Cincelar la inmortalidad

Absorber el alma que nos interpela preguntándonos y profundizando en la armoniosa geometría de la mullida palabra. Que peregrina haciendo el camino hacía la poesía que cauteriza las heridas del espejo de agua.

Que parece que pretendiera realizar una investigación del inconsciente. Esta puede ser el área pulsátil sistólica de: 'Voces del Extremo'.

'Voces del Extremo' es un Encuentro Internacional de Creadores y cuyo "padre" es Antonio Orihuela, hombre muy comprometido con las causas sociales e inasible al desaliento.

Este festival cumplió 25 años de existencia en el año 2023. Con ese motivo, además del señor Orihuela, los escritores Ana Deacracia, Javier Sánchez Durán y María Luisa Domínguez Borrallo han tenido la magnífica idea de impulsar una antología. Una "gran" antología, ya que mide más de un metro de alta por 75 cm de ancha, y que la componemos todos.

Todos los que hemos tenido a bien participar y que formamos parte de la "familia de Voces del Extremo", que compartimos compromiso social. Agradecida de estar incluida en este proyecto. Nuestros textos van acompañados de unas majestuosas obras pictóricas, de artistas de mucho prestigio.

Son de la talla de Pedro Rodríguez (que además es el autor de la portada del libro). Conozco a Pedro y he estado en su estudio, que es un verdadero museo). También están presentes las pinturas de María Dolores Luque Jiménez, Rocío López Zarandieta, Miguel Ángel Concepción y Juan Carlos Castro Crespo. 

Este volumen tiene un importante valor sentimental para todos los que lo componemos, además de cooperativo y artístico. Asimismo va a formar parte de los fondos de la Fundación Juan Ramón Jiménez.

Desde la oralidad el camino trazador emprende la expedición a la trastienda de la poesía para no llegar tarde a la esperanza que transita y atraviesa sus propias tormentas. Las caracolas que hablan en secreto de confesión se desprenden de todas las máscaras y se preguntan. ¿Cuándo se cierra una llaga que ignora su cicatriz? 

La vida con las manos llenas sobrevive a la piel habitada que cincela la inmortalidad. Esto puede ser la esencia de la poesía social.

Los secretos de la luz que transfigura y profana la conciencia colectiva. Es plantar cara al olvido. Es un viaje a las profundidades de las catatumbas de recorrido reconocible y propio, tendedero comunitario sobre el que sujetamos nuestras creaciones.

Es un grito contra la indiferencia que aprende a mirar. Fortaleza que decide amurallar sus fronteras. Caleidoscopio de singularidad.

Esto es el sentir de todos los que formamos parte de este libro.

Código cifrado que da sentido y trascendencia, construye y justifica nuestra vida. Plumas hilvanadas que forman letras, pinceladas. Viaje migratorio, en el que se entabla un diálogo entre las pinturas y los textos.

Nos hace sentirnos más "yo" que nunca. Es búsqueda, desafío, experimentación, es un ejercicio de liberación, inconmensurable y expresiva plenitud.

Es la elocuencia del silencio que pone voz al ritmo de la respiración de la creación...