Cisma en el fútbol español: La afición, contra la 'exportación' de sus competiciones

En los últimos años es habitual ver cómo distintas competiciones de fútbol se trasladan a otros países por intereses económicos. En España, la Supercopa se celebra en Arabia Saudí desde el 2020, aunque en 2021 se celebró en territorio nacional por el Covid-19. A pesar de las protestas por esta decisión, el torneo se continuará jugando en el país árabe como mínimo hasta 2030. 

Los días previos a la final que disputaron París Saint Germain e Inter de Milán hubo rumores acerca de llevar esta competición fuera de Europa. Sin embargo, Glenn Micallef, Comisario de Deportes de la Unión Europea, dejó claro que esto no ocurriría. 

Emilio Abejón, presidente de FASFE (Accionistas y Socios del Fútbol Español), analiza para Elcierredigital.com la visión de los aficionados respecto a la exportación de competiciones.

La postura de la UE

Micallef declaró que la Champions League es una competición europea. Y, por este motivo, debe disputarse en territorio europeo, algo que él pensaba que estaba claro. El mercado actual del deporte ha provocado que estas situaciones sean una opción más, mientras que antes eran impensables.

Según el Comisario, el fútbol europeo tiene que permanecer en Europa. Países como Arabia Saudí y Estados Unidos están invirtiendo una gran cantidad de dinero para llevar los eventos a sus países. “Sacar partidos fuera de nuestro país, a miles de kilómetros, significa erradicarlo de su contexto social”, expone Abejón.

Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, declaró a principios de 2024 que durante su mandato nunca se celebraría una final de Champions en Arabia Saudí. Sin embargo, es posible que durante la estancia de otro dirigente en el poder esto cambie. 

Arabia ha aumentado su importancia en el mundo del fútbol en los últimos años, trayendo a un gran número de futbolistas de alto nivel. Además, será el país que organizará la Copa del Mundo de 2034. “Arabia Saudí es un régimen totalitario y su tratamiento en materia de derechos humanos es terrible.  Y que se utilice una de las cosas bonitas que tenemos, que es nuestro fútbol, para blanquear un régimen totalmente detestable, nos parece que es todavía peor. Como aficionados nos oponemos totalmente a este movimiento. Y sigue siendo nuestra postura”, declara Emilio Abejón sobre la celebración de la Supercopa de España en Arabia.

Estados Unidos también ha adquirido un papel protagonista, gracias a la llegada de Messi, Busquets o Suárez a la liga. Además, en el próximo Mundial de 2026, Estados Unidos será uno de los países organizadores junto con Canadá y México. En cuanto al fútbol de equipos, será el anfitrión del nuevo Mundial de Clubes, que se iniciará el 15 de junio.

La preocupación de Glenn Micallef de ver celebrada la final de Champions League fuera de Europa puede verse hecha realidad. La empresa UC3, conjunta entre UEFA y ECA, entró en febrero en negociaciones con la compañía Relevent Sports. 

Estas negociaciones serían por los derechos comerciales de las competiciones masculinas de la UEFA entre 2027 y 2033. Este grupo también es el socio de LaLiga para promocionar el negocio en Estados Unidos. 

El fútbol español en contra de la exportación

El presidente de la liga española, Javier Tebas, ya afirmó que se jugarían partidos de la competición en el exterior. La próxima temporada, la 25/26, podría ser en la que se inicie, según el presidente. Esta estrategia tendría un valor identificativo para Tebas, ya que tienen que diferenciarse de otras ligas para no verse superados. 

Para Emilio Abejón no es necesario llevar las competiciones al extranjero para internacionalizar la marca. “A nadie se le ocurre llevar el año que viene las procesiones de Semana Santa de Sevilla a Nueva York para internacionalizar la marca Sevilla. En el caso del fútbol es lo mismo. Si lo que se busca es internacionalizar el fútbol español, lo que se tiene que poner en valor es lo que significa el fútbol español. No son 11 futbolistas o una plantilla de futbolistas y un cuerpo técnico que juegan un deporte. Es una afición de decenas de miles de personas que le dan el sentido y el espectáculo en la grada y que sienten una unión con los futbolistas”.

Desde que la Supercopa de España se comenzó a celebrar en Arabia Saudí ha habido protestas en contra. En la primera edición, en 2020, un número de mujeres de Amnistía Internacional protestaron frente a la embajada del país árabe en Madrid. Este año, el Gobierno balear presentó una queja ante la federación y les invitó a reflexionar sobre si era adecuado celebrar allí la competición. 

La razón de la queja nace de las situaciones que tuvieron que vivir las aficionadas del Mallorca. Las seguidoras del club balear sufrieron acoso y tocamientos por parte del público saudí. “Cuando un grupo de aficionados consigue ir gastándose muchísimo dinero, resulta que no se respetan los derechos de las aficionadas. Y entendemos que ese acuerdo no es que debería todavía replantearse, sino que tendría que acabar con un contrato que nunca debería de haberse firmado”, añade el presidente de FASFE.

FASFE ha apoyado la aparición de Glenn Micallef y ha pedido a la ministra de Deportes, Pilar Alegría, que replique el comportamiento del Comisario. Esta actuación con el fin de defender que las competiciones nacionales se jueguen en España en lugar de llevarse al extranjero.

“Nosotros mismos lo propusimos en 2022 y el grupo político Compromís aceptó a presentar una enmienda que obligaba a que las competiciones españolas se jugaran en España obligatoriamente. Casi todos los diputados votaron en contra  de la obligación de que las competiciones españolas se jugaran en España y delante de sus aficiones. Los que deberían defender los intereses de los aficionados españoles prefieren que nos roben a los aficionados a cambio de estar a bien con unos cuantos dirigentes que van a ganar mucho dinero con la operación”, declara Emilio Abejón.