Giro de 180º en Alcampo tras plantear un ERE a más de 700 trabajadores

Los últimos meses no han sido fáciles para Alcampo, una de las cadenas de supermercados más conocidas del país. Con un contexto económico complicado, se ha visto obligada a replantear su estrategia y tomar decisiones difíciles. El malestar se ha hecho notar tanto entre la plantilla como en los sindicatos.

Todo empezó cuando Alcampo anunció un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectaría a 710 trabajadores y el cierre de hasta unas 25 tiendas en toda España. Sin embargo, las negociaciones han avanzado y la empresa ha dado un giro inesperado. Gracias al diálogo con los sindicatos Fetico, CCOO y UGT, se están contemplando alternativas menos agresivas.

Cambios de modelo y reducción de despidos

La dirección, perteneciente al grupo francés Auchan, ha propuesto un cambio en el modelo de negocio para garantizar la viabilidad de los comercios afectados. Plantean pasar al modelo 7/7, lo que implica mantener abiertos los establecimientos todos los días, las 24 horas. Con esta fórmula buscan evitar cierres y conservar empleos.

Además, se ha planteado que los despidos sean exclusivamente en las tiendas de Alcampo que finalmente cierren. También se contempla la posibilidad de salidas voluntarias, lo que alivia en parte la situación. A pesar de estos gestos, los sindicatos insisten en conocer cifras definitivas.

Desde Comisiones Obreras piden un análisis más profundo sobre las plantillas, ya que Alcampo considera que algunas tiendas están sobredimensionadas. También exigen que la empresa fije de forma estable el número total de despidos, que consideran elevado. Aun así, valoran positivamente que Alcampo se comprometa a no aplicar otro ERE durante al menos los próximos 12 meses.

Recolocaciones, indemnizaciones y colectivos exentos

Una de las medidas más destacadas del proceso es el plan de recolocación externa de Alcampo, que tendrá una duración de 18 meses y estará gestionado por una empresa especializada. Esta opción pretende ofrecer una nueva salida laboral a quienes se vean afectados por el despido. Asimismo, se está estudiando un plan de rentas para los trabajadores mayores de 59 años.

En cuanto a las indemnizaciones, Alcampo ha accedido a pagar 36 días por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades. Esta cifra es ligeramente inferior a la que inicialmente se propuso, que era de 38 días, pero ha sido aceptada por las centrales sindicales, según La Información Económica.

Algunos colectivos quedarán fuera de este ERE, se trata de personas con una discapacidad superior al 33%, pacientes con enfermedades graves, víctimas de violencia de género o terrorismo. Además de parejas en las que ambos estén afectados por el expediente. No obstante, las trabajadoras embarazadas o en baja por maternidad no han sido incluidas en estas excepciones, algo que los sindicatos lamentan profundamente.

Alcampo ha entregado a los sindicatos una lista con 152 tiendas que podrían experimentar cambios estructurales. De ellas, 144 son supermercados y 8, hipermercados. Las comunidades más afectadas serían Madrid, con 38 establecimientos, y Zaragoza, con 34, según 20 minutos.

Este proceso marca un antes y un después para la cadena Alcampo, que busca adaptarse a las nuevas condiciones del mercado sin destruir el tejido laboral que ha construido durante años. Aunque las diferencias persisten, el diálogo parece estar encauzando un proceso que podría haber sido mucho más doloroso.