síntomas inespecíficos se podría tratar cualquier otro cuadro infeccioso.

Jugadores de la selección francesa celebrando su pase a la final del Mundial

"Dayot Upamecano se sintió mal inmediatamente después del partido contra Inglaterra. Pasa cuando haces tanto esfuerzo, tu cuerpo se debilita y eres más propenso a contagiarte de estos virus. Estamos tomando todas las precauciones necesarias, estamos tratando de asegurarnos de que no se propague, pero los virus son, por supuesto, infecciosos, y tenemos que tomar precauciones contra ellos. Lo separamos de los demás y de Adrien también", explicó Deschamps sobre sus 'infectados'.

En ninguno de los casos posibles se ha realizado un diagnóstico para confirmar que esas infecciones son por MERS-CoV, por lo que no se puede culpar con certeza al virus del camello. Además de la cita futbolística, estos días tiene lugar el Camel Mzayen Club, donde el contacto entre los camellos importados y locales que participan en competiciones, los dueños de los camellos y los asistentes a estos eventos es inevitable, al igual que el consumo de alimentos populares en Qatar, que incluyen productos lácteos de camello.

Los orígenes y los casos de MERS-CoV

Desde que fue detectado el virus hasta el pasado mes de mayo, según la OMS se han registrado 2.587 casos y 891 muertes. Además, 27 países han notificado casos de MERS-CoV, entre los que se encuentran Francia, Italia, Reino Unido, Países Bajos y Austria. En todos los casos acontecidos los infectados tuvieron contacto directo con dromedarios al beber leche cruda de estos animales. 

Los síntomas típicos del 'virus del camello' son fiebre, tos y dificultad respiratoria. La neumonía es frecuente, pero los pacientes no siempre desarrollan esta afección, indica la OMS, que informa que también se han notificado síntomas gastrointestinales. Los expertos han recomendado a las personas que viajen a Qatar que mantengan distancia social y se alejen de los camellos y los dromedarios, ya que una de las actividades típicas en este país consiste en dar paseos sobre estos animales. Asimismo se ha recomendado no consumir productos crudos o poco cocinados de estos animales, incluidas la leche y la carne.

Propagación del MERS-CoV

Desde principios de 2022 hasta el 5 de diciembre de 2022, se han notificado seis casos de MERS-CoV en Arabia Saudí, Qatar y Omán, con un fallecimiento. Todos los casos fueron considerados primarios y todos menos uno informaron de la existencia previa de contacto con camellos. Ante los supuestos casos en el Mundial de Qatar los expertos han pedido cautela al no confirmarse como MERS ninguno de los tres casos de jugadores enfermos en la selección gala. En la actualidad no se dispone de ninguna vacuna ni de ningún tratamiento específico, aunque hay varias terapias y estrategias de inmunización específica frente al MERS-CoV en proceso de desarrollo clínico.