Habla el denunciante de 'la patada' de Íñigo Errejón: 'Su círculo también lo protegió'

El escándalo tras las denuncias por abuso contra Íñigo Errejón ha prendido la mecha en redes sociales y medios de comunicación. Pero hay un episodio que quizá se ha pasado por alto y no se ha recordado.

El juicio entre Íñigo Errejón y un vecino jubilado de Lavapiés de 67 años conocido como Alberto. Todo comenzó por una denuncia de agresión en mayo de 2021. Según el relato del denunciante, el conflicto se originó después de acercarse a Errejón en la calle y solicitar una fotografía. 

Al parecer, tras intercambiar unas palabras, el político le propinó una patada en el estómago. 

Por su parte, Errejón argumentó que, ante la insistencia y proximidad del hombre, únicamente lo apartó sin intención de agredirlo. 

Este incidente ocurrió tras el cierre de la campaña electoral autonómica en Madrid. Mientras Errejón caminaba acompañado de amigos por el barrio de Lavapiés.

El caso derivó en una serie de procedimientos judiciales debido a la dificultad de probar si hubo realmente una agresión física. A pesar de la denuncia inicial por lesiones, la jueza rebajó la acusación a un delito leve de maltrato. Ya que el informe forense no encontró evidencias concluyentes de una lesión traumática causada por un golpe. 

En este sentido, el perito indicó que no existían marcas visibles ni pruebas médicas que confirmaran un daño reciente relacionado con una patada en la zona abdominal. Esto debilitó significativamente la acusación, y finalmente el caso fue juzgado por un delito menos grave.

Elcierredigital.com ha contactado con Alberto, el vecino de Lavapiés que denunció a Íñigo Errejón por agresión. Alberto ha expresado estar “decepcionado” por cómo se trató mediática y políticamente su causa contra Errejón. A diferencia del escándalo que han generado las últimas denuncias.

Alberto señala que el incidente comenzó de manera inesperada y que su acercamiento al político fue amistoso. “Todo fue un poco sin venir a cuento. Yo me acerqué amistosamente, luego tuve un comentario desafortunado con él porque le dije que había hecho comentarios negativos en la red sobre él. Pero no esperaba que fuera a reaccionar así”. 

Según su testimonio, Errejón le propinó una patada que “pudo haber tenido graves consecuencias” dada su frágil condición médica en aquel entonces. “Me pegó una patada que, por mi cáncer de colon, si no hubiera llevado una faja, podría haber peligrado mi vida. Podría haberme roto los puntos que tenía de una operación interna que me hice poco antes”, explica.

Alberto, además, lamenta la cobertura mediática desigual entre su caso y otras recientes denuncias contra Errejón. Explica que  “no se le ha dado la misma cobertura a mi caso que a las actuales acusaciones que están saliendo sobre Errejón. Habrá que ver si son verdad, pero yo puedo decir que el día del incidente lo vi muy alterado y con la mirada perdida”. 

Según Alberto, el político “podría haber tenido la cabeza en otras cosas y reaccionó mal”. A pesar de lo sucedido, el denunciante asegura que no guarda rencor- Pero sí critica la respuesta de quienes defendieron a Errejón. “Me parece una vergüenza como todo su equipo y su círculo cercano lo defendieron y enterraron el asunto para el público y para todo el mundo”.

"Me siento defraudado por el sistema judicial"

Sobre el proceso judicial, Alberto se sintió inicialmente optimista. “Cuando mi caso se hizo público y yo hice mi declaración, salí bastante contento. De hecho, declaré en una entrevista por entonces que yo creía que los jueces me habían creído”. 

Sin embargo, al final, se sintió traicionado por el sistema judicial. “La fiscalía, que debería estar de mi parte, solicitó el cambio de juez porque lo consideraba imparcial”.

Alberto también ha expresado su frustración con ciertos sectores de la izquierda que, según él, defendieron a Errejón. mientras que ahora, debido a las acusaciones por parte de mujeres, han cambiado su postura.

“Me siento muy defraudado por el sistema judicial y por el círculo de la izquierda. Se solaparon a favor de él cuando pasó mi agresión y ahora lo repudian porque el caso lo denuncian mujeres”.

“Lo protegieron desde dentro pero ahora es indefendible”

Por otra parte, Alberto ha criticado duramente el rol de los medios en el tratamiento de su denuncia. En declaraciones recientes, asegura que algunos medios “protegieron a Errejón”, permitiéndole acceso a platós “para contar su versión sin cuestionamientos”. 

“Apenas tuvo cobertura mi caso, pero Errejón fue llevado a los programas y platós para ofrecer su versión y dejarlo todo en anécdota. No se mostró lo que realmente había sucedido, se me dejó solo y se cerraron filas a su favor”, expresa con frustración.

Alberto siente que este manejo fue parte de un esfuerzo para proteger la imagen pública de Errejón. “Es un político influyente y alguien que siempre ha defendido derechos y se ha mostrado como un abanderado de causas sociales, especialmente en defensa de los derechos de las mujeres”, explica. 

En su opinión,  esa reputación de defensor de derechos influyó en la cobertura parcial del incidente. “Nadie quiso sacarle en un contexto negativo; su círculo en la política y los medios lo cuidaron”.

Sin embargo, Alberto percibe un cambio ahora que Errejón enfrenta nuevas acusaciones. Particularmente porque, según él, “la presión esta vez viene desde dentro”. Para él, las recientes denuncias tienen mayor eco debido a que están relacionadas con mujeres, y sugiere que las expectativas en torno a Errejón son ahora diferentes.

 “Cuando pasó mi caso, me ignoraron, pero ahora que él está en este lío, los medios no tienen opción. Porque siempre se ha declarado feminista y defensor de los derechos de las mujeres”. 

Alberto concluye su encuentro con elcierredigital.com señalando que esta situación “expone la parcialidad con la que ciertos temas son tratados. Dependiendo de quién esté involucrado y de la presión social existente en cada momento”.