Los errores de Carlos Torres en la opa del BBVA al Sabadell pueden ocasionar su caída al frente del banco bilbaíno

En el BBVA crecen las voces contra la hoja de ruta emprendida por Carlos Torres para tomar el Sabadell, al que el banco bilbaíno intenta asaltar a través de una opa (oferta pública de adquisición) hostil que ha provocado una reacción negativa en el campo político, desde La Moncloa hasta Junts per Catalunya pasando por ERC, Sumar o el PP de la Comunidad Valenciana.

El banquero ha tenido que admitir que una filtración al medio británico Sky News precipitó los acontecimientos en plena campaña de las elecciones catalanas, lo cual facilitó las críticas políticas en defensa de la supervivencia en solitario una entidad tan arraigada en Cataluña como el Sabadell. 

Torres denuncia filtraciones después de que elcierredigital.com informase sobre el presunto uso de información privilegiada por parte de inversores, que habrían comprado acciones del Banco Sabadell con información privilegiada.

La CNMV no se ha pronunciado sobre el 'ejército' de inversores que compraron Sabadell el pasado 25 de abril, quizá algunos de ellos con información privilegiada, y si sale la opa y teniendo la prima pagada por el BBVA, podrían ganar un 40% de su inversión en poco más de 2 semanas. 

Operaciones de compra en el Sabadell. 

Otras voces también denuncian los "errores de Torres, que tras fracasar en una opa amistosa (por la negativa del Consejo de Administración del Sabadell) ha lanzado una hostil sin siquiera subir ni un céntimo a su oferta inicial". 

La Moncloa que tiene abiertos varios frentes (Telefónica, Talgo o Naturgy) ha elevado el tono contra Carlos Torres, que podría acabar cesado si fracasa en su asalto y es imputado por el 'caso Villarejo', que es un hecho que se dirimirá en las próximas semanas cuando la Fiscalía Anticorrupción presente sus conclusiones ante el juez Manuel García Castellón. 

Evolución de la cotización del Sabadell. 

El banquero ha defendido su postura: "Esta operación es buena para España, para las comunidades autónomas y para los territorios donde tenemos presencia porque nos da más capacidad de préstamo, nos da mayor base impositiva conjunta y reiteramos el compromiso total con el tejido empresarial, científico, cultural y social de todos los territorios". 

"Esta operación permite un banco que, por su mayor escala, puede destinar mayores recursos a impulsar el crédito y lo hemos estimado en unos 5.000 millones adicionales de crédito asociadas al mayor tamaño", añade. 

Carlos Torres hace oídos sordos al revés de La Moncloa: "Confiamos plenamente que el Gobierno acabará apreciando la operación por el valor que tiene. Es una operación que crea una entidad que va a apoyar mucho más a la economía española, con una mayor capacidad de dar crédito y de apoyar a la economía, a las familias, a las empresas. También para remunerar a los accionistas, que ahí hay muchas familias, muchos ahorradores pequeños. Y una entidad que en definitiva va a pagar más impuestos. Como digo, confío en que el Gobierno la apreciará cuando tengamos ocasión de explicar bien la operación y el valor que tiene", señala. 

"La oferta es extraordinariamente atractiva. Dará lugar a una combinación de dos entidades muy potentes y sigue a la oferta que le propusimos al consejo de Banco Sabadell de una fusión la semana pasada y que fue rechazada este lunes", ha asegurado.

Sobre la opa, añade: "Hemos pensado que tenía sentido, respetando plenamente la opinión del consejo de Banco Sabadell de que era una oferta que infravalora al banco. Pero nosotros pensamos de otra manera y creemos que tiene sentido que le propongamos la oferta directamente a los accionistas de Sabadell".

La cúpula del Sabadell liderada por Josep Oliu ha salido al ataque al informar a la CNMV que la información de la opa presentada por el BBVA está incompleta (cuenta con "datos incompletos que pueden afectar al mercado", dice la entidad con sede en Alicante). 

"La referida documentación, no incorporada al anuncio, así como la información proporcionada en la reunión vulneran el artículo 32.1 del Real Decreto 1066/2007, de 27 de julio, sobre el régimen de las ofertas públicas de adquisición de valores y, en general, introducen datos incompletos que pueden afectar al mercado", añaden.

La CNMV por ahora guarda silencio.

La Moncloa rechaza la opa hostil

El Sabadell pide que se aporten más datos "en aras de que el mercado cuente con información completa y transparente y se garantice un proceso ordenado y correcto". "Desde el anuncio público de una oferta pública de adquisición y hasta la presentación de la oferta en los términos contemplados en el artículo 17, el oferente, los miembros de sus órganos de administración y dirección, sus accionistas de control, sus asesores, las personas con las que actué concertadamente y las demás que intervengan en la operación se abstendrán de difundir o publicar por cualquier medio cualquier dato o información que no conste en el anuncio previo de la oferta", dice el artículo 32 de la ley de opas.

Torres. 

La Moncloa, que se había puesto de perfil, se ha lanzado en tromba contra la opa hostil a través del ministro de Economía Carlos Cuerpo: "Rechazamos esta operación, esta opa hostil, tanto en la forma como en el fondo, por los efectos lesivos potenciales que puede tener. Está claro que la opa hostil puede tener un efecto de inestabilidad, de incertidumbre y de volatilidad en el mercado". 

Cuerpo asegura que "el incremento en términos de concentración, que puede tener unos efectos perjudiciales en la reducción de competencia y en términos de estabilidad financiera y transmisión de política monetaria" y dice que existen "elementos de cohesión territorial, de vertebración del territorio que nos hace pensar y tener en cuenta los costes en términos de actividad que esta operación podría tener".

También recuerda que "el Gobierno tiene la última palabra a la hora de autorizar la operación", señala en relación al escudo antiopas que el Gobierno aprobó con motivo del Covid-19, así como por la Ley 19/2003 sobre régimen jurídico de los movimientos de capitales y las transacciones económicas con el exterior. 

"Los siguientes pasos no nos corresponden a nosotros. Nosotros tenemos la última palabra a la hora de autorizar la operación", advierte Cuerpo. El ministro está expectante a la respuesta que den los inversores: algunos fondos emblemáticos como el norteamericano BlackRock o el noruego Norges Bank, amén de inversores como el mexicano David Fernández (que posee el 3,5% del Sabadell y podría ser uno de las claves en la viabilidad de la opa hostil tras haberse abstenido en la opa amistosa). 

El Consejo de Administración del Sabadell dijo "no" a la oferta 

El Banco Sabadell deshojó la margarita y le plantó un sonoro "no" al BBVA, que pretendía digerir a su rival a cambio de cederle el 17% de las acciones del resultante. El banco de origen catalán presidido desde hace un cuarto de siglo por Josep Oliu no solo rechazó la oferta, sino que le afeó al banco bilbaíno su 'racanería'. 

El Consejo liderado por Oliu aseguró que "la propuesta infravalora significativamente el proyecto de Banco Sabadell y sus perspectivas de crecimiento como entidad independiente". "El Consejo confía plenamente en la estrategia de crecimiento de Banco Sabadell y en sus objetivos financieros, y es de la opinión de que la estrategia de Banco Sabadell como entidad independiente generará un mayor valor para sus accionistas", añadieron.

Asimismo, lanzaron un dardo contra su pretendiente y aseguraron que "la caída significativa y la volatilidad del precio de la acción de BBVA en los últimos días genera una incertidumbre adicional sobre el valor de la propuesta" no dineraria. 

"Sobre la base del análisis en detalle de la propuesta, el Consejo ha concluido que esta no satisface el interés de Banco Sabadell y sus accionistas, y, en consecuencia, ha rechazado la propuesta de BBVA", explicaron. 

A la negativa del Sabadell ayudó que el BBVA no pusiera dinero sobre la mesa, apenas ofreciera una vicepresidencia a su cuadro directivo (lo cual implicaba arrebatar galones al presidente Josep Oliu y al CEO de Sabadell, César González-Bueno), y valorase la acción del banco con sede en Alicante en 2,1 euros (cuando los libros del Sabadell la valoran en 2,64 tras haberse cuadriplicado en 3 años en el parqué).

Cabe recordar que este pasado 25 de abril el Banco Sabadell mejoró todas sus previsiones al anunciar que obtuvo un beneficio neto atribuido de 308 millones de euros en el primer trimestre del año, lo cual supone un 50,4% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior.

El BBVA ya intentó hacerse en 2020 con el Sabadell, al que valoraba en 2.700 millones entonces. Ahora esta cantidad ha crecido hasta los 11.500 millones ya que Carlos Torres ofrecía de casi de un 30% al precio en el que se movía el Sabadell antes de conocerse la operación.