El clan valenciano afín a Ximo Puig toma La Moncloa con Lydia del Canto como estrella

Veinte días ha durado como secretario de Estado de Comunicación Ion Antolín, que aduce motivos de salud para hacerse a un lado. El periodista se ha visto salpicado por la filtración de información a Juan Lobato sobre el novio de Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador.

Presumiblemente regresará a dirigir la Comunicación de Ferraz, apenas tres semanas después de haber sido promocionado en sustitución de Francesc Vallès. Este último renunció al cargo por motivos personales. 

La Secretaría de Estado de Comunicación pasó ayer a manos de Lydia del Canto (Torrent, 1985). Esta periodista trabajó junto a Ximo Puig cuando este se hizo con el poder valenciano en 2015. Posteriormente regresaría al diario progresista Levante EMV (primero como subdirectora y más adelante como directora).

Tras ser cesada en 2022, Del Canto pasó a convertirse en la responsable del área social corporativa de Baleària, de Adolfo Utor. Este empresario, íntimo de Puig, se ha convertido este año en nuevo accionista de Prisa. 

Desde hace unos meses, Del Canto ejercía como la nueva dircom del PSPV por designación de la nueva líder, la ministra Diana Morant. 

¿Quién es Lydia del Canto?

Está licenciada en Periodismo y en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Valencia. Desde abril de 2024, ha desempeñado el puesto de directora del Gabinete de la Secretaría General del PSPV-PSOE. Allí asumió la estrategia de comunicación del partido.

Explica La Moncloa que su trayectoria profesional comprende la dirección del periódico Levante-EMV (2018-2022), donde anteriormente había desempeñado el puesto de subdirectora (2015-2018). Coordinó también las ediciones digitales de medios como Superdeporte, Regió 7 y Diari de Girona, y de redactora (2008 - 2014).

Entre 2014 y 2015 desempeñó el puesto de directora de Comunicación del PSPV-PSOE, gestionando relaciones con los medios y redes sociales corporativas. En 2015, tras las elecciones autonómicas, fue nombrada secretaria autonómica de Comunicación en la Generalitat Valenciana.

El clan valenciano

En los últimos tiempos Óscar Puente se ha convertido en el gran valedor del clan valenciano. El vallisoletano colocó como dircom del Ministerio de Transportes y Movilidad Urbana a Pere Rostoll. Este periodista fue jefe de Política del diario alicantino Información hasta que fue fichado como dircom por el entonces presidente autonómico socialista y actual embajador español ante la OCDE, Ximo Puig. 

El pasado mes de octubre Puente también apadrinaba el nombramiento como dircom de Adif de Salvador Almenar, que fue director general de Interior de la Generalitat Valenciana (2022-2023). Y también jefe de gabinete de la Conselleria de Justicia, Interior y Administración Pública (2020-2022) bajo la presidencia de Ximo Puig. 

Adolfo Utor, el empresario íntimo de Puig que influye en Madrid

Ni es la primera fortuna de Alicante, ni es especialmente conocido en la provincia (la ciudad alicantina de Denia es considerada a efectos sociales y políticos como Valencia). Ni asegura que haya comprado más del 5% de las acciones del Grupo Prisa para congraciarse con el nuevo titular del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente. 

La irrupción de Adolfo Utor en el editor de la Cadena SER y El País resonó este verano con gran estruendo. Sobre todo en ámbitos empresariales y mediáticos por lo exótica que se advierte la operación llevada a cabo por el propietario del gigante naviero Baleària.

Utor en 2023 obtuvo una facturación récord de 652 millones de euros. Además cosechó unas ganancias de 40 millones de euros y rompió sus marcas al transportar a más de 5 millones de pasajeros. 

El hermético millonario nació en 1961 en la ciudad marroquí de Alhucemas, ya que su padre, médico, fue destinado al antiguo protectorado español antes de ser enviado a Granada o Denia. Su trayectoria profesional comenzó en el sector marítimo hace cuatro décadas, como vendedor de tickets en la antecesora de Baleària, Flebasa. 

Tras la quiebra de Flebasa en 1990, Utor se quedó la gestión de la misma junto a otros compañeros y posteriormente se convirtió en director general de Baleària. Esta empresa acabó barriendo de las islas a la centenaria Trasmediterránea, fundada por Juan March.

Tras ser privatizada por el Gobierno de José María Aznar, Baleària acabó controlada efímeramente por la todopoderosa familia Matutes. Con ella se tuvo que entender Utor en 2005 para absorber la compañía familiar Umafisa antes de desembarazarse de ellos en 2021.

Fuentes cercanas a Utor han puntualizado que la apuesta por Prisa no tiene tintes políticos pese a que el empresario militó en el PSPV. Además fue su candidato en Denia y ejerció como hombre fuerte de Ciprià Císcar en la provincia de Alicante. 

Utor nunca ha escondido sus valores progresistas. A uno de los ferris lo bautizó con el nombre de Federico García Lorca. Y en círculos íntimos "se ha vanagloriado de haber comprado el yate que durante décadas perteneció a Juan Carlos de Borbón, el 'Fortuna'". 

Pero este año ha querido mantener un tono bajo en términos políticos para evitar suspicacias. "Es una decisión estratégica por su posición en el mercado y de confianza en el potencial crecimiento del valor", señalan las citadas fuentes. 

El presidente de Baleària intenta así acallar los rumores madrileños que deslizan que la operación habría sido bendecida por La Moncloa. Indican que a través de la participación del influyente dircom del Ministerio de Transportes y Movilidad Urbana, Pere Rostoll. 

Al tablero político-mediático estatal saltó con voz propia Utor. Es nieto de un concejal republicano de Algeciras que fue fusilado por el franquismo. También disfrutón de un patrimonio que ronda los 350 millones de euros según Forbes.

Hoy, está 'enfadado' con el Govern 'popular' de Baleares por la decisión del ente autonómico Ports IB. No ha accedido a su solicitud de operar la ruta entre Denia y Sant Antoni de Portmany este pasado verano. 

Cabe recordar que Baleària opera en Baleares y une Ceuta, Melilla y Canarias con la península ibérica. Además ofrece servicios en Marruecos, Francia y Caribe (uniendo a los Estados Unidos con las islas Bahamas). 

El sueño de Utor, tal y como ha reconocido, es hacer historia al abrir una línea que una Miami y La Habana. Ya intentó operarla hasta que la administración liderada por Donald Trump la acabó frenando.