No sospechas ni de broma esto que hace la DGT: miles de multas sin que te des cuenta

La DGT ha intensificado su control sobre las carreteras españolas, y lo hace de una manera que pocos conductores sospecharían: utilizando motos camufladas.

Estas motos, que a simple vista parecen normales, están equipadas con radares y cámaras que permiten a los agentes imponer multas sin que los conductores se percaten de su presencia. Te contamos cómo actúan estas motos y cómo puedes identificarlas para evitar sorpresas desagradables.

Las motos camufladas de la DGT: ¿qué son y cómo funcionan?

Las motos camufladas de la DGT son vehículos aparentemente comunes, pero equipados con tecnología avanzada para detectar infracciones de tráfico. Estas motos, que pueden ser de diferentes marcas y modelos, están dotadas de radares móviles y cámaras de alta resolución.

Su misión es clara: capturar conductas indebidas, como el exceso de velocidad, el uso del móvil al volante o no usar el cinturón de seguridad. Estas motos suelen circular por carreteras y autovías, y su presencia es casi imperceptible.

Esto es lo que las hace tan efectivas, ya que los conductores tienden a relajarse al no ver los tradicionales coches patrulla. Sin embargo, las motos de la DGT están siempre atentas y preparadas para registrar cualquier infracción.

¿Cómo identificar las motos camufladas de la DGT?

Identificar una moto camuflada de la DGT no es una tarea fácil, ya que su objetivo es precisamente pasar desapercibida. No obstante, hay algunas señales que pueden ayudarte a reconocerlas y evitar ser multado:

• Modelos comunes: Las motos camufladas suelen ser de marcas y modelos populares en España, como BMW, Yamaha, o Kawasaki. Sin embargo, no todas las motos de estas marcas son de la DGT, así que no te confíes solo en esto.
• Matriculación especial: Aunque no siempre es visible a simple vista, algunas de estas motos tienen matrículas que podrían parecer diferentes. Ya sea por la secuencia de letras o números. Si ves algo fuera de lo común, es mejor reducir la velocidad y actuar con precaución.

• Conductores: Los agentes de la DGT que conducen estas motos suelen vestir de civil. Pero si prestas atención, podrías notar chalecos reflectantes debajo de su ropa. Además, pueden llevar cascos con intercomunicadores, algo no tan común entre los motociclistas habituales.
• Equipamiento: Aunque es difícil de ver a simple vista, estas motos están equipadas con dispositivos electrónicos, como radares o cámaras. En algunos casos, estos equipos pueden estar disimulados, pero si observas algo inusual en la moto, como cajas o dispositivos extraños, podría ser una señal.

Así puedes evitar las multas de la DGT

La mejor manera de evitar ser multado por estas motos camufladas es cumplir siempre con las normas de tráfico. Mantén una velocidad adecuada, usa siempre el cinturón de seguridad, y evita distracciones como el uso del móvil mientras conduces. Además, si viajas por una carretera y notas una moto que podría ser sospechosa, es mejor no correr riesgos y conducir de manera prudente.