Joni D, el primer okupa de España: Ahora empresario, hipotecado y anticapitalista
El catalán Joni D mantiene intactos sus ideales, pero su estilo de vida es muy distinto al okupa punki de hace 40 años
No son pocas las veces que escuchamos aquello de que ‘la vida da muchas vueltas’. Y tanto que las da. A veces esas vueltas se ponen de nuestra parte, pero otras tantas nos vapulean.
Uno de los casos del primer escenario, el de los afortunados, es el de Joni D. Su nombre verdadero es Jesús Sahún, pero fue bajo ese alias cuando hace cuarenta años se convertía en el primer okupa de España.
‘Joni D’, que ahora tiene 56 años, capitaneó, con tan solo 16, lo que fue la primera okupación de España. Era el líder de una banda de punkis que decidieron tomar un viejo ambulatorio abandonado del barrio de Gràcia, en Barcelona.
Líder del Movimiento Okupa de los 80
Fue entonces cuando nacía en España y en la cultura popular el movimiento okupa, que actualmente sigue teniendo tanta presencia.
En 1984, cuando nació este movimiento, la okupación era un mecanismo de denuncia ante el gobierno y los grupos políticos para defender el derecho a la vivienda frente a problemas económicos. El término utilizó la letra ‘k’ y no la ‘c’, como símbolo de trasgresión.
Empezó con la okupación de viviendas, locales o solares deshabitados o en estado de abandono. Y lo hizo en Barcelona, con Joni D como cabecilla de la operación.
Fue El Periódico de Catalunya el que por entonces se encargó de titular la acción como ‘Nacen en Barcelona los ocupa-pisos’. No solo marcó la historia de España, por el movimiento sociocultural que se había puesto en marcha. Sino que la cara de Joni circulaba por las calles de muchas ciudades convirtiéndose en una referencia.
Un estilo de vida que mantuvo durante varios años. Una cultura punk que defendía y combinaba con la revolución del activismo político.
Con el paso del tiempo, la vida de Joni D ha cambiado de manera radical.
Padre, empresario y con hipoteca
Tras militar con el movimiento en diferentes ciudades durante varios años, en 1996 optó por cambiar el rumbo. Su pareja se quedó embarazada. Iban a ser padres y pensó en darle un giro a su vida.
“Decidí dedicarme a la música desde la organización, como mánager de grupo”, dice el que fuera okupa en una entrevista para El Mundo. Tras convertirse en padre, lo siguiente fue comprase una casa, por la que aún sigue pagando la hipoteca.
Sin embargo, aún defiende sus ideas. En esa misma entrevista confiesa que aunque su situación sea diferente, no reniega del movimiento ni se mantiene al margen. Sigue pensando que "aquellos que roban a los ciudadanos" y hacen que “cientos de personas se suiciden, son los responsables y tienen que pagar”.
Aunque ya no permanece en activo en el movimiento okupa, se mantiene enemigo del capitalismo. “Muchos que antes nos veían como un peligro, ahora nos entienden”, afirma. Y desmiente eso que acapara muchos titulares, consiguiendo asustar a algunas familias: cuando vuelvan de vacaciones su casa puede estar okupada.
“Todo eso que se está poniendo de moda decir, eso de que entran y echan a una familia, es mentira. Otra cosa es que tengas una segunda vivienda...”, suscribe.
Joni D confiesa que sigue pendiente de la actividad okupa actual. Y “alaba” la labor de los okupas de ahora frente a los de su generación. Los modernos se preocuparían de comprobar en el Registro de la Propiedad el tiempo que lleva la vivienda vacía.
Actualmente, no solo es que tenga una hipoteca, algo común para casi toda la población. También es empresario de su propio sello discográfico, que montó con su mujer hace ya veinte años.
Se trata de la discográfica Kasba Music, con la que produce unos diez discos al año y trata de dar visibilidad a artistas underground desconocidos. El punk, hip-hop y flamenco son los principales géneros que trabaja con artistas de espíritu alternativo.
Más noticias: