26 de abril de 2024
|
Buscar
FIN DE SEMANA

Se trata de un primo del exalguacil de Casarrubios del Monte, su hermano Manuel dice que "es verdad la investigación y caiga quien caiga"

La Guardia Civil llama a declarar a 'El Chirla' en el caso de la desaparición de Roberto García

Exclusiva Roberto García Solana desapareció el 18 de febrero en Casarrubios del Monte
Roberto García Solana desapareció el 18 de febrero en Casarrubios del Monte
La nueva línea de investigación de la desaparición de Roberto García en Casarrubios del Monte (Toledo) se centra en su entorno familiar. La Guardia Civil ya ha llamado a declarar a varios de sus familiares. Sus hermanos, Manuel y Juan Carlos, ya han declarado y de nuevo ha sido llamado su primo lejano 'El Chirla', por haber indicado que Roberto estaba acompañado en la plaza del pueblo por 'La Rubia', en referencia a una excompañera de trabajo. La familia confía plenamente en la Guardia Civil.

El caso de la desaparición de Roberto García Solana, vecino de 64 años (63 cuando desapareció) del pueblo toledano de Casarrubios del Monte, ha dado un giro reciente, tal y como contamos en exclusiva en elcierredigital.com. La nueva línea de investigación apunta al entorno familiar, después de que fuera puesto en libertad Juan José Valle, el principal sospechoso que llevaba cuatro meses en prisión.

Según señala a elcierredigital.com Manuel García, hermano de Roberto, este cambio de rumbo en la investigación y el hecho de dirigir las sospechas hacia el entorno familiar puede deberse a un error cometido por un primo lejano que compartía una gran amistad con el desaparecido, un hombre a quién en Casarrubios del Monte le conocen por el apodo de ‘El Chirla’.

“Es otro solterón como mi hermano, iban juntos de caza y son íntimos”, comenta Manuel a este periódico y añade que “ni a mí, ni a mi mujer, ni a nuestro otro hermano Juan Carlos ni a su familia nos han vuelto a llamar a declarar”.

En un primer momento, los investigadores llamaron a declarar a los hermanos de Roberto como al resto de familiares y personas cercanas, así como otras que pudieran tener relación con la desaparición o pudieran aportar información relevante para el caso. Pero, recientemente, la Policía Judicial ha llamado de nuevo a ‘El Chirla’ a declarar por un comentario que se expandió como un rumor entre los habitantes del pueblo.

Al parecer, en una conversación con otro vecino de Casarrubios dijo que había visto a Roberto con una mujer a la que se refirió como ‘La Rubia’ en la plaza del pueblo y, a raíz de esto, se pensó que se trataba de la pareja de la otra persona detenida en un primer momento junto a Juan José Valle, y que fue fichado por ser el hombre que le custodiaba cuando sacó el dinero de los cajeros automáticos.

Pero en realidad, ‘La Rubia’ es una excompañera de Roberto que trabaja en el Ayuntamiento y a la que conoce de su época como alguacil de Casarrubios del Monte, oficio que desempeñó durante 30 años y cuya labor fue reconocida por el Consistorio cuando se jubiló, haciéndole entrega de una placa.

"Caiga quien caiga"

Manuel ha reiterado su apoyo y agradecimiento a la Policía Judicial de la Guardia Civil, así como su disposición a colaborar en el caso. De la misma manera, ha asegurado que le parece bien que las investigaciones hayan dado un giro en el caso si es para encontrar a Roberto, aunque eso suponga poner en el punto de mira a su familia. “Lo he dicho muchas veces, que en el 90 por ciento de estos casos el culpable está en el entorno familiar. Que los agentes hagan lo que tengan que hacer. Luego, que caiga quien caiga”.

roberto

Roberto García Solana desapareció el 18 de febrero

Roberto es un hombre de costumbres y metódico, por lo que sus familiares descartan que haya sido una desaparición voluntaria. "Roberto tiene perros y nunca los hubiera dejado sin comer y sin atender", asegura su hermano. Además, su coche fue encontrado mal aparcado en El Álamo, municipio donde vive Manuel y donde solía ir con frecuencia.

También era habitual que almorzara en los restaurantes del pueblo, uno de los cuales es La Encina, situado en el polígono industrial de Casarrubios del Monte. Allí iba a menudo y fue donde la dueña del local aseguró a las autoridades que investigan el caso que, días antes de su desaparición, Roberto había estado allí con unas personas que decían ser sus primos y familiares. Ni Manuel ni otros miembros de la familia más próxima al desaparecido estuvieron con él aquel día.

Este vecino de Casarrubios desapareció en la madrugada del domingo al lunes 18 de febrero de este año, después de haber estado en el bar Arrope viendo el fútbol. A partir de este momento se pierde la pista de Roberto y nadie más le ha vuelto a ver hasta el día de hoy, más de ocho meses después.

En libertad el principal sospechoso

 

El pasado 23 de mayo la Guardia Civil detuvo a Juan José Valle, albañil sevillano y vecino de enfrente de la casa de Roberto García en Casarrubios. Valle fue acusado de desaparición forzada y de un delito de estafa continuada, pero solo este segundo delito puede ser probado objetivamente hasta el momento en la instrucción judicial y policial. Existen pruebas de que efectuó cinco operaciones de retirada de efectivo con la tarjeta de Roberto, de 500 euros en cada ocasión, en total 2.500 euros, entre las cuatro y las cinco de la madrugada de diferentes días.

juan_jose_valle

Juan José Valle salió en libertad este lunes 16 de septiembre

Casualmente, Roberto había cobrado 30.000 euros por la venta de una propiedad poco antes de su desaparición. Valle siempre mantuvo la versión de que se había encontrado la tarjeta bancaria del desaparecido en el suelo, con los cuatro números de la clave de acceso pegada a la misma, pero los investigadores de la Guardia Civil no lo creyeron y detuvieron a otra persona junto a él, a la que dejaron en libertad posteriormente. También tomaron muestras de restos biológicos en casa de Juan José Valle.

Después de haber pasado cuatro meses en la prisión toledana de Ocaña, Valle fue puesto en libertad el lunes por la noche por decisión de la jueza de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Illescas (Toledo), Carolina Hidalgo, como contamos en exclusiva en elcierredigital.com. Según fuentes jurídicas consultadas, solo se le puede acusar de momento de un delito de estafa continuada y no de la desaparición y homicidio de Roberto García, algo insuficiente para mantenerlo más de cuatro meses en prisión.

En cuanto a la versión de Juan José Valle, Manuel asegura no creer la historia de cómo adquirió la tarjeta y señala que se trata de “una película que se ha montado” el que ha sido el principal sospechoso de la desaparición de su hermano.

Más batidas con la ayuda de un grupo especializado

Durante todo este tiempo, los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado han buscado al desaparecido de 64 años, peinando todo el pueblo de Casarrubios, las zonas cercanas e incluso la orilla del río Guadarrama. Se han realizado numerosas batidas en las que han participado familiares y miembros de Protección Civil con la esperanza de encontrar a Roberto.

En este sentido, Manuel comenta que van a seguir realizando batidas a nivel familiar y, además, contarán con la participación de un grupo especial formado por policías (nacionales y locales) y guardias civiles jubilados y en activo que ya está trabajando en el caso en colaboración con la Policía Judicial de la Guardia Civil.

Con la puesta en libertad del principal sospechoso de la desaparición de Roberto García, las incógnitas que rodean el caso parecen haber aumentado. La investigación sigue su curso y la familia espera obtener nuevas pistas que puedan esclarecer este misterioso suceso ocurrido en Casarrubios del Monte.

COMPARTIR: