Jaime Ostos, la historia de un torero 'inmortal': De la gloria y amores a la tragedia

El Ateneo de Madrid acogió este martes un coloquio-conversación sobre el libro Jaime Ostos, sin filtros escrito por la doctora María Ángeles Grajal. Se trata de la última esposa del recordado y extraordinario torero Jaime Ostos, figura que destacó en el mundo del toro más de cuarenta años. En su trayectoria, Ostos fue contratado para las mejores plazas y ocupó los carteles más importantes de España y el resto del mundo.

Jaime Ostos Carmona nació en Écija el 8 de abril de 1931. Desarrolló su carrera en los años 60 y 70 y salió en una ocasión por la puerta grande de Las Ventas.

Debutó con público en Écija el 1 de junio de 1952, junto a su paisano Bartolomé Jiménez Torres. Su padre le echó de casa por querer ser torero y fue Jiménez Torres quien lo acogió y ayudó a realizar su deseo.

Con Bartolomé, a pesar de la amistad, mantenía en los ruedos una gran rivalidad cuando eran novilleros. Tanto, que la afición de Écija estaba dividida entre uno y otro en los cosos taurinos. Su debut con picadores tuvo lugar en Osuna el 5 de abril de 1953. Y también junto a Bartolomé, con novillos de Arturo Pérez Fernández.

La alternativa la tomó el 13 de octubre de 1956 en la plaza de toros de Zaragoza, apadrinado por Miguel Báez "Litri". De testigo actuaba Antonio Ordóñez. A esa corrida asistió Ernest Hemingway, muy aficionado a la fiesta, con el que mantuvo una gran amistad. 

La puerta grande de Jaime Ostos

​En 1962 salió por la puerta grande de Las Ventas. Ese año lideró el escalafón taurino junto con Diego Puerta, con 79 corridas. Fue el mejor año de toda su carrera, ya que posteriormente sufrió veinticinco cornadas.

Considerado un torero valiente y de muy buena técnica, el manejo de la muleta y la espada, y la suerte suprema fueron sus mejores virtudes.

Sería difícil extenderse más sobre la vida de matador de toros de Jaime Ostos, porque llenaríamos libros. Incluso con más hojas que el escrito y presentado por su viuda María Angeles Grajal.

Según parece, está en su mayor parte redactado por el propio matador, dando puntos y comas a María Ángeles con la intención de escribirlo él. Pero en la intención se quedó. Falleció en Bogotá el 8 de enero del 2022, después de pasar una noche muy animado y tras una cena con amigos.

Los amores de Ostos

Jaime tuvo una relación con Lita Trujillo Korpa, que fue esposa del hijo del presidente Trujillo, Ramsés Ramfis Trujillo.  Ramfis murió y Lita se quedó viuda en 1969. Heredó la fortuna de su marido, las propiedades y su afición a los toros.

Esta afición la llevaba a asistir a las plazas para ver a los mejores toreros de los años 70. Fue cuando se enamoró de Jaime Ostos e iniciaron un romance. Entonces, el torero estaba casado con María del Consuelo Alcalá Rubio, con la que tenía dos hijos, Gabriela y Jaime. Este matrimonio se rompió el mismo año en que Jaime empezaba su relación con Lita, 1969.

Se puede decir de Ostos que era un personaje elegante, simpático y agradable en el trato. Su mejor condición era no hablar mal de nadie, lo que le permitía tener muchos amigos. Además de ser absolutamente conocido en todas partes por su físico característico. Y entregado al papel cuché desde el mismo momento en el que ponía un pie en la calle.

Con la doctora neumóloga María Ángeles Grajal se casó por primera vez en 1987. Pasados unos años, la situación se volvió insostenible entre ellos.

En 1993 tuvieron a su hijo Jacobo. Hoy por hoy, Jacobo Ostos acumula 'conflictos'. A la muerte de su padre, la relación con sus hermanos Jaime y Gabriela no solo se ha deteriorado. Existe un capítulo de juzgados y 'guerras' televisivas por la herencia de su padre.

Después de muchas tensiones y disputas, Jaime Ostos y Ángeles Grajal hicieron las paces y se volvieron a casar en el 2015. Según parece, en secreto y por la iglesia, ya que después de haberse separado y divorciado, volvían a ser solteros. La presencia de un hijo de ambos, Jacobo, les comprometía moralmente a ser un a familia. Jaime, con una cierta edad, se convenció de que era lo mejor.

El libro Jaime Ostos, sin filtros de María Ángeles se ha lanzado como un homenaje al torero. No se describen, sin embargo, los detalles de la vida que mantuvo Jaime con Lita. Fue el rejoneador Ángel Peralta el que la presentó al que sería su compañero de vida.

"Lita fue el amor de su vida hasta su muerte, a pesar de estar casado con María Angeles Grajal", decía refiriéndose a Jaime Ostos. Por su parte, Lita nunca quiso definir su relación. En una ocasión, dijo: “Ni novio, ni pareja, ni formalidad, ni nada de eso. Cuando estábamos juntos, juntos; y cuando no era así, separados. Esa es la historia. No hay ninguna otra. Nunca miento”, aseveró.

En el Ateneo, este martes vimos mucho público. Amigos, prensa y curiosos de la busca y captura de comentarios de estos protagonistas de la sociedad. Unos personajes admirados por estar presentes en las revistas de la crónica social española.