Hacienda tiene una advertencia para ti si haces esto con el IRPF: multa al canto
La Agencia Tributaria observa de cerca a los contribuyentes que buscan maneras de evadir el pago de impuestos
Hacienda ha reforzado su lucha contra el fraude fiscal, centrándose especialmente en ciertas estrategias utilizadas por contribuyentes que buscan reducir su pago del IRPF.
Aunque los impuestos en España son más altos que en países como Portugal o Andorra, muchos optan por no cambiar de residencia fiscal y buscan maneras de reducir su carga tributaria. Sin embargo, Hacienda ha identificado algunas prácticas que considera abusivas y que ahora serán castigadas con mayor severidad.
Las multas por defraudar a Hacienda
Intentar defraudar a Hacienda tiene graves consecuencias. La Ley General Tributaria recoge un amplio catálogo de sanciones para quienes intentan eludir sus responsabilidades fiscales, y estas sanciones pueden ser muy elevadas dependiendo de la gravedad del fraude.
Fraudes graves: En los casos más graves, donde el fraude es claro y premeditado, las multas pueden alcanzar hasta el 150% de la cantidad defraudada.
Defraudaciones menores de 3.000 euros: Si las cantidades no declaradas son inferiores a 3.000 euros, la multa es del 50% de lo defraudado.
Fraudes superiores a 3.000 euros: Si las cantidades defraudadas superan los 3.000 euros, la multa puede variar entre el 50% y el 100% del importe total no declarado.
Errores en la autoliquidación: Si un contribuyente comete errores en su autoliquidación sin intenciones fraudulentas, como proporcionar datos incorrectos o incompletos, la sanción es mucho menor, de aproximadamente 150 euros.
Estas sanciones muestran la importancia de cumplir con las obligaciones fiscales, ya que incluso pequeños errores pueden resultar en multas significativas.
Cómo controla Hacienda a los contribuyentes
Hacienda cuenta con varios mecanismos para supervisar las actividades económicas de los contribuyentes. El más conocido es la declaración de la renta, donde quienes superan ciertos ingresos deben declarar sus ganancias y pagar el IRPF correspondiente. Los tramos impositivos varían según los ingresos y otros factores, lo que obliga a los contribuyentes a ser transparentes en sus finanzas.
Pero la vigilancia de Hacienda no se limita a la declaración de la renta. Las entidades bancarias también están obligadas a informar a Hacienda sobre cualquier movimiento de dinero sospechoso o grandes transacciones en efectivo. Estos controles permiten a la Agencia Tributaria detectar posibles intentos de fraude o ingresos no declarados.
A pesar de estos mecanismos, algunos contribuyentes intentan buscar atajos para pagar menos impuestos. Una estrategia común es facturar ingresos a través de una empresa, algo que Hacienda ha comenzado a castigar con más rigor.
El fraude de facturar a través de una empresa
Una de las "triquiñuelas" más populares para ahorrar IRPF es facturar ingresos personales a través de una empresa.
Esta práctica consiste en que autónomos o profesionales facturan sus servicios a través de una sociedad en vez de hacerlo a nivel personal. Al tributar a través del Impuesto de Sociedades, en lugar del IRPF, se pueden beneficiar de un tipo impositivo más bajo.
El problema es que Hacienda lo ve como un abuso fiscal si la empresa no tiene actividad real o los ingresos debieron declararse como rendimientos del trabajo.
Un caso reciente involucró a un abogado que utilizaba su propia sociedad para facturar sus servicios personales. Al hacerlo, se beneficiaba de un tipo de impuesto más bajo a través del Impuesto de Sociedades.
Sin embargo, Hacienda considera que este tipo de acciones son fraudulentas si se utilizan únicamente con el fin de pagar menos impuestos personales. En consecuencia, esta práctica será ahora objeto de sanciones más severas.
Más noticias: