Moncloa perdona más de 6 millones a una empresa vasca: El doble 'juego' de PNV y Bildu

Las movilizaciones laborales, el empuje de los sindicatos y las presiones de PNV y EH Bildu a La Moncloa han llevado al Ministerio de Economía, Comercio y Empresa que lidera Carlos Cuerpo a dar luz verde a una quita de deuda a Astilleros Balenciaga, asomada al abismo en pleno concurso de acreedores. 

Esta empresa centenaria con sede en Zumaia (Gipuzkoa) dispone de 71 trabajadores, genera otros 200 puestos indirectos y ejerce como motor laboral de la comarca de Urola Kosta.

Cofides 'perdona' más de 6 millones a Astilleros Balenciaga

La Compañía Española de Financiación el Desarrollo (Cofides), dependiente del Gobierno central, ha realizado una quita de 6,5 millones de euros a los Astilleros Balenciaga. Han pasado de deber 15 millones a tener una deuda frente al Estado de 'solo' 8,6 millones.

Esta negociación otorga vida a la empresa y alimenta las negociaciones con dos empresarios para tomar sus riendas. Hasta la fecha, la empresa vasca tenía una deuda de 37 millones de euros. 

Fuentes cercanas al Gobierno señalan que "esta no será la única maniobra de La Moncloa para salvar la industria del norte. Está previsto que la SEPI convierta la deuda que tiene contraída hacia ella la gijonesa Duro Felguera en acciones". Con lo cual, el Estado podría convertirse en su principal accionista.

Para ello, el PSOE exige un plan de viabilidad que evite que este gigante acabe convirtiéndose en un quebradero de cabeza para la esfera pública. 

Movilizaciones en Astilleros Balenciaga

La plantilla de la centenaria Astilleros Balenciaga lleva meses concentrándose para mostrar su preocupación tras la entrada de la empresa en concurso de acreedores. Sindicatos como Comisiones Obreras señalaban al Gobierno vasco y COFIDES. 

Según CCOO, ambos gobiernos torpedeaban el plan de viabilidad que aprobó el Juzgado de lo Mercantil para evitar el concurso de acreedores. "Astilleros Balenciaga tiene carga de trabajo suficiente para evitar el cierre. Solo le falta financiación. Le han encargado la construcción de dos barcos y otros dos están en proyecto. Pese a ello, está abocada al concurso de acreedores ante la decisión del Gobierno vasco y de COFIDES, empresa público-privada dependiente del Ministerio de Economía, de impugnar el plan de viabilidad que aprobó el Juzgado de lo Mercantil, tras alcanzarse en agosto un acuerdo con la mayoría de los acreedores", lamentaron. 

CCOO de Industria de Euskadi denunció la "pésima gestión de la empresa" y la "falta de apoyo de las instituciones públicas". 

El PNV apuntó a La Moncloa

El PNV no pareció darse por enterado de las quejas de la compañía hacia el Gobierno vasco y apuntan a La Moncloa. El partido nacionalista en Zumaia tildó a Astilleros Balenciaga como "una empresa emblemática que representa una tradición histórica secular para nuestro pueblo". 

"Consideramos incomprensible y denunciable la actitud adoptada por COFIDES. Esta falta de implicación es inadmisible.  Sorprende que el Ministerio de Economía sea el principal actor del proceso que se opone a la reestructuración y a la continuidad de Astilleros Balenciaga. Cuando el resto de los acreedores consideran que el Plan de la compañía ofrece una perspectiva razonable que asegura su viabilidad en el corto y medio plazo", añadieron. 

Los jeltzales también pidieron al alcalde de Zumaia, Iñaki Ostolaza (Euskal Herria Bildu), que mueva ficha para evitar el cierre. 

LAB lamentó la actitud el Gobierno vasco y la cúpula de los astilleros

El sindicato abertzale LAB, por su parte, criticó al Gobierno estatal. Pero tampoco escondió su enfado con el Gobierno vasco. "Mientras dice que ofrece todo su apoyo a la empresa, la única realidad es que ha impugnado el plan de viabilidad poniendo en riesgo también el futuro de Balenciaga", aseguran. 

"No sabemos a qué están jugando. Desde aquí pedimos su intervención activa para salvar nuestros puestos de trabajo. Nos lo deben en la medida en que son nuestros representantes", denunciaron. 

La central sindical tampoco libró de culpas a la dirección de Astilleros Balenciaga. "Su gestión desastrosa de los últimos buques nos ha llevado al concurso de acreedores (...) Sufrimos día a día para pagar la hipoteca y el colegio de nuestros hijos e hijas. Somos los principales afectados de lo que está pasando aquí. Sentimos que la dirección no ha contado con nosotros para las negociaciones y se nos ha dejado de lado", lamentan.