Logo El Cierre Digital
Tres personas posan frente a un fondo de la ciudad de Madrid iluminada al anochecer
CULTURA

Qué es de Marina Castaño: Del amor con Camilo José Cela a su retiro con Enrique Puras

En 1991 se casó por lo civil con Camilo José Cela, en 1998 por la iglesia y fue portada de la prensa rosa hasta la muerte del escritor en 2002

Marina Castaño (A Coruña. 1957), viuda de Camilo José Cela, volvió hace poco a la televisión fugazmente de manos de 'Pasapalabra'. Allí sorprendió al público con su faceta televisiva más desenfadada para luego retomar su perfil bajo. La que fuera marquesa consorte de Iria Flavia vive hoy instalada en Puerta de Hierro, uno de los barrios más exclusivos de Madrid, junto a su segundo marido, el cirujano Enrique Puras, con el que contrajo matrimonio en 2013.

A sus 68 años, lleva una vida tranquila, alejada del foco mediático, aunque no ha dejado de ser noticia por sus apariciones puntuales en televisión, sus declaraciones sobre el legado del Nobel y las disputas judiciales que mantuvo durante años con el hijo del escritor.

Dos personas conversan en una reunión social mientras sostienen copas de vino, rodeadas de otras personas y luces cálidas en el fondo
Marina Castaño y Enrique Puras. | Europapress

Fuera del foco mediático, Marina ha llevado una vida discreta en los últimos años.  Su entorno describe una existencia tranquila, serena y desahogada. Según fuentes cercanas, ahora vive "como realmente quiere vivir". Aunque se mantiene alejada de la prensa rosa, ha reaparecido en televisión en ocasiones puntuales. Participó en el programa 'El Desafío' de Antena 3, donde realizó un sorprendente reto, y también ha colaborado de forma ocasional en espacios como 'Espejo Público' y 'La hora de La 1'.

A nivel judicial y patrimonial, Marina ha enfrentado varias batallas. Fue absuelta de acusaciones por malversación en relación con la Fundación Camilo José Cela. En paralelo, perdió un largo litigio por la herencia con el hijo del escritor, Camilo José Cela Conde, quien finalmente obtuvo dos terceras partes del patrimonio, más indemnizaciones que ascendieron a millones de euros.

De chica sin estudios a marquesa y figura pública

Marina Castaño comenzó su vida con orígenes modestos en A Coruña y sin formación académica. Trabajó como periodista y locutora, sin haber cursado estudios superiores. Se casó a los 18 años con un capitán de la marina mercante y tuvo una hija, Laura. Luego se divorció y siguió su carrera en medios de comunicación como Radio Cope, Telecinco o programas radiofónicos.

En 1985, con 28 años, participó en un congreso en Santiago de Compostela donde conoció al escritor Camilo José Cela, ya un Nobel de Literatura. Su historia de amor sorprendía por la diferencia de edad: ella veinte años menor. Tras varios años de relación pública, se casaron civilmente en marzo de 1991 en la finca “El Espinar”, en Guadalajara. Más tarde, en junio de 1998, formalizaron su unión por la Iglesia, lo cual requirió la anulación previa de ambos matrimonios anteriores.

Mujer rubia con vestido negro sosteniendo una copa de cóctel verde en un evento social con varias personas al fondo
Marina Castaño. | Europapress

Ese matrimonio le otorgó a Marina el título de marquesa consorte de Iria Flavia, concedido a Cela en 1996 por el rey Juan Carlos I. Aunque fue conocida como "marquesa viuda", ese título se extinguió al contraer matrimonio con Puras en 2013.

La historia de Marina y Cela

Marina logró en muy poco tiempo, escasos meses después de conocer a Camilo José Cela, algo inaudito para el escritor gallego y Premio Nobel de Literatura: ponerle a régimen alimentario. “Conseguí que fuese a una clínica en Marbella, a Incosol… Allí estuvo veinte días”. De este modo, Cela adelgazó 31 kilos y la Costa del Sol se convirtió en lugar favorito de la nueva pareja en sus periodos vacacionales. Allí, incluso, hicieron piña con la familia Gil y Gil, acudiendo a los numerosos ágapes que organizaba el exalcalde marbellí.

Amigos del escritor, como el biólogo Francisco García Marquina y el editor Pedro Serra, aseguran que él afirmaba que de la única mujer de la que se enamoró de verdad fue de Marina. Y aunque fue hombre de muchas mujeres, desde febrero de 1991, cuando su relación con la locutora quedó consolidada, no se le conocen nuevas aventuras.

Dicen que Cela, convertido en un anciano con barriga, se volvió un hombre preso del amor por Marina, una mujer mucho más joven. Cuando se conocieron, ella contaba con solo 27 años y él casi 68. Marina, menuda y encantadora, lo cautivó: “Los grandes hombres siempre han necesitado sangre joven a su lado para seguir siendo jóvenes”, llegaría a decir. La amplia diferencia de edad no alteró sus proyectos: “Camilo decía que somos inevitables y yo añado imprescindibles, lo de la edad es un topicazo; entre nosotros, el joven era él”.

Una mujer con vestido negro y chal rojo junto a un hombre mayor con esmoquin y pajarita posan en una escalera elegante
Marina Castaño y Camilo José Cela. | Europapress

Para ella, su vida antes de encontrarse con el Nobel era fabulosa, aunque no lo parecía. “Yo vivía divinamente antes de irme a vivir con Camilo José. Tenía dos casas, un coche, un trabajo magnífico y estaba muy bien considerada. Y todo, todo lo he dejado por él. Me he convertido en su niñera, y es un placer”.

En ese contexto emocional, él decía sentirse en paz: “Ahora gozo de un equilibrio emocional que no siempre he tenido. Es algo parecido a la felicidad”.

Marina dio un paso decisivo en su relación cuando, el 10 de marzo de 1991, se casaron civilmente, con separación de bienes. La novia, en blanco y Chanel, y el escritor, elegantemente vestido, celebraron el enlace en la finca El Espinar, acompañados solo por selectos amigos, entre ellos la jueza, su hermano, Carmen Balcells y su propia madre e hija. El cóctel fue íntimo y sin fotógrafos, salvo alguna imagen filtrada después.

El matrimonio religioso llegó el 29 de junio de 1998, en Puerta de Hierro (Madrid). Tras lograr su nulidad matrimonial eclesiástica, ambos se casaron por la Iglesia en una ceremonia muy privada. El escritor dijo al terminar: “Ahora sí que estoy en paz con Dios… porque también conviene tener los papeles en regla con él”.

Marina trató de quedarse embarazada, creyó estarlo en los primeros meses de la relación, pero no fue así. Sus creencias religiosas también la llevaron a expresar públicamente opiniones muy conservadoras sobre la familia y la maternidad. Como que “un ser humano sale de la unión de un hombre y una mujer” y que “tener un hijo homosexual me rompería los esquemas”. Un comentario que suscitó polémica y luego matizó con un recordatorio afectuoso sobre la importancia del cariño.

Mujer rubia con gafas de sol, abrigo oscuro y bufanda azul caminando junto a una columna de concreto mientras lleva un bolso marrón
Marina Castaño. | Europapress

Se volcó en apoyar al escritor y colaboró en medios. Escribió columnas en ABC, participó en programas de radio como 'A toda radio', en Telecinco, la revista '¡Hola!' y Telemadrid. Cela falleció el 17 de enero de 2002 en Madrid por insuficiencia cardíaca. Antes de morir, pidió al doctor que lo escuchó: “Cuida de Marina, parece frágil pero no lo es. Cuídala, porque esta criatura se lo merece”.

Tras su muerte, Marina inició una nueva etapa. Aunque heredó inicialmente el patrimonio, pronto se vio envuelta en litigios con el hijo del escritor, que recuperó buena parte de la herencia tras una larga batalla judicial.

Hoy, Marina Castaño vive en calma y discreción. Dejando atrás el ruido mediático y las controversias, lleva una existencia estable junto a su marido en su residencia de Puerta de Hierro. Aunque nuevas participaciones televisivas ocasionales emergen, su vida actual se distingue por la contención, alejada del brillo mediático que marcó épocas pasadas.

➡️ People ➡️ Historia ➡️ Madrid ➡️ Cultura

Más noticias: