Belén Junco, autora y directora de ¡Hola!: 'Nunca se nos ha llamado de Zarzuela'

Belén Junco se ha pasado toda su vida profesional en ¡Hola!, una revista fundada por su familia y que es uno delos grandes fenómenos periodísticos de España. Ahora, lanza su primera novela, La reina de Nairobi (La Esfera de los Libros). Un relato sobre una mujer que decide romper con su vida llena de comodidades para buscar la felicidad en África. 

- ¿Por qué África?

- Es un lugar que me encanta, lo he visitado, he vivido, visto películas... A veces pasan esas cosas que te identificas con una gente, unos colores, una tierra... En el libro quería que quedara clara esa fascinación pero a través de una visión del que la vive, en este caso, la protagonista. 

- La protagonista es una profesional de éxito en una ciudad europea, en este caso Londres, que decide dejarlo todo para irse a África. ¿Hay algo de autobiográfico?

- De mí son las sensaciones, cómo se resuelven las situaciones. En lo puramente narrativo, no hay nada. Mi protagonista es vive un dilema familiar y decide cortar con todo. Es una mujer empoderada que decide vivir libre es una salida hacia adelante en el que bagaje de los vivide no le sirve de nada. Y lo hace sin pensarlo porque quiere ser feliz y la felicidad hay que trabajarla. 

- El desencadenante de todo es una infidelidad. Lo que le hace cambiar de vida. Es casi hasta una forma positiva de verlo. 

- Yo creo que la infidelidad es algo que se perdona a quién le convenga. Más que el hecho en sí lo que le molesta a la protagonista es que descubre una mentira y eso provoca una facción, parte en dos todo lo que ha creado. Entiende que la vida que se ha construido no merece la pena. 

- Trabajando en ¡Hola!, ¿no es caer en el tópico debutar en la literatura con una novela rosa? 

- He trabajado en ¡Hola! toda mi vida y quería que mi primera novela fuese de amor. Pero es narrativa. No tiene nada que ver con mi trabajo. No quiero aparentar nada. No tengo aires de grandeza y lo que quiero entretener.  En eso soy muy humilde. Lo que tenía claro es que quería hablar del amor en todas sus formas. 

- Durante años muchos intelectuales han mirado por encima del hombo a ¡Hola!, empezando por Vargas Llosa en su libro La civilización del espectáculo y ha acabado siendo uno de sus protagonistas. 

- Yo me siento orgullosísima de pertenecer a ¡Hola!. Es un trabajo muy serio. Como cualquier periodista nos dedicamos a trasladar noticias de personas y personajes. Como cualquier otro prefesional en su género y eso se puede hacer bien o mal. Soy de las abanderadas de trabjar en la publicación. Entretener es elemental y a eso nos dedicamos, a entretener, asombrar, y dar a conocer cómo viven los demás. 

- ¿Puede que le vengan esas críticas por tener, para muchos, un perfil de publicación conservadora?

- Puede ser. Siempre se ha hablado mal y regular de todos. La postura de todos, desde la eduación, tiene que ser respetabale. 

- Lo que es indudable es que la revista es todo un fenómeno. ¿Cuál es su secreto?

- Conectar con los lectores. Los fundadores dieron en el clavo de lo que necesitaba la sociedad cuando salió al mercado en 1944. Siempre se ha buscado tener una imagen cuidada. Hemos mantenido un culto por lo visual que nos ha hecho llegar hasta aquí. 

- La revista siempre ha estado vinculada a la información de la Casa Real. ¿Cómo han conseguido conbinar su defensa de la institución con informar de los acontecimientos menos agradables que se han dado en los último años?

- Informando con respeto. Hemos trasladado la vida de nuestra Famlia Real, igual que de las otras monarquías europeas. No vamos a hablar de ideologías, pero vamos del brazo de las monarquía. No somos periodismo de opinión y eso hace que las relaciones son más fáciles. Obviamente es son institución, pero no parecen en la publicación por intereses políticos. Se infomra de sus avatares, siempre desde el respeto. Como con otro tipo de personajes. 

- Sorprendió mucho aquella portada de 2012 con Corinna.

- ¡Hola! siempre está en la cresta de la información. Fue una decisión de la dirección y creo que acertada. Con ella no existía ya el ocultar, puesto que había dado una entrevista a un periódico nacional. Demostraba que era independiente. Nunca hemos parado informaciones que se basan en dar voz al protagonista para que cuente su verdad. 

- Eso rompe con la leyenda de que en ¡Hola! se escribire al dictado de Zarzuela. 

- Nunca ha habido censura en la revista, ni se nos ha llamado de Zarzuela. Nosotros publicamos lo que creemos que es informativo. Eso sí, siempre que sea verdad y no rumor. 

- Una portada que sí fue histórica a nivel político fue el reportaje con Adolfo Suárez en Moncloa en 1977. ¿Por qué ahora no se producen este tipo de portadas? 

- Nos recibió en familia en Moncloa. Era una manera de explicar que eraa otros años con respecto a la época anterior. Con toda naturalidad. Fue una noticia, es verdad. Luego se repitió con la familia de González y la de José María Aznar. Eran reportajes familiares importantes para el tipo de publicación que es ¡Hola! y, además, las tres representaban tres tipos de familias distintas en nuestro país. Ahora, lo cierto, es que ellos mismos no facilitan ese acercamiento. 

- Otra portada histórica fue la de este pasado verano con Esther Doña anunciando su boda con Santiago Pedraz. El mismo día se desmentía el compromiso. ¿Qué pasó realmente?

- Bueno, ella misma se ha convertido en un personaje. Viuda del marqués de Griñón, mujer del padre de Tamara Falcó... Lo que que ocurrió hay que achacarlo a la frescura de los sentimientos. Sólo puedo decir que no fue un fallo nuestro. Es la primera vez que nos ha pasado y espero que se la última. 

- Hablando de Tamar Falcó. Llamó mucho la atención que decidiera anunciar su compromiso con Iñigo Onieva en Instagram y no en ¡Hola!

- Es un mujer tan independiente ya, tan instagramer... que tiene que pensar cómo hacer las cosas. Ahora, sin embargo, su reconciliación la ha anuncadio con nosotros. 

- Se habla mucho de la crisis de personajes en la prensa del corazón. En ¡Hola! habéis apostado por descar a influencers como María Pombo. 

- Es que es un gran personaje. Si no lo consideramos, estamos errando. Además, ella en sus redes traslada una vida tan ¡Hola!, que nos encanta. Es cercana a lo que interesa a nuestros lectores. Por otro lado, los influencers cada vez comunican mejor y son más profesionales. 

- ¿Cómo afectan las redes sociales al mercado de las exclusivas? 

- Instagram ha hecho que la información esté en todos los lugares. Estamos viviendo una revolución periódistica. Los contentido han ganado en frescura, pero eso hace que tengamos que tener más cuidado. Una información puede cambiar de un día para otro. Nos temos que ir adaptando.