Problemas en Euskaltel: Los empleados denuncian los 'incumplimientos' de la teleco
La filial de MasOrange habrá perdido más de la mitad de su plantilla en 10 años si se producen 39 nuevas salidas
La plantilla de Euskaltel comenzó a movilizarse este miércoles en su sede de Zamudio (Vizcaya). La filial vasca de MasOrange advierte con preocupación que su matriz ha propuesto 39 salidas voluntarias.
Euskaltel cuenta con 275 trabajadores y ahora ve comprometida un 14% de su plantilla. De ejecutarse estos despidos, la teleco habría perdido más del 50% de sus empleados en la última década. La cablera vasca llegó a contar con más de 600 trabajadores.
Bajo el lema "SOS Euskaltel, no al ERE en MasOrange, ERE ez", los empleados también se movilizarán este domingo. La manifestación partirá en el Teatro Arriaga de Bilbao.
La intención de la plantilla es convocar una 'marea naranja', en relación al emblemático color corporativo que se hizo célebre gracias al equipo ciclista que la empresa patrocinó.
"Han arrasado con nosotros y vamos a desaparecer. Sólo seremos una marca. No hay causas organizativas ni de producción que lo justifiquen", dice el comité de empresa.
"Hay mucha actividad, tenemos resultados positivos. Y lo que tiene que haber es una readecuación de los puestos de trabajo", señala el presidente del comité Javier de Blanco.
Euskaltel, modelo de diversificación de negocios para Masorange
MasOrange ha emulado a Euskaltel al lanzarse a la caza de contratos de luz y gas, tal y como está haciendo Repsol. La nueva teleco cuenta con 220.000 clientes gracias a su filial tan influyente en Euskadi y Navarra.
La compañía estatal ha ofrecido este mes de agosto servicios de luz y gas en 70 tiendas y desde septiembre lo hace a toda su red comercial. Promete Masorange que "cualquier cliente que contrate el servicio de luz y gas tendrá un descuento que se aplicará en la factura de telecomunicaciones".
20 años con Euskaltel
La operadora de cable Euskaltel nació en 1995 al calor de las inversiones del Gobierno de Euskadi. Posteriormente, las tres cajas vascas (BBK, Kutza y Vital) se integraron en su accionariado. Y más adelante también lo harían empresas privadas como la cooperativa vasca Mondragón, Iberdrola y Endesa.
Euskaltel pasó a estar presidida en 1999 por el exlehendakari José Antonio Ardanza, disfrutón de una suntuosa puerta giratoria. La teleco gozó de las simpatías del 'aznarismo' al calor del pacto entre PP y PNV de 1996.
El laudo
Un laudo fallado en 2010 le obligó a pagar 220 millones de euros a su socio France Télecom (Orange). Este hecho empañó el final de Ardanza, que dejó el cargo en 2011. Y abrió la puerta a la entrada de fondos privados, Trilantic e Inverindustrial, que se hicieron con el 49,1% de las acciones por 200 millones de euros.
En 2015 Euskaltel compró las cableras del norte R (de Galicia) y Telecable (de Asturias). Y salió a Bolsa para alegría de los fondos, que triplicaron la inversión al vender sus acciones por 640 millones de euros.
Mientras tanto, los despidos se acentuaban, y las primas a directivos se disparaban. Y el PNV aducía que las donaciones de Euskaltel a la Fundación Sabino Arana estaban relacionadas con acuerdos profesionales.
Tras un fallido intento de expansión por el Estado español, allá por 2019, Euskaltel acabó digerida en MásMóvil en 2021. Y ésta, a su vez, se acaba de fusionar con Orange para crear MasOrange.
MasOrange se estrena
Telefónica ha perdido su casi centenario liderazgo en el sector de las telecomunicaciones en España mientras vive una guerra accionarial. Este conflicto ha llevado al Gobierno y Caixabank a garantizar la "españolidad" del accionariado frente a la irrupción de la saudí STC.
Digi sigue en pleno crecimiento tras aprovisionarse de fondos tras vender su red de fibra a Onivia por 750 millones de euros. Vodafone España ajusta precios tras ser adquirida por el fondo Zegona. Y, mientras tanto, ha nacido el nuevo rey del sector: MasOrange.
Esta compañía resultante de la fusión Orange y MásMóvil ha comenzado su andadura después de que las autoridades europeas relacionadas le hayan dado luz verde. La compañía está valorada en alrededor de 18.600 millones de euros. Y se ha estrenado como líder en clientes en telefonía móvil y banda ancha fija en España.
Las sinergias del pacto permitirán un impacto en favor de la compañía de 500 millones de euros a partir de 2027. La nueva MasOrange rondará los 7.000 millones de euros de ingresos. Y ha prometido inversiones por valor de 4.000 millones.
Dice MasOrange que quiere ser "la compañía líder en satisfacción del cliente, talento e impacto positivo". Y asegura que sus líneas de trabajo serán 4. Anteponer la felicidad del cliente, mantener una actitud positiva, apostar por el pragmatismo y confiar en la colaboración.
Meinrad Spenger, CEO del gigante, asegura que MasOrange "es un socio fiable para todos nuestros clientes, también las empresas y de administraciones públicas. Vamos a invertir e innovar más para ofrecer un servicio máxima calidad de manera sostenible".
La fusión, explica, la empresa, "supone la creación de un nuevo líder del sector. Un competidor clave. Y un nuevo referente del mercado que cuenta con los mejores activos para seguir creciendo en el mercado español de las telecomunicaciones".
En cifras, MasOrange se convierte en el primer operador del mercado español por número de clientes con más de 37 millones de líneas entre móvil y banda ancha. Y 2,3 millones de usuarios de televisión, con una cuota de mercado superior al 40% tanto en fijo como en móvil.
La empresa se convierte en una de las 20 mayores empresas de España por volumen de ingresos con más de 7.400 millones de euros. Tiene un resultado operativo (EBITDA) de más de 2.600 millones de euros. Y cuenta con una valoración de la nueva empresa combinada superior a 18.600 millones.
Masorange cuenta hasta la fecha con nueve marcas principales nacionales (Orange, Yoigo, Jazztel, Más Móvil, Simyo, Pepephone, Lebara, Lyca y Llamaya). Y cinco regionales (Euskaltel, R, Telecable, Guuk y Embou).
Más noticias: